Cuba condenó en la Asamblea General de la ONU el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones, y reclamó una lucha contra ese flagelo sin dobles raseros ni actuaciones unilaterales
En una plenaria de los 193 estados miembros de Naciones Unidas, para revisar la estrategia global antiterrorista de la organización, el embajador cubano, Rodolfo Reyes, defendió el respeto a la Carta de la ONU y al Derecho Internacional en el enfrentamiento a un fenómeno que genera preocupación mundial.
«Donde quiera que se violen principios legales y éticos, se está fertilizando el terreno a ideologías extremistas y se socava la legitimidad de nuestra lucha contra el terrorismo internacional. El odio, la venganza y el terror no tienen cabida en el orden internacional justo y equitativo por el que luchamos», afirmó.
De acuerdo con el diplomático, resulta inaceptable que bajo la bandera del combate al flagelo se cometan actos de agresión e injerencia en los asuntos internos de los Estados o se perpetren violaciones flagrantes de los derechos humanos, como torturas, secuestros, detenciones ilegales, desapariciones o ejecuciones extrajudiciales.
El representante de la isla destacó los avances en materia de cooperación recogidos en la resolución relacionada con el quinto proceso de revisión de la estrategia global antiterrorista, un instrumento establecido en 2006.
A su juicio, el texto co-facilitado por Argentina e Islandia atiende áreas importantes, entre ellas la neutralización del abuso de las tecnologías de la información y las comunicaciones en apoyo al terrorismo, el apego al derecho a la privacidad y la no violación del Derecho Internacional por el empleo de drones.
En ese sentido, instó a rechazar el uso por determinados Estados de Internet, la radio y la televisión para promover mensajes de intolerancia y odio contra otros pueblos, culturas o sistemas políticos.
Asimismo, demandó particular atención a las causas raigales del flagelo y a la protección a las víctimas del mismo, lo cual incluye juzgar y extraditar a todos los terroristas.
«El pueblo cubano exige que se ponga fin a la impunidad de que sigue gozando el terrorista responsable de la explosión en pleno vuelo de un avión de Cubana de Aviación, el 6 de octubre de 1976, que tuvo como consecuencia la muerte de sus 73 ocupantes», dijo en alusión a Luis Posada Carriles, quien vive libre en Estados Unidos.
Reyes defendió además en su intervención la búsqueda de pasos para adoptar una Convención General sobre el Terrorismo, que defina el fenómeno de manera integral.
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