Hiroshima Regalado: Me salvé en tablitas

Confiesa quien pudo ser víctima fatal de un accidente de tránsito ocurrido este mediodía en la Carretera Central de la ciudad de Sancti Spíritus, hecho que solo provocó algunos daños materiales

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“El vikingo me echó fresco. Cuando miré aquello se había desprendido y venía dando vueltas a una velocidad tremenda. Yo estaba vendiendo en el punto de venta de la casa de visita La Arboleda, pero la suerte fue que me había parado a conversar con un vecino de aquí y si él no me tira para arriba de la bicicleta, el vikingo me hubiera pasado por arriba. La verdad es que me salvé en tablitas”, narra aún con la voz entrecortada Hiroshima Regalado Gómez, quien es la gastronómica de dicha instalación perteneciente a la Empresa de Alojamiento Sancti Spíritus.

Vecinos del lugar revelaron a Escambray que el suceso, acaecido en la Carretera Central en las cercanías de la villa Los Laureles, tuvo lugar cuando esa especie de remolque se desenganchó del camión marca Roman —adscrito a la Empresa Provincial de Materias Primas— que lo transportaba y penetró en una propiedad privada aledaña a la carretera.

“Yo sentí el trastazo desde adentro de la casa —cuenta Alcides Hidalgo el dueño del terreno donde se logró frenar el vikingo— y vine a ver si había heridos. Menos mal que yo tenía un hueco en el que antes criaba tilapias y eso lo paró, además de las matas de plátano que lo aguantaron bastante”.

Mas, por suerte en aquel pedazo de carretera donde aún permanece el vikingo gomas arriba solo hay que lamentar, esta vez, un pedazo de cerca perimetral y unas cuantas matas de plátano derribadas y varios de los útiles que servían al punto de venta.