Con un mapa, un borrador y una tiza se puede dar una excelente clase de Historia, sostienen los especialistas en el foro online de Escambray
Por más que Francis Fukuyama proclamara en 1992 sus tesis sobre el fin de la Historia y por más que el presidente norteamericano Barack Obama en su reciente visita a La Habana exhortara a Cuba a olvidar el pasado común entre ambas naciones, esta isla se niega rotundamente a hacer borrón y cuenta nueva con su ayer.
De ahí que resulte imprescindible para los cubanos no solo conocer las fechas y personalidades que marcaron hitos en el devenir de la nación, sino sobre todo descubrir los procesos históricos en su integralidad, los conflictos y motivaciones personales y sociales que fueron configurando nuestra identidad.
Consciente de la importancia de la enseñanza de la Historia de Cuba para la formación del ciudadano y el futuro del país, Escambray abre sus páginas este martes 20 de septiembre desde la 2:00 p.m. a un foro online con la presencia de MsC. Carlos Gómez González, reconocido profesor de Historia de la provincia; Dr. Ramón Reigosa Lorenzo, presidente de la Unión Nacional de Historiadores de Cuba en Sancti Spíritus, y, MsC. Goberto Solano Cruz, metodólogo de Historia de Cuba, quienes responderán las preguntas que sobre el tema han venido enviando los internautas a este propio espacio.
Marcos: ¿Creen que el pueblo cubano es un pueblo conocedor de su historia?
Carlos Gómez: El pueblo conocedor de su historia sí es, porque la ha vivido, la ha construido y la ha desarrollado a través del tiempo.
Ramón Reigosa: Comparto la opinión de Carlos. El pueblo no conoce toda la historia como nosotros quisiéramos, pero sí a partir de la cantidad de horas-clases de Historia que se da en la enseñanza general desde el nivel primario hasta preuniversitario, unas 640 horas de Historia de Cuba. En todas las carreras universitarias se estudia la Historia de Cuba. Eso siempre deja un nivel de conocimientos. Ahora, nosotros como profesores estamos conscientes de que el pueblo no conoce toda la que debía conocer ni con la profundidad que debía conocerla.
Carlos Gómez: Hay otro elemento que es el contacto que tiene el individuo desde pequeño con todos los medios que divulgan lo mejor de las tradiciones patrióticas que, convertidas en acciones y hechos, son parte del conocimiento de la Historia. No significa que sean solo 64o horas de contacto de la persona con la historia.
Mercedes C: ¿Por qué no se imparte prácticamente la historia local en nuestro sistema de enseñanza, si en casi todos los escenarios se aboga por ello? ¿Conocerán realmente nuestros estudiantes las dimensiones, por ejemplo, de la Protesta de Jarao o la ofensiva de las fuerzas revolucionaria acontecida en la provincia protagonizada por el Frente de Las Villas y el Frente Norte de Las Villas, comandados por el Che y Camilo?
Goberto Solano: A partir de quinto grado, que es cuando comienza la enseñanza de la Historia de Cuba, está orientado que en cada unidad cuando corresponden hechos históricos de un período determinado se inserten conocimientos de la historia de la comunidad.
Carlos Gómez: No es que sea una preocupación, sino que es una ocupación del Ministerio de Educación y de todas las instituciones que tienen que ver con ello para la promoción de la historia local. No es que exista un programa de Historia Local, sino un grupo de contenidos, huella histórica de la localidad que se incorpora para fortalecer el programa nacional de Historia. Por ejemplo, la protesta de Jarao para nosotros los espirituanos ocupa un espacio fundamental en la rebeldía y la continuidad del pueblo espirituano en la lucha cuando todos habían depuesto las armas. Para nosotros es tan importante a nivel local como la Protesta de Baraguá y sería imperdonable que en cualquier nivel de enseñanza el 15 de abril de cada año no haya un encuentro en Sancti Spíritus con ese hecho. Ese hecho forma parte del territorio, pero no tiene que formar parte de la historia de Guantánamo. Eso es algo que todavía hay que ganar, a pesar de que en 2004 el doctor Reigosa fue uno de los partícipes de la concepción de un programa que se generalizó en 2007, aproximadamente, en el programa de Historia.
Ramón Reigosa: Nosotros sabemos que, a pesar de que está orientado, no se enseña la historia local como debería. Coincido con la lectora que pregunta. Existe el sistema de conocimientos que está orientado insertar, metodológicamente está orientado lo que cada territorio debe impartir y qué debe impartir toda la provincia, pero lo real es que no se da como hay que darlo. Es una responsabilidad de cada maestro y hay además un problema de conocimientos, porque no siempre hay tampoco fuentes de información. La historia de Sancti Spíritus está íntegramente digital, el sistema de contenidos está disponible en todas las computadoras de las escuelas de la provincia, pero las copias impresas no están al alcance de todos los lectores. Un maestro, para preparar su clase de historia local, tiene que ir a las computadoras y no es fácil, no siempre tiene el tiempo cuando imparte también otro ámbito de conocimientos. Coincido en que no se da como tiene que darse y parte de un desconocimiento de los maestros, que son los que la tienen que impartir.
Goberto Solano: El maestro joven que comienza no tiene por dónde prepararse, por tanto es también responsabilidad de los que dirigen. No podemos amar nuestra nación si no amamos el lugar donde vivimos.
Ramón Reigosa: Estamos hablando de una generalidad porque también hay casos de maestros que lo hacen, que buscan información, que se preparan e imparten la historia local como es. Si hay una gran insatisfacción es esa, que no se estudia como debería la historia del terruño, del lugar donde vives, es la historia que te crea el sentido de pertenencia. Hay mucha chapucería en la enseñanza de la historia, hay maestros que orientan tareas que ni ellos mismos saben, que llevan información que no está al alcance de los niños. Para poner una tarea hay que orientar bien al estudiante y decirle cómo pueden investigar. Para investigar en archivos y museos también los profesores deben coordinar.
Panchito el de Jibacoa: Saludo la iniciativa de debatir un tema tan importante para nuestra sociedad. Mi pregunta concreta es la siguiente: ¿Hasta qué punto se ha avanzado en la provincia en la enseñanza de la historia local? Lo pregunto porque mientras le sigamos diciendo a los muchachos que, antes de morir, Serafín Sánchez se paró en los estribos y le dijo a los suyos: “Me han matado, no es nada, que siga la marcha” habríamos avanzado muy poco. Una cosa es que los maestros le pongan como tarea a los niños que investiguen lo que ni ellos mismos saben y otra es realmente enseñar la historia local. Saludos desde Jibacoa.
Ramón Reigosa: En ese ejemplo en específico es cierto que se han creado mitos en la enseñanza de la historia, existen criterios bastante generalizados de que Serafín al caer herido no pudo haber dicho esa frase filosófica, la historia se recoge porque las seis personas que estaban más cercanas a Serafín hicieron referencia a esa frase. Lo importante es que nos hemos quedado con el valor simbólico de la expresión «Siga la marcha».
Víctor Beltrán: Yo estoy realmente preocupado con el hecho de que la historia de 1959 hasta la actualidad no se esté impartiendo como es debido en nuestras escuelas. Se enseñan las primeras medidas revolucionarias, pero no se enseña la reacción que provocaron en un grupo no desestimable de intelectuales cubanos y del mundo; se enseña muy por arribita lo que pasó en la LCB, pero no se enseña casi nada de los años 80 y 90, que tan importantes fueron en la situación que tenemos hoy. ¿Qué piensan los especialistas al respecto?
Ramón Reigosa: Es una gran realidad lo que describe el lector. Esa es una etapa difícil porque es donde más dispersa está la bibliografía. Si hay textos emblemáticos en Cuba de la historia anterior, sobre esa etapa no los hay. Ese período se da con más profundidad en la universidad. Hay una etapa del 59 hacia acá que ni siquiera está escrita, es una deuda de la historiografía cubana describir la historia de la Revolución. Hay libros, pero que compendian hasta los años 80, la del período especial no está escrita. Se han escrito pinceladas, pero nada integral. Es, además, muy complejo porque tiene vivos a los protagonistas, lo cual implica un gran problema, porque hay contradicciones entre las versiones y es muy sensible escribir porque se pueden herir sensibilidades.
Carlos Gómez: Al estar tan cercana en el tiempo los que la transmitimos a veces creemos que los alumnos la conocen también. Damos por sobreentendido que los demás saben de lo que estamos hablando y a veces olvidamos que las generaciones más jóvenes necesitan que se les enseñe y describa. Coincido con Reigosa en que es difícil escribir con los protagonistas vivos.
Goberto Solano: En este momento el Mined está actualizando todos los libros de texto y van a incluir la historia nacional hasta el año 2014, aproximadamente. De modo que en el 2018, más o menos, ya podremos contar con planes de estudio que recojan estos procesos más contemporáneos.
Mileydi Cabrales: En estos días se ha hablado mucho del déficit de maestros y profesores en nuestro sistema de enseñanza. Quisiera saber cómo navega la Historia en este contexto, también tenemos déficit en la formación de profesores de historia.
Ramón Reigosa: Hay déficit de profesores en las escuelas, que se han suplido con alternativas, y hay déficit en la formación. En la carrera de Marxismo e Historia, donde se forman los profesores de la asignatura, hoy tenemos solo 15 estudiantes en dos grupos, uno en segudo año y otro en cuarto de la carrera, en el caso del Curso Regular Diurno. Tenemos alumnos en el Curso para Trabajadores pero esos son los maestros que están en ejercicio y se superan; esos ya están frente al aula, pero la inyección de maestros nuevos al sistema de Educación impartiendo Historia está en el Curso Regular Diurno. De esos solo tenemos 15 y este año no pudimos abrir la especialidad. ¿Cómo vamos a resolver el problema de los maestros? No lo sabemos. La situación es crítica y no sabemos cómo vamos a resolverlo. Si el país no toma una medida con la situación económica de los maestros y mientras hayan sectores con salarios mucho más promisorios que los maestros, estaremos lejos de resolver ese problema.
Goberto Solano: El Mined ha tratado de estimular más la formación vocacional hacia las carreras pedagógicas, en el caso de la primaria el déficit no es tanto, pero en otras enseñanzas sí es complicada la situación. Se hace todo lo posible por suplir las carencias, pero hay que seguir trabajando, para ver de qué forma conseguimos estimular el estudio de la Historia de Cuba.
Ramón Reigosa: Se hacen todas estas estrategias, pero después el alumno va a la casa y la familia no quiere que estudie carreras pedagógicas. Todo el mundo quiere tener un buen maestro, pero la familia no estimula la formación de sus hijos como maestros.
MBarroso: Una de las vías para promover valores y no olvidar la historia es la celebración de los actos conmemorativos por determinadas fechas históricas. ¿Los especialistas consideran que falta creatividad en su concepción para que el de este año no sea casi idéntico al del anterior? ¿Por qué un pionero se dirige al público con las palabras de las personas mayores?
Ramón Reigosa: Estoy 100 por ciento de acuerdo. A veces los actos, más que promover el conocimiento histórico, lo que hace es atentar contra la Historia. Un acto mal planificado deja huellas negativas, eso es verdad. En aras de que las cosas queden bien, se le hace un discurso a un pionero que lee, y cualquier que observa se da cuenta si es auténtico o no. Los discursos a veces son los mismos. A veces hiere hasta la sensibilidad de los protagonistas.
Goberto Solano: Cuando se hacen solo para cumplir pasan estas cosas.
Lucas 2001: Hasta hace unos años Sancti Spíritus fue la cuarta villa fundada, a raíz de los 500 años Camagüey fue la cuarta, Remedios que es la octava villa fundada hizo su celebración primero que Santiago de Cuba que según lo que me enseñaron no era ese el orden de la fundación. Hasta cuándo vamos a permitir esos errores tan grandes o es que la historia cambió. ¿Hay alguna proyección para enmendar eso?
Carlos Gómez: Mientras la ciencia histórica no diga lo contrario, debemos mantener lo que nuestros libros de texto han dicho hasta ahora en lo relativo al orden de fundación de las villas. Remedios no está reconocida por la Corona española como una villa nombrada antes de 1545. Otra cosa es el manejo que se le ha ido dando en el contexto actual de la celebración de los aniversario 500 de las primeras villas.
Ramón Reigosa: El criterio de nosotros es que no ha cambiado nada, el orden fundacional es el mismo que se ha dado hasta el momento. El sistema de Educación ha orientado que se respete ese orden en todos los niveles de enseñanza. Hay un grupo de historiadores que hemos protestado en todos los espacios en los que lo hemos podido hacer. Eso crea un problema tremendo en todo el país. ¿Cómo usted le explica a su hijos que Sancti Spíritus es la cuarta villa y Camagüey celebra antes su medio milenio? Ninguna de esas villas tiene respaldo en la ciencia para sostener eso. Son procesos fundacionales que se iniciaron en un período pero que tienen al menos un conocimiento en la Historia. Si se demuestra con argumentos suficientes hay que cambiar la historia, los libros de textos, pero hasta ahora no existen esos argumentos. La metodología de Hortensia Pichardo, que es por la que se guía la historiografía cubana, no es compatible con otras que están surgiendo ahora y que no están avaladas. Diego Velázquez era el único que podía fundar villas en nombre de la Corona española. Desde nuestro punto de vista debe respetarse el orden fundacional, pero es tremendo problema. En mi opinión es responsabilidad de los políticos. El historiador Rolando Rodríguez dijo públicamente en Sancti Spíritus que hacer eso es un error y que la historia se encargará de enmendarlo. Explicó que hay un pronunciamiento de la Academia de Historia de Cuba sobre ello, pero hasta el momento no hemos tenido acceso a ese pronunciamiento. Cualquier decisión que se tome que afecte la enseñanza de la Historia no puede ser tomada unilateralmente.
Lucía: ¿Por qué la enseñanza de la Historia se hace de forma tan mecánica, dogmática? ¿Por qué no se prueban métodos más atractivos?
Ramón Reigosa: Los métodos dependen del profesor, de quien da la clase, porque ni siqueira tienes que tener como profesor el gran recurso tecnológico, porque lo importante es vivir la historia. Si está el recurso, mejor, pero eso no se le puede pedir a cada escuelita en un lugar apartado. Un profesor de historia sentado en un buró dictando nunca va a dar una buena clase. Siempre que se pueda, se puede usar el recurso, pero no se puede depender de la tecnología. La tecnología ayuda, pero usted con un mapa, un borrador y una tiza en la mano puede dar una excelente clase de Historia de Cuba.
Carlos Gómez: Incorporar la parte artística a la clase de Historia es también incorporar más lo anecdótico y no solo basarlo en el elemento científico. La historia no puede darse solo en blancos y negros, porque los hombres que la hicieron no eran solo malos o buenos. Nosotros no podemos hablar de José Miguel Gómez solo como «El Tiburón», sino que hay que darlo con todos sus matices porque arrastró pueblo y llegó a presidente de la República. Se equivocaron como hombres que fueron, pero también tuvieron carisma. No dar los claroscuros hacen de la historia una asignatura difícil de digerir. Esos son los poquitos que muchas veces faltan. En 45 minutos hay que tener metodología para encantar a los muchachos con los contenidos.
Goberto Solano: Todo depende de que al maestro le guste la historia, porque si no se motiva con ella, no podrá impartirla de forma atractiva. Actualmente en las escuelas hay softwares educativos y museos virtuales que permiten poner en contexto al alumno, que sirven para apoyar la asignatura. Tenemos también La Mochila y Para que te eduques, unos paquetes que se encuentran en las direcciones municipales de Educación y que no siempre llegan a las escuelas. Los programas semanales por el Canal Educativo están también perfeccionándose para que sean más atractivos para los niños.
Ramón Reigosa: La colección Historia Patria es un compendio que se puede emplear en mayor medida y sin embargo ve para las escuelas para que averigües cuántas lo están usando. Tiene productos audiovisuales que se pudieran emplear en mayor medida. No tenemos todos los recursos en las escuelas y los que tenemos no los usamos lo suficiente. Pero sigo diciendo que lo principal es la buena clase, la capacidad del maestro para impartir una conferencia interesante. Lo otro es el perfeccionamiento de los libros de texto, que tanta falta hace.
Evis Ginarte: ¿Por qué se utilizan tan poco recursos al alcance de todos los maestros, nuevos o experimentados, como los museos, los sitios históricos, tarjas, monumentos, por cierto, mal cuidados en no pocos casos?
Ramón Reigosa: Como historiadores no estamos satisfechos con el cuidado que se le da a los monumentos y sitios históricos en el territorio. Nosotros como provincia no nos destacamos precisamente por eso. Ciego de Ávila, por ejemplo, cuida muy bien sus monumentos y hasta nos han disputado sitios, que después mantienen muy bien. Existe la indicación de que se cuiden los monumentos, el Mined ha indicado que los propios estudiantes vayan a esos sitios, a los museos, porque dónde mejor que en esos lugares para aprender la historia, pero esas posibilidades se aprovechan muy poco. Es complicado porque tiene que ver con horarios, con el control de los niños y jóvenes, el cuidado de ellos.
Goberto Solano: En la primaria se han creado turnos de actividades complementarias que han dado resultado, se aprovecha en la visita a museos, a entrevistas con combatientes.
Carlos Gómez: La enseñanza primaria es la que mejor resultados tiene en este sentido, ya en la secundaria y otros niveles de enseñanza no es así.
Creo que como se enseña la historia en nuestro país no permite que el estudiante aprenda a pensar por sí solo, a armarse de criterios propios para que después pueda defender las cosas en las que cree sin que parezca un papagayo que repite los mismos cuentos de los libros de primaria. Mis preguntas a los invitados son las siguientes:
1-¿Creen que el pueblo cubano es un pueblo conocedor de su historia?
2-¿Qué cambiarían para lograr que la juventud cubana no se parezca tanto a la de estos tiempos, tan desapegada a nuestros valores de antaño?
Un abrazo para todos y todas.
a) ¿Por qué no se imparte prácticamente la historia local en nuestro sistema de enseñanza, si en casi todos los escenarios se aboga por ello? ¿Conocerán realmente nuestros estudiantes las dimensiones, por ejemplo, de la Protesta de Jarao o la ofensiva de las fuerzas revolucionaria acontecida en la provincia protagonizada por el Frente de Las Villas y el Frente Norte de Las Villas, comandados por el Che y Camilo?
Tengo que reconocer que para nada me gusta la historia de cuba. Me parece muy aburrida, sobre todo por la forma en que se enseña. De cualquier manera me parece muy importante no desconocerla pero cómo lograr que jóvenes como yo se interesen por ella?
Indudablemente que una parte de la culpa de que a muchas personas no les interese la historia recae sobre los profesores que la han impartido, pero con el tiempo lo jóvenes deben percatarse de la importancia que tiene para cualquier persona concoer la historia de su país y también la universal, alguien dijo un día «si no sabes de donde vienes nunca sabrás hacia donde vas» (lo estoy parafraseando). El conocimiento de la historia es básico para cualquier persona y más para las que son instruidas, y este país, aunque mucha gente no lo quiera reconocer es de gente instruida, con conocimientos, y parte de esa instrucción está nbecesariamente el conocimiento de la historia de Cuba, que son en mi modesta opinión las bases del patriotismo. Es muy difícil decir soy patriota si usted no conoce la historia de su país, te pongo un ejemplo: como evaluar la política de los Estados Unidos hacia Cuba en la actualidad si no conocemos en profundidad la historia de la relación de ese país con Cuba desde tiempos tan lejanos como el año 1773 cuando en carta enviada por John Adams, importante figura de la guerra de independencia y segundo presidente de ese país, a Robert R. Livingston, donde se refería a las islas del Caribe como: «…. apéndices naturales del continente americano (…} es casi imposible resistir la convicción de que la anexión de Cuba a nuestra República Federal será indispensable para la continuación de la Unión… desde entonces ellos han soñado con apoderarse de Cuba, no ha habido una década desde ese entonces en que ellos intentaran de una u otra forma anexionarnos. Muchas gracias
Muy buena la idea de Escambray de este foro, mi pregunta es la siguiente, hasta unos años Sancti Spíritus fue la cuarta villa fundada, a raíz de los 500 años Camagüey fue la cuarta, Remedios que es la octava villa fundada hizo su celebración primero que Santiago de Cuba que según lo que me enseñaron no era ese el orden de la fundación hasta cuándo vamos a permitir esos errores tan grande o es que la historia cambio. Hay alguna proyección para enmendar eso.
Saludo la iniciativa de debatir un tema tan importante para nuestra sociedad. Mi pregunta concreta es la siguiente: ¿Hasta qué punto se ha avanzado en la provincia en la enseñanza de la historia local? Lo pregunto porque mientras le sigamos diciendo a los muchachos que, antes de morir, Serafín Sánchez se paró en los estribos y le dijo a los suyos «Me han matado, no es nada, que siga la marcha» habríamos avanzado muy poco. Una cosa es que los maestros le pongan como tarea a los niños que investiguen lo que ni ellos mismos saben y otra es realmente enseñar la historia local. Saludos desde Jibacoa.
Saludos, gracias por la oportunidad de interrogar y opinar.
Alguna vez leí en esta misma publicación criterios de reconocidos historiadores acerca de imperdonables pifias en la enseñanza de nuestra historia, distorsiones, confusiones y vacíos que no concuerdan con la necesidad de preservar todo el legado de esta nación, al que han contribuido tanto hombres y mujeres grandes y valiosos.
Quisiera saber, sin adornos ni muchas teorías, qué hacen en concreto los historiadores para que la educación en esta provincia termine de padecer de ese mal tan peligroso. Ya sabemos que muchos maestros salen de las aulas al graduarse con conocimientos prendidos por alfileres, pareciera que este mal está condenado a ser eterno, ¿será así?
sorrobam1949@gmail.com
FELICITO A ESCAMBRAY POR LA INICIATIVA DE ESTE FORO. MI PREGUNTA ES LA SIGUIENTE:
Una de las vías para promover valores y no olvidar la historia es la celebración de los actos conmemorativos por determinadas fechas históricas. ¿Los especialitas consideran que falta creatividad en su concepción para que el de este año no sea casi idéntico al del anterior? ¿Por qué un pionero se dirige al público con las palabras de las personas mayores?
VEO CON MUCHA PREOCUPACIÓN ESTOS PROBLEMAS. FIDEL DIJO QUE HABÍA QUE CAMBIAR TODO LO QUE DEBÍA SER CAMBIADO. DISCULPEN, FUERON DOS PREGUNTAS. MUCHAS GRACIAS.
Yo estoy realmente preocupado con el hecho de que la historia de 1959 hasta la actualidad no se esté impartiendo como es debido en nuestras escuelas. Se enseñan las primeras medidas revolucionarias, pero no se enseña la reacción que provocaron en un grupo no desestimable de intelectuales cubanos y del mundo; se enseña muy por arribita lo que pasó en la LCB, pero no se enseña casi nada de los años 80 y 90, que tan importantes fueron en la situación que tenemos hoy. ¿Qué piensan los especialistas al respecto?
Muchas gracias por traer este tema al debate, es muy necesario, sobre todo para los que tenemos hijos y vemos con preocupación cómo no les interesa la historia de su Patria o se interesan por ciertas tergiversaciones de ella.
1. ¿Cómo se puede enfrentar el enorme reto de enseñar la historia de Cuba con todos sus claroscuros si muchas veces los propios maestros que están frente al aula tienen un conocimiento epidérmico de la historia de su país?
2. ¿Por qué los planes de estudio priorizan la enseñanza memorística de fechas, causas y consecuencias y valoración a personalidades y no hace hincapié en los procesos en su integralidad? Yo he percibido que mi hijo, que ya está en la universidad, tiene una visión fragmentada de la historia cubana.
Gracias.
No creo q se trate de olvidar las cosas q han pasadomporque la perdida de seres queridos no tiene forma de olvidarse, creo que de lo que se trata es de aunque no olvidemos si podamos seguir adelante trabajando tan bien como hasta ahora se ha realizado de manera brillante y profecional con etica elejados de formas de resentimiento, basandonos y pensando q aun y cuando hay muchos cubanos q perdieron muchos otros por el contrario tiene seres queridos q viven en los EUA que ha sido el lugar de migracion por exelencia de los cubanos, debemos pensar en los cubanos que viven en la isla pero tambien en los que viven fuera de ella que son tan cubanos como nosostros porque ser cubano no es ser de un partido o de otro, es haber nacido en esta isla y amarla estemos donde estemos. Aunque algunos asegueren lo contrario le respeto el criterio.