Con 21 años intenta dar la razón a quienes confiaron en él cuando más de un entrenador le dijo que no sería pelotero.
Estuvo como sus compañeros a dos outs de ser campeón y sellar una actuación brillante en el II Campeonato Nacional Sub-23; sin embargo, debió conformarse con un segundo lugar que hizo alianzas con el llamado síndrome espirituano.
Este fue para Yandiel Zayas su bautismo de fuego, cuando se hizo más visible para los espirituanos por sus batazos oportunos en semifinales (empujó tres de las cinco de su conjunto en esa fase y otras dos en la final) luego de irrumpir con su “tamañón” en la pasada temporada, después de una Serie Provincial donde reventó la pelota con su Fomento natal y se presentó como uno de los mejores talentos del béisbol local.
Con 1.94 de estatura y casi 100 kilogramos de peso, se define como un primera base natural, aunque juega además los jardines. Con 21 años intenta dar la razón a quienes confiaron en él cuando más de un entrenador le dijo que no sería pelotero.
“Comencé en la categoría 9-10 años, los resultados no fueron buenos y en el último año de 15-16 me dieron la baja en la EIDE Lino Salabarría con el argumento de que no sabía jugar béisbol. Pero mi papá y varios entrenadores fomentenses como Carlos Ibarra, Yaidel Cantero, Fredi Mario, y acá, Lázaro Santana y Orelbis Pérez, trabajaron conmigo, me subieron la autoestima y me dijeron que sí podía, luego pude ser regular con Fomento”.
Después atrajo el interés de Yovani Aragón, que lo incluyó en la nómina de los Gallos para ir “calentando motores”. La Sub-23, aunque le abrió espacio, pareció revolver viejos fantasmas cuando su promedio de 244 en 78 turnos aconsejó enviarlo al banco.
“En los entrenamientos estuve un poco disgustado, pues no había rendido y le dije a mis entrenadores que confiaran en mí, que lo que no había hecho en la clasificatoria, lo haría en la final. En cada turno observaba al pitcher, miraba con qué lanzamiento me dominaba e iba al home relajado, hasta que salían los batazos”.
¿Qué pasó en los dos últimos partidos?
“No creo que hayamos salido presionados. Nos dolió la derrota, pero salimos con la autoestima alta, a jugar el béisbol, solo que ellos lo hicieron mejor. No estoy conforme con el segundo lugar por el tremendo campeonato que tuvimos, además trajimos el pueblo al estadio, eso nos hacía falta, y ese pueblo debe haberse ido satisfecho porque lo dimos todo en el terreno a pesar de que no pudimos ganar”.
En unos días vuelve al terreno con dos retos importantes: “competir” ante Yunier Mendoza en primera base y tratar de quedar bien con Omar Linares, quien se refirió a él en términos elogiosos.
“Me he relajado más y la presión esa que tenía en mi primer año, se me ha ido un poco. Me siento como si estuviera jugando en el barrio, seguiré preparándome hasta que se me dé la oportunidad y hacerlo bien poco a poco. Sí, me estuvieron contando lo de Linares y lo agradezco, eso me compromete a esforzarme para tener un buen resultado”, concluye.
Sí estoy de acuerdo ese chico va ser grande lo tiene todo solo el tiene que creérselo ojalá le den la oportunidad para ver a alquien que va ser grande en la pelota,tiene el tamaño y la fuerza para eso y impone respeto en home.
Animo Yadiel Zayas
Casi 220 lbs y 1.94 m de altura, señor mio ese chamaco hay q trabajarlo, con 21 años es un diamante en bruto, imaginate el poder que puede desarrollar, sera pariente de Mazorca??, hace falta q siga trabajando mucho y duro pa q se consagre, bastante juego (ojala Mendoza se lo permita y Zulueta le de chance, aunque sea de emergente).
Le deseo mucha suerte. La verdad que no entiendo por que un entrenador, o un adulto en general, le dice a un chico que no sirve para algo.
En las grandes ligas unos de los mejores peloteros es hoy por hoy Jose Altuve a quien toda su vida en Venezuela le dijeron que era muy bajito o que tenia poco fisico y que no servia para pelotero.
Ojala Yandiel tenga la voluntad y trabaje duro para lograr lo que quiera, a pesar de los pesares.