La IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) sesionará en Ecuador el 27 de enero con la participación de representantes de los 33 países miembros del organismo
Los coordinadores nacionales de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) se reúnen este 24 de enero en Quito para discutir los documentos que se adoptaran en la IV Cumbre del bloque regional, a celebrarse en Ecuador el miércoles próximo.
Según los organizadores, la reunión de este domingo y mañana lunes tendrá lugar en la sede de la cancillería ecuatoriana, sin acceso a la prensa.
Los coordinadores de los 33 países miembros del organismo integracionista fundada en 2010 delinearán la agenda que abordarán los ministros de Relaciones Exteriores el martes próximo, y el informe de la gestión de Ecuador como presidente pro tempore de la Celac durante 2015
La víspera, durante su tradicional informe semanal de labores a la ciudadanía, el presidente ecuatoriano Rafael Correa anunció que 22 jefes de Estado o Gobierno ya confirmaron su asistencia a la cumbre prevista para el 27 de enero en la sede de la Unión de Naciones Suramericanas, ubicada en la ciudad Mitad del Mundo, a unos 15 kilómetros al norte de Quito.
Este miércoles, la Patria se viste de gala con la cumbre de la Celac, aseveró el mandatario, tras apuntar que todo está listo para la cita que reunirá a todos las naciones del continente americano, excepto Estados Unidos y Canadá.
El canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, comentó, por su parte, que los gobernantes o sus representantes hablarán de la paz, del progreso de «nuestra América», y de la crisis que afecta a la región.
Será una oportunidad más para que Ecuador demuestre ese espíritu integracionista, para que los países tengan la oportunidad de discutir de sus problemas y aspiraciones, acotó el funcionario.
Adelantó además que la llamada Agenda 2020, que fue adoptada en la III Cumbre realizada el año pasado en Costa Rica se seguirá negociando en Quito.
No nos debemos desesperar, lo más importante aquí es alcanzar el más absoluto consenso para tener una agenda regional, expresó el jefe de la diplomacia ecuatoriana.
El documento aprobado en 2015 contempla cinco ejes de trabajo: erradicación de la pobreza extrema y la desigualdad, educación, ciencia y tecnología, la lucha contra el cambio climático, financiamiento para el desarrollo e infraestructura.
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