Las FARC-EP ha registrado oficialmente al partido político que les representará durante los debates para aprobar las decenas de reformas que va a requerir su aplicación, la primera de ellas la Ley de Amnistía
Tras ser aprobada la “vía rápida” para la implementación de los Acuerdos de Paz por parte de la Corte Constitucional de Colombia, las FARC-EP ha registrado oficialmente al partido político que les representará durante los debates para aprobar las decenas de reformas que va a requerir su aplicación, la primera de ellas la Ley de Amnistía.
Según ha podido saber Público por uno de los portavoces de la guerrilla, durante los últimos días unos 60 activistas de derechos humanos, procedentes en su mayoría de la Universidad Nacional y de los movimientos Marcha Patriótica, Unión Patriótica y Partido Comunista, se han reunido con los dirigentes de las FARC Iván Márquez y Pastor Alape para dar los últimos toques a la formación del nuevo partido político.
La última de estas reuniones se realizó en las instalaciones del mismo Parlamento y de allí salieron los nombres de quienes ostentarán el estatus de diputados y senadores por designación especial extraelectoral, con voz pero sin voto.
Los más destacados son el antiguo Líder estudiantil Jairo Rivera, el profesor de la Universidad Nacional Francisco Tolosa, detenido en 2014 como integrante de la guerrilla y en libertad por falta de pruebas tras un año de cárcel. Procedente del Partido Comunista, será parlamentario de la nueva formación Jairo Estrada, también profesor de la Universidad Nacional y quien formó parte de la Comisión de Memoria Histórica, cuyas conclusiones se incorporaron a los debates de paz en La Habana.
Imelda Daza, superviviente de la masacre de la Unión Patriótica y que, a la vuelta de un exilio de 30 años en Suecia, sufrió un atentado en Cartagena el pasado mes de mayo del que resultó ilesa, será una destacada portavoz del nuevo movimiento Voces de Paz y Reconciliación. Pablo Julio Cruz, defensor de derechos humanos, procedente de las Juventudes Comunistas, será portavoz en el Senado del nuevo partido.
Con esta estrategia, como puente a la futura plena participación en la política colombiana, que se dará a partir de las presidenciales de 2018, las FARC pretenden un perfil bajo, que preserve la seguridad de sus figuras más importantes, de cara a unos comicios en los que promoverán un gran Frente de Paz frente a la derecha uribista.
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