La accidentalidad del tránsito en la provincia de Sancti Spíritus va en ascenso, con 38 accidentes, ocho muertos y 46 lesionados más que en igual período del 2015
La muerte está agazapada en las vías de la provincia. Permanece allí, oculta en las calles de las ciudades y en las carreteras, acechando a los conductores de vehículos y peatones indisciplinados que exponen sus vidas y las de sus semejantes.
Han transcurrido siete meses del actual año y la accidentalidad del tránsito en la provincia va en ascenso, con 38 accidentes, ocho muertos y 46 lesionados más que en igual período del 2015.
La situación es preocupante en los municipios de Cabaiguán, Jatibonico, Trinidad y Taguasco, territorios que en su conjunto reportan el 85 por ciento de los accidentes y el 66 de los fallecidos en el presente año. Por su parte, el 85 por ciento de los lesionados se concentra en los municipios de Cabaiguán, Jatibonico, Trinidad y Sancti Spíritus, aunque este último reduce los tres indicadores.
El recién terminado mes de julio solamente tuvo de positivo la no ocurrencia de fallecidos, pues tanto la accidentalidad como los heridos aumentaron respecto a similar período del año anterior.
En la capital provincial, los días previos a las festividades por el 26 de Julio y durante las fiestas populares, hubo una disminución de las indisciplinas; no obstante, se sacaron de circulación 49 vehículos de diversos tipos por violaciones reiteradas o peligrosas de las normas de seguridad vial, medida que se aplicó a 559 medios de transporte en la provincia en los primeros siete meses de este año.
De acuerdo con los análisis efectuados por la Unidad Provincial de Tránsito, las carreteras son las vías más proclives a accidentes fatales, pues en ellas tuvieron lugar más del 80 por ciento de los fallecidos, que ocurrieron por exceso de velocidad y adelantamientos indebidos, fundamentalmente. Una causa potencial de accidentes en zonas rurales es la circulación de vehículos de tracción animal y agrícola sin luces durante el anochecer y amanecer, situación que se reitera en el territorio, lo que demuestra falta de enfrentamiento a esta indisciplina vial.
Otras de las causas principales de los accidentes son las violaciones de las señales de Pare y Ceda el paso, el no respeto al derecho de vía y la circulación en sentido contrario, transgresiones graves que también necesitan de la acción de los órganos competentes.
Asimismo, es necesaria la imposición de multas correctivas a aquellas personas que como peatones incurren en un grupo de indisciplinas que conspiran contra una correcta circulación vial y además pueden provocar lamentables hechos en la vía pública.
Es cierto que evitar los accidentes está en manos de todos los que hacemos uso de la vía pública; no obstante, reiteramos la necesidad de un mayor enfrentamiento por parte de las fuerzas del Sistema de Policía en la provincia, en aras de bajar esos índices que hoy están disparados en relación con el año anterior. Es preferible mil veces multar o sancionar que tener que lamentar la pérdida de una vida humana.
Esto se resolveaá cuando las autoridades de tránsito cumplan con su función de estar en los lugares mas peligosos y ser vicibles, buscando prevención y no escondidos para poner multas donde no es peligroso y tomar medidas ejemplares con los violadores de las leyes del tránsito muchas gracias