Tras una demostración discreta en todo el torneo, el equipo de Ciego de Ávila respira en la Serie del Caribe
Tal como sucedió hace un año, los cubanos necesitaron de solo una victoria para pasar entre los cuatro aspirantes al título.
Para lograrla debieron exprimir a los locales, que aún cuando mostraron muy buenos partidos, terminó por perder su tercer extrainning. Victoria es victoria y es, lo que cuenta en un torneo tan volátil y donde solo uno se queda fuera. Pero el triunfo no puede cegarnos de euforia
Ha sido esta una presentación discreta la de los avileños-cubanos, que en general han sido fieles a la concepción de nuestro béisbol al llevar hasta República Dominicana las mismas carencias conque jugamos nuestros clásicos nacionales.
No solo porque estadísticamente le ha fallado casi todo, en particular un pitcheo endeble, inconsistente y falto de confianza. Los lanzadores cubanos han dado muestras de un apagado pensamiento técnico táctico y un descontrol manifiesto.
Su efectividad es la peor del torneo con 6.08 carreras limpias permitidas y 25 boletos, más del doble del conjunto que le sigue. Los que conocen de béisbol dicen que ese exceso tiene que ver con la falta de concentración y también el exceso de nervios.
Y así como el box carece de ese lanzador confiable y al seguro, con el bateo ha sucedido algo similar. No tiene esta versión de equipo Cuba de Ávila de un líder ofensivo, ese que al estilo del boricua Neftalí Soto se eche el equipo a cuestas y lo saque de apuros en momentos picos.
Finalmente Yulieski Gourriel tradujo su profuso bateo en una carrera oportuna y decisiva al menos para empatar en el partido de la noche del sábado y José Adolis García mostró que tiene madera de oportunidad pues un acto similar hizo en Toronto para decidir.
Pero vuelven a enseñar nuestros bateadores las mismas carencias del béisbol doméstico: insuficiencias para discriminar lances, nervios para conectar cuando hace falta, debilidades para tocar y poca rapidez en el corrido de las bases, algo distintivo del resto de los equipos, pese a tener hombres de mucho mayor biotipo y fortaleza que los nuestros.
Lo más cuestionable en la dirección del béisbol nacional en la insostenible decisión de llevar a Alfredo Despaigne cuando estaba de vacaciones en su casa sin entrenar y luego la tozudez de Roger Machado de mantenerlo en el cuarto bate cuando visiblemente está fuera de forma. Tal postura de inamovible sin argumentos, ni le favorece al béisbol ni al prestigio del propio pelotero.
Otra de las insuficiencias repetidas en la Serie del Caribe es el escándalo mediático provocado por Roger Machado cuando declinó asistir a la conferencia de prensa luego de perder el primer partido. Es la misma postura que asumen algunos managers cubanos que deciden ir a tales actos solo cuando ganan, aunque justo es decir que acá cuentan con la complicidad de la prensa que permitimos tales manifestaciones de irrespeto y malcriadez.
El torneo ha exhibido rivalidad y muy buenos partidos, pero ha enseñado deudas cualitativas, sobre todo en la defensa con tres equipos con average por debajo de los 960 y no ha logrado colmar el graderío.
Ciego de Cuba respira en la Serie del Caribe y es lo que cuenta. Aun pueden revertir ese mal sabor que sus presentaciones han dejado en la afición, no por sus tres derrotas que al final no contaron para su clasificación, sino por la manera aplastante en que ocurrieron al menos las dos primeras.
Habrá que ver si como ocurrió hace un año, esta versión del Cuba logra aprobar el examen del cruce y nos devuelve, sino la confianza, al menos una noche de alegría aunque volvamos a tener los nervios de punta.
El unico juego q se gano y q casi se pierde por cosas q no se por q aun suceden….El ultimo ining por q abrir con Lahera con todo lo q habia lanzado y con dos de ventaja…despues traen a Cano, q al no funcionar traen a su cerrador y mas experimentado, q en realidad tenia q haber abierto ese inning. Pero algo q me tenia con los pelos de puntas…con hombres en tercera y segunda q representaba el empate, Jose Ange nunca ni siquiera miro hacia segunda base….nadie se daba cuenta de eso? Ni el catcher ni nadie del banco? Esas cosas no tiene nada q ver con la calidad de los jugadores ni con las deserciones…es problema de direccion q se ven mas nerviosos q los mismos jugadores, a los cuales no les transmiten confianza ni enseñanza.
Soy Espirituano por lo tanto Cubano y mi deporte preferido el Beisboll , se que hoy carecemos de grandes peloteros y con basta experiencia en estas series , y capaces de hacer brillar a Cuba y su béisbol , tanto nacional como internacional , y ésto considero no sea una duda para nadie , pero hoy no podemos contar con muchos de ellos , pero tenemos que enfrentarnos a esos equipos de la forma que nos toque hacerlo , y considero que Roger Machado lo sabe hacer , así que esperemos algo más de lo actual