El Gobierno de Panamá decidió mejorar el alojamiento de migrantes irregulares cubanos, como parte de las medidas para resolver la situación creada en la frontera con Costa Rica
«La construcción de albergues y el traslado temporal de cubanos a hoteles del distrito de David, Chiriquí, son parte de las medidas que ha puesto en marcha el Gobierno», señaló el texto, el cual asegura que la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) está a cargo de la operación, por instrucciones del mandatario Juan Carlos Varela.
«Las nuevas infraestructuras permitirán mejorar la atención a dos mil 500 cubanos en Panamá, que afronta este hecho con un enfoque humanitario de respeto a los derechos humanos», según la nota.
La crisis migratoria en esa línea divisoria se agravó por la expulsión por Costa Rica de 800 africanos indocumentados, quienes acampan en precarias condiciones desde hace cinco días en la zona de confraternidad entre los puestos fronterizos de ambos países.
Estos migrantes quedaron en un limbo al no ser aceptados por las autoridades panameñas, aduciendo que no hay evidencias para asegurar su tránsito por territorio istmeño.
En tanto, los máximos directivos del Sistema Nacional de Protección Civil, los servicios de Fronteras y de Migración, además de otros funcionarios, recorrieron los lugares de alojamiento para los antillanos.
«Los albergues están dirigidos exclusivamente para los ciudadanos de la isla caribeña, quienes pernoctan en Paso Canoas en su travesía hacia Estados Unidos», precisó la nota oficial.
Con la llegada de la temporada lluviosa, la FTC realiza la evacuación a «dos hoteles del distrito de David para ofrecerles condiciones más seguras», según la fuente.
Sobre este tema, el gobernador de Chiriquí manifestó que «se tomó esta decisión para garantizar un trato humanitario a los cubanos» y mantener la estabilidad económica de la región.
El texto oficial indica además que «se ha coordinado con todos los estamentos de seguridad para que, con los albergues, se mejore las condiciones de los cubanos en el área limítrofe con Costa Rica».
Centroamérica es ruta de personas que pretenden llegar a Estados Unidos, pero «contrarios al resto del mundo», al decir de Javier Carrillo, director de Migración de Panamá, los cubanos tienen el privilegio de la política «pies secos, pies mojados» al llegar a su destino.
El funcionario se refirió de esta manera a la Ley de Ajuste Cubano, que el norteño país aplica en exclusiva a los nacionales de la isla que llegan de forma irregular a sus puestos fronterizos o pisan territorio estadounidense, mientras a esos mismos les niegan la visa para viajar de forma ordenada desde Cuba, aduciendo «posible emigrante».
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