El canciller Bruno Rodríguez reiteró el apoyo de Cuba a los esfuerzos de Colombia por la paz y agradeció los llamados de las cumbres iberoamericanas a que finalice el bloqueo estadounidense contra la isla
Al intervenir en el segmento de alto nivel de ese cónclave, el ministro de Relaciones Exteriores cubano mencionó algunos de los males que perjudican de manera directa a los jóvenes de la región, tema central de la cita.
Cómo encontrar articulación entre los propósitos planteados en los documentos de esta cumbre con la realidad que viven hoy en un mundo lleno de guerra, de crecientes amenazas a la paz, de exorbitantes gastos en armamentos, de militarización, empleo agresivo y banalización del ciberespacio, de golpes de Estado, dobles raseros, robo de cerebros a los países del sur, preguntó.
Rodríguez recordó que la pobreza, el desempleo y las insuficientes oportunidades educativas son flagelos que golpean también a ese grupo etario.
La búsqueda de soluciones para esta realidad pasa inexorablemente por el acceso universal y gratuito a una educación de calidad, a adecuados servicios de salud, empleo digno y seguro, a un entorno sin violencia, manifestó.
En su opinión transformar tal panorama no depende sólo de
recursos sino de voluntad política.
Incluso en tiempos de crisis en ciertos países se aprecian avances alentadores, es el caso de Venezuela a la que reiteramos nuestra infinita solidaridad, subrayó.
Finalmente el jefe de la diplomacia cubana destacó algunos de los logros de su patria en la atención a la juventud.
En la isla son actores esenciales del acontecer social, económico, político y cultural; el 82 por ciento estudia, trabaja o realiza ambas actividades, a las instancias legislativas e instituciones transmiten dinamismo, votan desde los 16 años y a los 18 pueden ejercer como diputados y ostentar cargos públicos, representan el 28 por ciento de los científicos, precisó.
Gracias por los apoyos, pero es suficiente. El pueblo colombiano puede ocuparse de resolver sus problemas.