Romper el récord de entrega de leche al Estado, que databa de 1983, constituye uno de los hechos económicos más relevantes de Sancti Spíritus en el 2015
La costa sur de La Sierpe no es el infierno, pero si de plagas de mosquitos y jejenes se trata, no le queda muy ancho ese traje. Quien lo dude que le pregunte a José Sorí Pacheco, un guajiro experto en ordeñar más de 40 vacas; “algunas noches son tan bravas que hay que soltar la ubre constantemente porque las manos casi se ocupan más de espantar el enjambre, que del ordeño”, dice.
No se piense que estamos en presencia de un suicida de la ganadería, este campesino nació en El Toro, a orillas del mar y ordeñar —revela— ha sido la rutina principal de su vida. En las últimas décadas, como asociado de la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) Camilo Cienfuegos, ancló el rebaño en la finca La Crisis, un rincón situado al fondo de Las Nuevas, de donde han salido para la comercialización más de 17 000 litros de leche.
“Tengo un toro genético semental que me ha dado buen resultado, pero, oiga, a veces te dan ganas de correr cuando te ves en plena madrugada en medio del fango, con la plaga arriba de ti; valga la luz porque tenemos paneles solares y, mire, hay algo curioso, adonde está el ganado no se acerca el mosquito, pero con el jején no hay arreglo”.
No todos los ganaderos de la provincia asumen sus jornadas en tan singulares circunstancias; mas la obra moldeada a puro ordeño manual toma ribetes relevantes dentro del contexto económico: Sancti Spíritus sobrepasa la mayor cifra de entrega de leche al Estado, 44.2 millones de litros, una producción registrada en 1983.
DESPUNTE PRODUCTIVO
Pudieran citarse varios adjetivos para calificar un resultado que expresa compromiso, organización, respaldo y constancia laboral, porque tal nivel productivo, más allá de los resortes estimulantes que lo acompañan, tiene una reconocida dosis de trabajo. Manejar el rebaño y la reproducción, atender la alimentación y extraer la leche —en un 99 por ciento por vía manual— devienen obligaciones los 365 días del año para los cerca de 12 000 productores involucrados en la actividad.
Es cierto que la actual producción solo cubre el reparto normado, las dietas médicas y algún que otro destino estatal, pues desde que se declaró el período especial el alimento pasó a ser un renglón balanceado nacionalmente; contrario a 1983, cuando el producto estaba prácticamente por la libre y también el arribo de leche en polvo importada era un cotidianidad en Cuba.
Lázaro Rodríguez Álvarez, jefe del Departamento de Producción en la subdelegación ganadera, va a los archivos y explica que en aquella fecha el 90 por ciento de los animales se concentraban en el Estado, existía el doble de la masa vacuna actual, también garantía de piensos importados y el sistema estaba montado sobre la base de tecnología de punta. Hoy el sector cooperativo y campesino aporta cerca del 90 por ciento de la producción anual.
Sin borrar el dilema entre la producción y la cobertura de la distribución, el buen año lechero que consuma el territorio tiene méritos propios, sobre todo si consideramos el impacto de la sequía en la primera mitad del período, al punto que la provincia cerró junio con atrasos en el plan y a partir de julio se enyugaron las precipitaciones con la nueva política de precios de compra; más de la mitad del compromiso se ha producido en el segundo semestre, subraya Lázaro Rodríguez.
A juicio del especialista, el comportamiento de los nacimientos
—con 3 368 más que el año anterior— determinó en el resultado y otro sostén radica en el funcionamiento de 128 puntos de frío.
“Había lugares que no acopiaban leche —expresa—, ahora con el termo en la zona al productor le es más factible la entrega sin tener que permanecer horas en un camino a la espera del carro; no solo aumenta la venta, mejoró mucho la calidad por las pruebas que allí mismo se realizan”.
Tampoco pueden obviarse las irregularidades en la industria láctea a lo largo de la etapa con el traslado y la distribución del producto, realidades en las que inciden, junto a causas subjetivas, el deterioro tecnológico y el envejecimiento del parque de transporte, todo lo cual despertó no pocas inconformidades en la población.
Elevar el techo de la venta de leche al Estado hasta niveles cercanos a los 44.5 millones de litros no significa que la provincia esté al tope de la potencialidad, pues mucho falta por hacer en el área técnica, la infraestructura, el manejo y el control; en materia de disponibilidad de comida, de seguir aprovechando los residuos de cosechas y suplementos alimenticios fabricados en el territorio, aun cuando los entendidos reconocen que ha sido el año de mejor uso de tales alternativas.
ARROZ CON LECHE
De un tiempo hacia acá La Sierpe ha ensanchado los horizontes productivos y a los tradicionales renglones, como arroz y carne, se le ha sumado la leche. Sin agotar las potencialidades, el municipio exhibe el trabajo más integral a nivel de provincia con una cifra superior a los 4 millones de litros en ventas al Estado.
“En años malos de arroz sube la leche porque se aprovechan las áreas”, sostienen conocedores de la ganadería en la zona y, en efecto, la producción se incrementa de un período a otro en más de medio millón de litros.
Casi el 70 por ciento de la leche acopiada proviene de las bases campesinas, entre las que se distingue la CCS Camilo Cienfuegos, que aporta más de un millón de litros y consigue la mayor producción desde que fuera creada en 1991.
Adolfo Mariño Pacheco, vicepresidente de la cooperativa, precisa que el 40 por ciento de esa producción sale en queso de campesinos aislados que están a más de los 6 kilómetros estipulados para acopiar el alimento hasta el punto refrigerado, en tanto, alerta sobre otra realidad: “Cuando se llega a fin de mes y se atrasa el pago, es mucha la leche y el queso que se desvía”.
En los alejados parajes de Las Nuevas muchos campesinos sortean las adversidades en el quehacer ganadero y en esa lista puede nombrarse a José Martínez, Jorge Mariño, José Pacheco, Esteban Aquino, Mario Osmín y Miguel Martínez; también a Carmen Hernández Noa, quien reconoce que el termo frío fue un gran alivio, igual que la tecnología de los paneles solares, “porque no es igual ordeñar con luz que al amparo de la chismosa, como quedan aquí varios productores y, siempre en medio del infierno de la plaga, si de día estorba, imagínese cómo será de noche…”.
PRODUCCIÓN DE LECHE ÚLTIMOS AÑOS AÑO PRODUCCIÓN TOTAL VENTAS CONTRATADAS 2010 48.8 (millones de litros) 42.1 2011 46.3 38.7 2012 48.3 39.0 2013 49.0 40.4 2014 50.2 41.4 2015 53.6 44.2
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Saludos Jose luis todo esta muy bueno y se reconocen lo logros de los campecinos pero en otras publicaciones del mismo tema les ofreci un campecino que lejos de ser recordista es sacrificado y tenas si lo investigas sacaras un reportage de un ganadero numero uno su nombre Gevacio Edilio Cañizarez Cañizarez de la finca la Auro en la nueva taguasco no se reconoce sus logros gracias a una persona que me reservo su nombre para no perder el interes de mi comentario espero me responda por mi correo si no quieres hacerlo publico un espirituano de pura sepa leo el escambray todo los sabado un saludo y feliz fin de año para ti y tu familia asi como a los trabajadores de esa editorial