El internacionalismo, el altruismo, la vocación humanista, son valores que tendremos que defender siempre, dijo el primer vicepresidente cubano, Miguel Díaz-Canel, a una representación de los colaboradores de su país en Namibia.
Esta fue la primera de las actividades de su agenda en esta nación austral, a la que llegó este jueves para participar en la ceremonia de investidura del presidente electo, Hage Geingob, y en las celebraciones por los 25 años de la independencia nacional.
Durante casi dos horas Díaz-Canel se interesó «por primero escucharlos a ustedes» y después hablarles de Cuba.
Fue así como antes de adentrarse en distintos temas precisó que en este momento en el país «estamos trabajando en dos escenarios: el económico e ideológico».
Abundó en el proceso de actualización del modelo económico cubano, los cambios demográficos en la isla, las aspiraciones por el logro de mayor calidad de vida, así como los caminos hacia la automatización e informatización de la sociedad.
Luego explicó el escenario entre Cuba y Estados Unidos con el anuncio del inicio del camino hacia el restablecimiento de las relaciones diplomáticas.
Estados Unidos tuvo que reconocer lo fallido de su política hacia Cuba, y eso es una victoria de la Revolución, enfatizó Díaz-Canel.
Se refirió a la resistencia del pueblo cubano y la solidaridad. Mencionó que América Latina hoy no es la misma y reiteró que «el bloqueo (de Estados Unidos) en su esencia no se tocó», es una batalla que hay que seguir dando, porque es el principal obstáculo.
Para que haya normalización de las relaciones entre La Habana y Washington «hay que eliminar el bloqueo, la base naval que usurpa parte del territorio nacional y que sean suspendidas las trasmisiones ilegales de radio y televisión».
El vicepresidente primero aseveró que «la de Namibia es una independencia que festejamos en Cuba por todo lo que hicimos de conjunto», en referencia a la contribución de los combatientes cubanos en la lucha por la liberación de Angola, Namibia y Sudáfrica. Saludó igualmente la celebración del aniversario 25 de las relaciones entre Cuba y Namibia, un hecho que ocurrió poco después de la liberación el 21 de marzo de 1990.
En ese propio año se inició la colaboración cubana con 19 internacionalistas de la salud, en cumplimiento de una solicitud del fundador y entonces presidente Sam Nujoma.
A partir de esa fecha la cifra osciló en alrededor de 150 cubanos y en la actualidad 139 colaboradores están en 13 de las 14 regiones namibias.
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