Cientos de espirituanos se reunieron en la vía central de la ciudad para celebrar la efeméride
Celebran alborada libertaria en Fomento
Sancti Spíritus: celebran liberación del poblado de Mapos
Este 23 de diciembre han pasado 57 años desde que, aprovechando la estratagema de una tregua y el ataque sorpresivo por aviones a las posiciones en torno al cuartel del Ejército en las afueras de Sancti Spíritus, los cerca de 400 soldados y policías de la tiranía concentrados en el Escuadrón 38 escaparon en camiones rumbo a Jatibonico, dejando libre la ciudad en manos de sus moradores.
Desde la noche del 20, un pelotón reforzado de la Columna No. 8 del Ejército Rebelde al mando del capitán Erasmo Rodríguez, pseudónimo del dirigente proletario Armando Acosta Cordero, y el comando Juan Pedro Carbó Serviá, del Directorio Revolucionario 13 de Marzo (DR-13-M) habían penetrado en la población por el puente Balneario y el Camino de La Habana, respectivamente, para atacar posiciones del enemigo dentro del perímetro urbano.
Aunque las instrucciones que dio el Comandante Ernesto Che Guevara al capitán Erasmo se limitaban a avanzar hasta donde lo permitiera el enemigo y, si podía, incursionar en la ciudad y tirarle “unos tiritos”, la situación se mostró propicia para lanzarse más a fondo. Para entonces ya habían sido liberados Fomento el 18, Guayos el 21 y Cabaiguán el 22 en ese diciembre de vértigo.
Ya toda la zona en torno a la villa del Yayabo era territorio libre, pues después de la liberación de Guasimal y de controlar la parte sur —Natividad, Mapos y El Jíbaro—, los rebeldes ocuparon Taguasco, Zaza del Medio y Tuinucú, que fueron evacuados por las tropas de la tiranía de Fulgencio Batista.
Después de un primer intento de liberar la ciudad en la noche-madrugada del 20 al 21, entrando por el Puente Balneario, el pequeño destacamento de Erasmo Rodríguez se reunió con los ciudadanos en la parte vieja de la localidad, aledaña al río Yayabo.
Luego, la tropa del capitán Erasmo avanzó en dirección a la Colonia Española y la Iglesia Mayor, mientras avionetas del régimen ametrallaban la periferia y objetivos dentro del centro histórico. El adelanto continuó con rumbo noroeste por la calle Independencia y los rebeldes tirotearon la Jefatura de Policía.
Entretanto, el comando Juan Pedro Carbó Serviá, del Directorio, avanzaba en dirección contraria desde el oeste hacia el sur y el este de la villa, confluyendo con los del Movimiento 26 de Julio ante la Cárcel, que tirotearon, y a cuya guarnición exigieron dejar libres a los presos políticos. Poco después, los guardianes depusieron las armas.
CONTRA EL ÚLTIMO REDUCTO
Asaltar una posición fortificada que cuenta con tres trípodes calibre 30, una calibre 50, bazucas y morteros, y casi 400 defensores con diversas armas de infantería, no era cosa de juego. Erasmo lo sabe y autoriza el recurso propuesto de incendiar la techumbre de guano de las naves de exposición con cocteles molotov. Se desata el incendio, que aumenta el temor entre los sitiados, pero los “casquitos” ya se habían retirado hacia el recinto castrense.
A través de un juez de apellido Mendigutía se habló con el jefe de la guarnición enemiga cercada y se le intimó a que se rindiera. Este pidió una tregua hasta las tres de la tarde del 23 de diciembre, para dar respuesta. En torno al Escuadrón 38 ocupó posiciones un grupo de guerrilleros al mando del teniente Denis Antúnez.
De forma simultánea, grupos de rebeldes liderados por Acosta recorrían la ciudad y daban mítines preparando al pueblo para la hora de la victoria, que se presentía cercana.
Pero poco antes de concluir la tregua apareció la aviación del régimen y comenzó a ametrallar las posiciones rebeldes, momento que aprovechó la guarnición para montarse a toda prisa en camiones propios y requisados, y salir a escape por la Carretera Central rumbo a Jatibonico, protegidos desde el aire por la aviación del tirano.
En medio del bullicio fruto del júbilo desbordado de sus moradores, Sancti Spíritus se convertía en la ciudad- municipio más grande del país liberada por el Ejército Rebelde hasta aquel instante histórico.
CONMEMORAN LOS SUCESOS
Con disparos aislados y ráfagas de fusiles automáticos, Sancti Spíritus conmemoró esta mañana de miércoles el aniversario 57 de la liberación, cuando se convirtió en la ciudad más grande de Cuba en manos del pueblo.
El asalto simbólico a la villa fue parte de un acto político-cultural que contó con la presencia de veteranos participantes en aquellos acontecimientos inolvidables, junto a educadores, trabajadores de distintas ramas, dirigentes, estudiantes y pueblo en general, y donde no faltó la presencia de miembros de las instituciones armadas y las organizaciones de masas.
Como parte de la celebración, se entregaron carnés del Partido Comunista a un nutrido grupo de nuevos militantes de la organización política, y se reconoció a 15 entidades y organismos del territorio por su destacada labor a lo largo del año que termina.
En sus palabras conclusivas, Osbel Lorenzo Rodríguez, primer secretario del Partido en el municipio, hizo una síntesis de aquellos instantes irrepetibles y enumeró los logros de este más de medio siglo de construcción socialista, así como llamó a enfrentar con espíritu de victoria las tareas actuales en el camino hacia el desarrollo de Cuba.
La historia es la que es. Nadie puede negar la importancia historica de la toma de Santi Spiritus el 23 de Diciembre de 1958, por las tropas capitaneadas por Armando Acosta, sin duda, un golpe durísimo para la dictadura batistiana. También algun libro deberá recoger mas profundamente la trayectoria revolucionaria de este líder proletario, imprescindible para entender la historia de las luchas del moviento obrero de Las Villas en las luchas que precedieron al triunfo de la Revolucion.
Ayer en la noche en las efemerides de la television mencionaron para el dia 23 la Batalla de Coliseo que protagonizaron Antonio Maceo y Máximo Gómez contra el ejercito español, pero nada de la liberacion de Sancti Spiritus.