“Tengo que mantenerme actualizado por si un día vuelvo a la aviación”, decía a quienes le reprochaban su devoción imperturbable por la aeronáutica.
Quien fuera funcionario del Comité Provincial del Partido, miembro de su Buró Provincial, primer secretario del PCC en Jatibonico y presidente de la Asamblea Provincial del Poder Popular a finales de los años 90 falleció este domingo en la capital del país y por voluntad propia sus cenizas serán esparcidas en el aeropuerto espirituano, donde laboró por varios años. Escambray propone la siguiente crónica de José Luis Camellón, quien fuera compañero y amigo personal de Santillán:
Nunca imagine escribir el despegue de tu partida, tampoco hubiese aprobado este vuelo repentino que te separa físicamente de tu familia y amistades, de tantas encomiendas útiles que todavía Cuba necesitaba de ti.
Nada borra tu huella y las contribuciones que hiciste en cada pista por donde encarrilaste el trabajo. Nadie logró quitarte los sueños de aviador, por eso te vieron entrar en el aeródromo de Sancti Spíritus siendo casi un niño y fue esa tu casa durante varios años.
Después llegaron los estudios en la antigua Unión Soviética en la especialidad de ingeniero en motores de aeronáutica y el retorno al aeropuerto espirituano. Brotaron allí las primeras soluciones a motores que volvían a llevar alas al cielo.
Fue la vena innovadora la que te abrió el vínculo hacia otros ámbitos de la vida y, quizá sin sospecharlo, la sangre materna incorporada desde la Sierra Maestra te dotó también de los genes patrios. Secretario del Partido en el municipio de Jatibonico, miembro del Buró Provincial del PCC y Presidente de la Asamblea Provincial del Poder Popular aparecen entre esas ocupaciones cumbres.
Fueron apenas ocho o nueve años en escenarios que te exigieron aprendizaje y honda consagración. En vez de fuselajes e inyectores se te oía hablar de zafra, del Uruguay y aquella proeza de las 235 000 toneladas de azúcar; de nacimientos y mortalidad infantil, de obras sociales y tareas para la Defensa.
Quienes te compartieron admiraron tu inteligencia y capacidad organizadora, el humanismo detrás de un recio carácter y aquella voluntad para, por apretada que estuviera la agenda, hurgar en libros y gráficos de aviones. “Tengo que mantenerme actualizado porque un día regreso a la aviación”, repetías entonces.
Cuando la carrera política puso un alto en el camino, el cielo y las pistas acogieron tu regreso al mundo de los aviones. Corría 1998, era difícil que imaginaras cuantos encargos te deparaba aquel viaje a las raíces profesionales y el desvelo para hacerte Master en Mantenimiento y reparación de aviones y motores, en Ucrania.
Poco se conoce de tu aporte en la modernización de la flota aérea del país, al frente de las negociaciones para la adquisición de las aeronaves en Rusia; de tus responsabilidades como vicepresidente del área Técnica en el Instituto de Aeronáutica Civil, presidente de Cubana de Aviación y más reciente, como vicepresidente primero de la Corporación de la Aviación Civil Cubana SA.
Pocos saben de tu desempeño en la Operación Esperanza Social, aquel puente aéreo para desplazar los primeros médicos que arribaron a Venezuela, una misión que te cautivó por su humanismo y por los frecuentes contactos con el Jefe de la Revolución. Lástima que el tiempo no te dejara concluir el libro que escribías sobre tales hechos.
Tampoco es muy conocido el Reconocimiento que recibiste firmado por el propio Fidel, en virtud a tu ocupación en el traslado aéreo al país de las astas y otros materiales imprescindibles para la creación del Monte de las Banderas.
Fue la aviación el aeropuerto más fecundo de tu vida, pero un día el motor que bombeaba la sangre de tu fuselaje te avisó de una avería, por eso en la última etapa te golpearon las dolencias y te tocó abrir el pecho a varias operaciones; de la última se derivó el fatal desenlace.
Duele verte como pasajero de 62 años en este viaje sin regreso, luego de tantas horas de vuelo en las diversas pistas del trabajo y de legar contribuciones apreciables a la aeronáutica cubana, a Sancti Spíritus y a su aeropuerto, donde fueron esparcidas, por deseo propio, tus cenizas.
Para mi amigo Santillan de mi propia inspiración, anqué no soy poeta, pero siempre le estuve admiración y respeto.
Aquí va lo que le escribo:
AGOSTO TE TRAJO A LA VIDA, CON UN CORAZON GIGANTE, PARA HACERTE UN BALUARTE DE NUESTRA AVIACION QUERIDA.
PORQUE UNISTE CON ESMERO TU FUSIL DE GUERRILLERO Y TU MALETIN DE AVIADOR.
FUE TU OBRA TAN PROFUNDA, QUE SOBRE LA VIRTUD, DESPRECIASTE TU SALUD POR DARSELA AL MUNDO.
FUE TAN TIERNO Y TAN FECUNDO, TU GIGANTE CORAZON, INYECTANDO SIEMPRE CON TU ACCION, LA MALA DECISION.
TU LE ENSEÑASTE A TU AVIACION QUERIDA, QUE PUEDE SER UN HOMBRE MAS ALTO QUE SU NOMBRE, CON LA ANCHURA TE TU CUERPO NOS ENSEÑASTE CON TU EJEMPLO, CADA FRONTERA ROMPER, QUE LOS QUE QUIEREN SER COMO TU FUISTE Y SERAS, DEBEN CUMPLIRLO TODO EN EL DEBER.
CALA
Desde nuestra misión en la Representación Permanente de Cuba, en el Consejo de la OACI.
A muerto Ricardo Santillan Miranda,
Hemos recibido con dolor esta terrible noticia,
sabiamos por él mismo de lo riesgosa de su operación, pero albergabamos la esperanza de que sobreviviría,
Cuanta experiencia, madurez y fidelidad, que capacidad de dirección,
solo nos queda decir :
La muerte no es verdad cuando se ha cumplido bien la obra de la vida»
Santi como respetuosamente te deciamos, «Seguiremos tu ejemplo»
LLegue a su familia nuestro sincero pésame por tan lamentable pérdida
Representación de Cuba ante el Consejo de la OACI
Desde Qatar donde cumplo mision, he recibido con profundo dolor la muerte de tan querido amigo, respetado por su ejemplo, admirado por sus resultados, Lester , Samantha aqui esta tio Serafin unido a mama , abuelita y a todos los familiares en el dolor , y que el ejemplo de abuelo este presente siempre en ustedes, que los aliente en el estudio y superacion.
es un dia de dolor se ha perdido un gran hombre tuve la dicha de trabajar bien cerca de él en el gobierno provincial, aprendí muchas lecciones de dirección,la rapidez para tomar decisiones y que el tiempo es oro y por eso no se detenía en cosas que no lo ameritaban.
llegue mis condolencias a su familia y a mery mi amiga que a traves de ella siempre sabía de su vida y su salud. edith
EN HOMENAJE AL AMIGO SANTILLÁN
Cuando muere un compañero
se nos apaga una estrella,
pero nos deja su huella
en el camino señero.
Seguirá siendo cimero
en la senda ya escogida
y no existe despedida
a quien escribe la historia
porque estar en la memoria
es retornar a la vida.
A este hermano mio con quien labore bajo su dirección como Miembro del Buró Municipal del Partido en Jatibonico y despues desde mi responsabilidad como Vicepresidente del Consejo de la Adminitración y con quien mantuve magnificas relaciones de trabajo desde mi responsabilidad y él como Vicepresidente del IACC primero y luego como Vicepresidente de CACSA despues, puedo decir que pocas veces he conocido un revolucionario de su empuje y consagración, llegue a su esposa Estela, su hija Tahimi, sus nietos Lester y Samantha, sus hermanos y demás familiares y compañeros el mensaje de pésame por el deceso de uno de mis hermanos mas querido, Cheo.