Como antesala de la celebración por el aniversario 30 de la Asociación Hermanos Saíz, sus miembros en Sancti Spíritus revisaron por dentro el quehacer e impacto de esa organización en el sector cultural del territorio
En diálogo diáfano, sin tapujos, miembros de la filial espirituana de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) pusieron sobre la mesa opiniones, ideas y proyecciones a fin de vigorizar el trabajo de la organización que, aunque reconocida como la vanguardia en el quehacer cultural del territorio, aún precisa transpirar los aires renovadores y espíritu incansable propios de las edades de quienes la integran.
Así se constató durante la reunión efectuada en Sancti Spíritus con gran parte de su membresía como antesala perfecta del aniversario 30 de la AHS.
Casi de forma unánime se reconoció que el gran talón de Aquiles de la filial es el poco interés que muchos de sus asociados evidencian ante las múltiples opciones de promoción que brinda la organización, díganse eventos, concursos, premios, becas, otorgamiento de financiamiento…
De acuerdo con Gladys Pina Betancourt, jefa de la sección de Crítica e investigación, a ello se une la falta de comunicación y asistencia de algunos de sus miembros a las principales reuniones y encuentros planificados.
“Cuando se hace una actividad, por lo general, asisten las mismas personas y, por ello, se desconoce qué está haciendo el resto, qué les preocupa. Esas cuestiones son algunas de las premisas de la AHS para con sus asociados”, expresó.
Igualmente, identificó la poca motivación entre no pocos por participar en los espacios de publicación de sus trabajos investigativos.
“Se presentan las convocatorias y, cuando se indaga los nombres de los autores se reiteran”, acotó.
En la misma cuerda de pensamiento, Jairo Alberto Pacheco, uno de los vicepresidentes de la AHS en el territorio, aseguró que existe desinterés, incluso, hasta para conocer cuáles becas y premios existen y qué beneficios les reportan a los procesos creativos.
Los asistentes al intercambio juvenil ahondaron con madurez y sentido propio en cuanto a la relación turismo-cultura, un binomio que, a pesar de las intenciones por los directivos de ambos sectores en la provincia, no encuentra en predios yayaberos el engranaje exacto para obtener saludables frutos.
Así lo constató Franklin Romero Benítez, actor espirituano, quien confirmó, desde su propia experiencia, que en las instalaciones hoteleras no se reconoce al máximo la labor de los artistas, ni siquiera de los evaluados con la categoría de profesional.
“La decisión de los espectáculos recae, principalmente, en personas que no tienen todos los conocimientos estéticos y conceptuales para decidir qué ofrecerle al visitante foráneo para que conozca de nuestra cultura. Ha sucedido que no se paga siempre un sueldo, sino que se buscan alternativas”, añadió.
No obstante, en la reunión sí se aplaudió la labor del Hotel Plaza de la ciudad del Yayabo, sede en reiteradas ocasiones de diversas acciones rectoradas por la filial de la organización en estos predios.
A juicio de Gustavo Ramos, director de la Casa del Joven Creador, también se precisa que los propios jóvenes exploten más los espacios distribuidos a lo largo y ancho de la provincia.
Durante la asamblea se reconoció el trabajo de varios de los artistas más destacados y se resaltó la labor comunitaria de las agrupaciones Piramidal y Cabotín Teatro, seleccionados para formar parte del Catálogo de Excelencia de la organización a nivel de país. Además, otro logro de la AHS durante este año lo constituye que el premio Dador le fuera conferido al joven escritor Ariel Fonseca.
La vanguardia artística de la provincia dialogó sobre la realización con éxito de los eventos Girando al revés, Voces cruzadas, de varias exposiciones de las artes plásticas y de la preparación de un tabloide que recopilará investigaciones de sus miembros.
También se supo que para el venidero 18 de octubre, día en que llegará a las tres décadas de vida la AHS, se potenciarán las acciones culturales en los municipios de Trinidad y Jatibonico, en tanto los centros de las enseñanzas media superior y enseñanza superior del territorio se convertirán en puertos obligados de los periplos mensuales, protagonizados por los principales exponentes del arte joven espirituano.
Como siempre sucede, despojado de todo formalismo y bajo la máxima de que la cultura no se dirige, se promueve, la Asociación Hermanos Saíz en Sancti Spíritus concluyó su encuentro anual con el trazo de sus próximos pasos, a fin de parecerse mucho más a los aires y empuje juveniles que debieran siempre regir su protagonismo.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.