El déficit de piezas para reparar las máquinas compromete la cosecha de arroz y la escasez de agua, la siembra de primavera
Tras asegurar la siembra invernal, sobre la que descansa más de la mitad del arroz del año, la campaña del 2015 en la Empresa Agroindustrial de Granos (EAIG) Sur del Jíbaro arrancaba con buen paso; sin embargo, la falta de piezas para alistar el parque de cosechadoras y otros medios comienza a tensar desde bien temprano la recién iniciada cosecha, avizorándose la necesidad de refuerzos de máquinas desde otras provincias de no solucionarse la reparación.
Si bien este obstáculo parece superable, el verdadero aguafiestas de la contienda arrocera es, hasta el momento, el déficit de líquido en la presa Zaza, razón que motivó la paralización de la siembra de primavera hasta tanto llegue, desde el cielo, la recuperación del embalse.
Ricardo Hernández Rodríguez, director de Mecanización y Logística en la empresa, informó que se planificaron plantar 30 196 hectáreas, de las cuales 15 700 corresponden a la siembra de frío
—enmarcada entre noviembre y febrero—, una etapa distinguida no solo por superar lo previsto, sino también porque funcionó el escalonamiento del cultivo a partir del oportuno laboreo de la tierra, el aseguramiento del fertilizante y otros recursos, unido a mejor respuesta de la aviación.
“EL arroz de frío se ve muy bueno, ahora se trata de cosecharlo en tiempo y en estas primeras semanas de corte se experimenta un rendimiento mayor a las 5 toneladas por hectárea; tenemos 16 máquinas en el campo de las 49 con que contamos, pero la situación de las piezas para reparar es crítica y, ese parque, como está, no asegura la recolección, de ahí que el Grupo Nacional se ha pronunciado en tal sentido para apoyar con técnica de otros territorios y corresponder a la demanda de corte”, manifestó Hernández Rodríguez.
La EAIG Sur del Jíbaro aspira a producir 124 399 toneladas de arroz húmedo, 70 000 de ellas en las áreas de frío y el resto dependerá de la siembra de primavera, en tanto asume un encargo de entregar 53 800 toneladas del cereal listo para consumir, cifras aproximadas al año anterior.
Pese a los contratiempos de las reparaciones y las limitaciones de agua a causa de la sequía, el programa arrocero de la provincia, concentrado en más de un 90 por ciento en La Sierpe, da continuidad a las inversiones con un financiamiento de 18 millones de pesos aprobados para este año que permitirá acometer trabajos en las áreas de la industria, la infraestructura de riego y caminos, así como respaldar labores de nivelación de suelo.
De acuerdo con la propia fuente, la campaña concentra más del 60 por ciento de la producción en las Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC) y en segundo escalón aparece el sector campesino, a la vez que Sur del Jíbaro aporta alrededor de la cuarta parte del arroz del país, distribuido en más de la mitad de las provincias y en dependencias turísticas desde La Habana hasta Ciego de Ávila.
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