Mantener a los peloteros en activo fue el principal resultado del Torneo Triangular de Béisbol, una iniciativa que ayuda al desarrollo de la disciplina en la provincia
Jugar, jugar y jugar. Ese fue el saldo principal del torneo triangular de béisbol Catalino Ramos In Memóriam que concluyó esta semana en Sancti Spíritus, tras ocho partidos por cada uno de los tres conjuntos que animó esta fórmula local en tiempo de recortes beisboleros en Cuba.
Y más allá del triunfo de la representación del Sub-23 (por segundo año sucesivo, si se suma el éxito del pasado año con formato de cuadrangular), mantener a los peloteros en activo resultó el mejor de los saldos de este evento, sobre todo porque se trata de una provincia que solo pudo darles juego a la mayoría de sus peloteros unos dos meses durante todo un año al ser eliminados los Gallos desde temprano.
La triangular tuvo, quizás, las mismas carencias técnicas de la propia Serie Nacional. No logró, ni por asomo, atraer asistencia en un “José Antonio Huelga” que a veces le queda grande hasta al clásico nacional. Pero el evento consiguió darle una tónica diferente a la preparación de los dos equipos principales del territorio de cara a sus eventos esenciales: la tercera Serie Nacional Sub-23 y la Serie Nacional, esta última pactada para iniciarse el siete de agosto.
Por la cercanía del primer evento (inicia el próximo 22 de mayo) no hubo mejor termómetro para calibrar el estado de un conjunto que encara la competencia con el reto de un subtítulo el pasado año. Al menos así lo ve Lázaro Martínez, nuevamente su director: “Nos enfrentamos a lanzadores y jugadores de nivel del equipo grande y eso ayuda, por tanto, nuestra mentalidad es de victoria”.
Que el torneo se jugó a ganar, lo corroboraron estos muchachos, que soltaron en el terreno su energía, rapidez sobre las bases y vitalidad en el juego. “En relación con el elenco del pasado año perdimos en fuerza al bate, pero ganamos en velocidad”, señala el mánager y añade: “Renovamos un 50 por ciento del equipo, pero cumplimos con aportar varios atletas a los Gallos”.
Y bien que sí. Para muchachos como Jorge Ruiz, Dismani Ortiz, Yunior Ibarra, Julio Pérez y Javier Valdivia, quienes ya han militado con los grandes, esta es una oportunidad para seguir haciéndose peloteros e ir curtiéndose. Lo mismo sucede desde el box con Osvaldo Santiago, Yosbel González o Jasiel Campos.
La triangular que finaliza dejó asomar algunos talentos en asomo como Rodolexis Moreno, Yankiel Mencía, Rasiel Echemendía, Yasmani Palacios y Humberto Delgado, en quienes tiene cifradas sus esperanzas el necesario desarrollo del béisbol en la provincia.
De los aportes de la categoría Sub-23, la pasada Serie Nacional fue un vivo ejemplo, sobre todo en el pitcheo. Por eso esta vez se abogó por preservar un poco más los brazos jóvenes que llegaron algo cansados al final, a juicio de los entendidos. Y, aunque por edad pudieran estar, no participarán en ese torneo muchachos como Pedro Álvarez, Aldo Conrado y Luis D. Serrano. De Yankiel Mauri se supo que la comisión provincial lo suspendió por cuatro años por abandonar el equipo durante la preparación.
El evento dejó sus saldos también para quienes optan por un puesto en la preselección de los Gallos y para los que tienen el encargo de elegirlos. Bajo el rótulo de Yayabo y Escambray, unos 40 hombres compitieron y limaron asperezas ofensivas, de pitcheo y defensa.
No obstante, Nelson Ventura, comisionado provincial de la disciplina, manifiesta: “Siempre quedaron detalles por limar, sobre todo en la defensa y el corrido de las bases. Lo más negativo del torneo fue que ocho o nueve peloteros convocados desde los municipios no vinieron, pero de todas maneras se pudieron ver talentos en el pitcheo”.
No es lo mismo entrenar a secas que entrenar jugando. Esa es otra de las ventajas de la triangular que vino a medir a mitad de camino los resultados de una preparación que comenzó aquí desde diciembre pasado. Los escasos juegos, no obstante, dejaron ver a consagrados como Eriel Sánchez y Liván Monteagudo, en sana disputa con otros que pugnan por sobresalir e integrar la preselección de una treintena de jugadores que se dará a conocer la próxima semana.
“Hemos seguido a este grupo durante todos estos meses —argumenta Mario Zulueta, director de los Gallos— y la triangular nos sirvió para ver un poco más a los atletas y aquí ya estamos en los detalles de definir un pitcher cerrador, un intermedio.
“Aunque hay que valorar más viendo el Sub-23 que es el que nos va a aportar, y aunque los juveniles no participaron en la triangular como equipo, puede que algunos estén en la preselección, siempre con la premisa de no apurarlos”, añadió Zulueta
A pesar de los pesares, al torneo se le trató de conceder seriedad, tanto como tratar de hacerlo visible a través de trasmisiones radiales o desarrollo de partidos en los municipios donde la afición suele hacer más acto de presencia.
Además de ser “escauteada” por técnicos y directivos, premiar a ganadores con el protocolo de diplomas y reconocimientos, tal como se hizo en la provincial, donde hasta medallas y trofeos se entregaron, resulta plausible en el propósito de dignificar el béisbol en momentos en que más de un territorio ni siquiera realizó su torneo provincial por falta de pelotas u otros recursos.
Tal es el panorama, que desde la Comisión Nacional se envió un ultimátum para que quien tenga pendiente la Serie Provincial, la concluya antes del 22 de mayo.
Algo así como que quede como quede. No se trata sino de otro de los componentes químicos en estos experimentos desesperados de laboratorio en que hemos convertido nuestra pelota y su fórmula extraña de desarrollo: menos juego-¿mayor calidad?
Es lo primero que salta de la nueva estructura aprobada para la Serie Nacional, otra que sumirá en el ocio a más de la mitad de los peloteros cubanos durante casi un año, pues en las maniáticas prácticas de copiar a la MLB se nos ocurre calcarlo todo, menos su propuesta de jugar, jugar y jugar. Pero de eso hablaremos en otro momento.
A la comisión provincial se le fue la mano en separar a yankiel por cuatro año por solo no asistir a los entrenamientos,si este es el único elemento a no ser que también lo hayan cogido abandonando el país, si a los médicos que abandonaron la misión lo reciben por que a este muchacho con su juventud lo van a destruir,por otro lado en mi modesta opinión que a Lázaro Martínez lo perjudicaron sacando le al tercer bate y a los lanzadores con resultados en la serie anterior o es que no se dan cuenta que este año para un buen resultado tienen que obtener el primer lugar del sub 23, sino estarán retrocediendo.Con rapidez solo, no se gana juego de pelota, hay que tener bateadores de fuerza.
Saludos.
Bueno cuatro años para Yankiel, mejor no pensemos más en el, dicho así de esa manera ¨la comisión provincial lo suspendió por cuatro años por abandonar el equipo durante la prepareción¨, parece castigo exagerado…Y los otros que no se presentaron, creo debían saberse sus nombres, pues no considero que 8 sean pocos, eso expresa un circuntancia completamente anormal…
Soy de Pinar , pero sigo la pelota en SS, alguien me puede decir de la situación de Serrano el que juega tercera base con muchas perpectivas en la provincia.