Los partticipantes en la Cumbre del G-20 condenaron todos los actos, métodos y prácticas de terrorismo, que no pueden ser justificados bajo ninguna circunstancia, sin importar sus motivaciones.
La Cumbre del G-20 en Turquía condenó este 16 de noviembre en los términos más fuertes los atentados terroristas registrados recientemente en París y en esta capital, al tiempo que reafirmó la decisión de permanecer unidos para combatir la violencia extremista.
En una declaración emitida al finalizar la cita de dos jornadas, los participantes consideraron que los hechos citados, el de Francia hace pocos días y el de Turquía en octubre, son inaceptables para la humanidad.
«Condenamos todos los actos, métodos y prácticas de terrorismo, que no pueden ser justificados bajo ninguna circunstancia, sin importar sus motivaciones», sostuvo en el documento el grupo de las naciones más industrializadas del planeta y otras emergentes.
Agregaron que la proliferación de organizaciones terroristas y el crecimiento significativo de este tipo de actos amenazan la preservación de la paz y la seguridad a nivel internacional, así como los esfuerzos dirigidos a fortalecer la economía global y asegurar el crecimiento sostenible.
El G-20 precisó que pretende desarrollar esa lucha a través de la cooperación y la solidaridad mundial, con reconocimiento pleno al rol central de las Naciones Unidas y a las obligaciones establecidas en el derecho internacional.
Alertó, además, que el terrorismo no puede asociarse a ninguna religión, nacionalidad, civilización o grupo étnico.
Los asistentes a la cita resaltaron la necesidad de poner en marcha acciones para bloquear las vías de financiamiento de la violencia extremista, y también de actuar de manera proactiva y preventiva ante el flagelo.
Aunque este formato surgido en 1999 tradicionalmente se dedica a debatir aspectos clave de la economía global, asuntos como el conflicto en Siria, la crisis de refugiados, y ahora los atentados en París, obligaron a darle un matiz más político a la agenda.
Respecto al flujo de indocumentados a Europa, considerado la peor crisis desde la Segunda Guerra Mundial, el G-20 instó a la cooperación entre todas las naciones para buscar soluciones a la problemática.
«Llamamos a todos los Estados a que contribuyan a dar una respuesta a esta crisis y a repartir la carga que implica, sobre todo en la distribución de refugiados, los derechos de entrada humanitaria y la ayuda humanitaria», indicó el texto.
Este año casi un millón de personas llegaron de forma irregular al denominado viejo continente para huir de los efectos de la guerra en países como Siria, Iraq, y Afganistán.
Otro asunto abordado fue el cambio climático, terreno en el cual el cónclave se pronunció por llegar a un acuerdo global y vinculante durante la Conferencia de Naciones Unidas prevista para dentro de pocas semanas en París.
El trato deberá establecer los esfuerzos conjuntos para limitar el aumento del calentamiento global a menos de dos grados centígrados, para lo cual se necesita el compromiso de todo el planeta.
Respecto a las cuestiones económicas, el grupo se mostró determinado a implementar acciones para impulsar un crecimiento sostenible y balanceado que propicie la prosperidad de los pueblos. «Somos firmes en nuestra resolución de asegurar un crecimiento robusto e inclusivo, así como proporcionar más empleo y de mejor calidad», señaló ekçl documento.
Para ello, se adoptó una agenda basada en tres pilares: implementar los compromisos pasados para cumplir las promesas, impulsar inversiones como vía para el crecimiento y promover la inclusión para que los beneficios lleguen a todas las personas.
A la cita asistieron mandatarios y altos representantes de los países más industrializados (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido), de la Unión Europea, y de naciones emergentes como Brasil, Argentina, China, Indonesia y México, entre otros.
La cumbre del próximo año tendrá lugar en China y la de 2017 se fijó en Alemania, informaron al concluir el evento.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.