Escambray Periódico de Sancti Spíritus
Colaboradores cubanos que han prestado servicios en ese país se preguntan cuándo llegarán a Cuba los paquetes que despacharon por la agencia Espiral Infinito C.A.
“Solo te dicen: se perdió; y yo respondo: Bueno, el Titanic hace una pila de años se hundió y se descubrió dónde estaba. ¿Cómo mi equipaje va a desaparecer con todo el avance tecnológico que existe hoy?”.
Con la esperanza casi extraviada, Fernando Gelabert Cañizares recuenta los bultos armados hace casi tres años tras su misión Barrio Adentro Deportivo en el municipio Rafael Urdaneta, estado venezolano de Miranda: televisores, instrumentos musicales, ropa y la muñeca por la que su nieta de ocho años le pregunta a diario.
Es la odisea de muchos colaboradores cubanos que envían paquetes por distintas vías y viven los traumas de la espera, la desinformación, ¿el atraco?… Escambray hace sus maletas y emprende la travesía al revés.
MAR ADENTRO
“En el 2014 utilicé la agencia Espiral Infinito. Pagué casi 15 000 bolívares —relata Ernesto Mayea Madrigal, colaborador deportivo en el estado de Falcón—. Fue toda la misión ahorrando mi dinerito para traerle a la familia cositas que nunca había logrado, allá se paga y aquí de nuevo”.
En tierra firme ancla el dilema. Por el teléfono 7202 2073 Aleida Jorge Alvarado, especialista de trámite en Cubadeportes, aclara que su entidad “no tiene cómo reclamar, el envío es personal, hasta donde llegan mis facultades es hacerle la carta para la Aduana. Si está firmada por Juan Luis Castro Labrada que ya no labora aquí, hay que cambiarla, y si llegan los envíos en ese tiempo no pueden sacarlos, existe un fichero de control. Eso se ha informado a las provincias”.
Según José Alfredo Sánchez Aquino, metodólogo provincial de colaboración del Inder, “no ha recibido nada nuevo, solicitaron hace casi un año una lista de los colaboradores y la envié a Aleida, son como 20, y de eso no se habló nunca más”.
Una carta colectiva firmada además por Carlos Alberto Cortés Figueredo, Belkis González López, Israel Eradio García Herranz, Yosbel Cárdenas Lorenzo… rebotó en la Dirección Provincial de Deportes, la Fiscalía General de la República, la CTC Nacional, el Sindicato Provincial de Educación, la Oficina Provincial de Atención a la Población y hasta la Embajada de Venezuela en Cuba.
Algunos responden. Sin pertenencia corporativa, los reclamantes recibieron un papel firmado por Saura (Evelio Saura Pedrol, director de Asistencia Técnica de Cubadeportes) donde se remarca la responsabilidad individual de cada cual por sus paquetes.
“Nos dan cierta vaselina, nos atendieron porque escribimos al Consejo de Estado”, arguye Mayea.
La Oficina Provincial de Atención a la Población es categórica: “No es competencia del Gobierno realizar gestión alguna, son ustedes los que deben demandar mediante un proceso judicial al organismo responsable, en este caso, la Aduana”.
Las puertas telefónicas de la Aduana se abren fácilmente. Yasmil Prado Fons, asesor jurídico, sostiene: “Hasta donde tengo entendido la empresa quebró, creo que ciertas mercancías han llegado por coordinaciones de ciertos organismos. Ahora, ¿por qué unos sí y otros no?, no sabría explicarle, no existe contrato, solo supervisamos”.
El excolaborador y coordinador de los estados de Carabobo y Miranda, el director provincial de Deportes en Sancti Spíritus, Carlos Bermúdez, sitúa los bultos en contexto. “Sucedieron incumplimientos de Venezuela con Cuba y de esta con los colaboradores, algunos bultos demoraban mucho y se reponía lo que se rompía. En el 2012 el país decidió limpiar todo. Se facilitó tarjeta magnética para comprar acá con rebaja del 30 por ciento. Quienes querían mandar algo era bajo su responsabilidad, por tanto, indicamos que reclamaran a esas empresas”.
¿Por qué no usar la tarjeta? Mayea tiene un argumento de peso: “Con lo que allá podías comprar un par de zapatos, aquí solo adquirías un par de medias”.
Sería menos complejo si solo fueran espirituanos los varados en la travesía. El sitio Cubadebate publicaba hace un tiempo una verdadera protesta digital en la que Rafael Brunet Valle se preguntaba: “¿Qué pasa con los envíos de Espiral Infinito?, hace más de dos años envié mis paquetes y no llegan”; en Acuse de Recibo y con el título “Cargo ante Transcargo”, Juventud Rebelde relataba entuertos similares de Rosario Quintero.
La enfermera espirituana Julia Idalmis Junquera sintetiza la vivencia de cientos de colaboradores: “Antes de salir dicen que sí los podíamos enviar, pero no nos garantizan que lleguen, entonces te enteras de que el barco es la vía más económica, aunque demore, y muchos mandaron y a los tres meses llegó toda la carga”.
“Es un conflicto —expresa el doctor Aris Fortain Espinosa, jefe de Colaboración Médica de la Dirección Provincial de Salud—, muchos reclaman, pero antes de irse se explica que usen una empresa segura y confiable, algunos han sido engañados buscando la vía más barata, pero sale caro. Ellos se rigen por las mismas regulaciones y derechos aduanales de todo el mundo y aún muchos no las conocen. Hay límites de peso, se ha dado el caso de que una caja del tamaño de un televisor cinco personas no pueden cargarla. Nosotros los cubanos… somos cubanos”.
ESPIRAL INFINITO: ¿SER O NO SER?
“Recogían por estados y recibían en el centro de dirección médica, no en una oficina clandestina —asegura Mayea— porque todo el mundo envía por ahí. Si te indican traer dos fosforeras, no puedes traer tres. Nunca sentí ningún tipo de escalofrío de que lo que estaba luchando en mi vida se lo iba a regalar a nadie”.
“Ahí trabajan cubanos —añade Gelabert—, les lloré para que me dejaran traer una cosa y me dijeron que no. El cubano es una cosa aquí y otra allá”. Julia apenas suspira: “Tengo la esperanza seca, sientes que se ríen de uno, te esfuerzas para apartarte de tu familia; independientemente de que es una misión con compromiso político, también lo haces para resolver tus problemas económicos”.
Espiral Infinito no es solo un rótulo. En abril del 2014 la Aduana la informó en la lista de autorizados a enviar paquetes a Cuba. Desde Transcargo, a través del 76993374, Leidis (aparentemente sin apellidos), representante comercial y atención al cliente, aclara: “Sí tenemos contrato con Espiral… Recibimos la última carga en febrero del 2015, nosotros solo despachamos, si van a enviar alguna carga, ellos avisan”.
Por gestión digital, Espiral… respondió de un día para otro y confirmó la información. Habla de contactos con organismos cubanos y venezolanos, retruécanos financiero-cambiarios y presenta credenciales: “Quien suscribe es ciudadana venezolana (María Jackeline Arroyo Rodríguez), esposa de Alexander González, de nacionalidad cubana, padre de dos niños venezolanos y presidenta de una empresa familiar llamada Espiral Infinito C.A., corresponsalía, desde junio del 2012, de la empresa cubana Transcargo para enviar las cargas de los colaboradores que cumplen misión en Venezuela, la cual se encuentra en estos momentos inactiva en eminente declaración de quiebra a consecuencia de ser víctima de la guerra económica desatada contra la Revolución Bolivariana y el país”.
Según consta en informe a instituciones cubanas y venezolanas, desde el 2012 un total de 9 553 colaboradores de casi una veintena de organismos (Agricultura, Construcción, Educación, Minrex, trabajadores sociales, Prensa Latina…) han usado sus servicios. Han llegado las cargas a Cuba de 5 578 y quedan en Venezuela 14 808 bultos.
Yamil Herrera Duarte, entrenador espirituano de voleibol, envió sus paquetes hace más de un año y algo más de dos meses atrás los recuperó en persona. “Estaban donde mismo los dejé, los recogí y hasta me dieron dos cajas de un amigo con un hago constar, sin firma. Los contacté allá, pues si ven que la llamada es desde Cuba no la cogen. Dicen que Alexander buscaba un barco en Panamá a ver si los mandaba, que subió el dólar, los bultos se cobraron a un precio y ahora están acelerados”.
Por e-mail otros peligros zarpan. “Enfrentamos amenazas —relata Espiral…—. Llevamos más de nueve meses sin operaciones. Se encuentran (los bultos) entre un galpón en alquiler en Valencia y en el Patio del almacén en Puerto Cabello, donde reposan 12 contenedores. El gasto es de 300 000 bolívares mensuales. Mi esposo se vio en la necesidad de laborar 16 horas diarias en el exterior para cubrir los gastos”.
No todos pueden ir a Venezuela a buscar sus pertenencias, como hizo Yamil. ¿Cómo remar a contracorriente? ¿Cómo tantas personas pudieron estar “equivocadas”?
En 15 años de ejercicio, la abogada Danaya León Claro y su Bufete Colectivo espirituano proponen un bote de salvación: “Es un caso atípico, complejo. Son personas naturales que en otro país hacen un contrato a título personal con una agencia de viaje, sus derechos son los que les instituyen los de ese país, o sea, desde Cuba no se puede hacer ningún proceso para reclamar el incumplimiento de un contrato”.
“No está bien fundado con todas las oportunidades legales de las partes, es escueto y ambiguo, no tiene término para reclamar. Los bufetes tienen un grupo de abogados que radican en La Habana y pueden representar a personas en otros países, tienen regulaciones, cobran un por ciento del ingreso al tener que establecer un proceso allá. Institucionalmente los afectados pueden solicitar respaldo o ayuda, no hablamos de obligación, pueden unirse, quizás algo se pudiera lograr por el abogado de la entidad, hacer alguna forma de representación legal y viabilizar la entrega pero, reitero, no es obligación”.
La carga supera las 194 toneladas. Serían necesarios 23 contenedores de 40 XHC para ser enviados a puerto cubano. Sin duda, un alto precio a pagar para poner fin a una situación que, a todas luces, ha navegado en las aguas de la irresponsabilidad.
Nota: Al cierre de esta edición, Escambray esperaba todavía alguna respuesta por las direcciones saura@cubadeportes.cu y apoblacion@infomed.sld.cu
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Escambray / ISSN 9664-1277
A todos los colaboradores que tienen bultos en los contenedores sobre todo el 9.1, me acabo de enterar por los directivos de espiral infinito que después del día 18 de abril de 2017 se comenzaran a abrir los mismos pero se necesita que los colaboradores se pongan en contacto escribiendo a la pagina de espiral infinito para recibir orientaciones, yo estoy representando a tres de los colaboradores de mi empresa pues ellos ya están en cuba, slds, Alejandro
Buenas Tardes Alejando a donde podemos escribir para recibir orientaciones de los menajes que no pudieron salir de Venezuela. Un correo un telefono o algo a quien se pueda llamar. Muchas gracias
Mi esposo todavia esta en la espera de una respuesta del jefe de deposito llamado MARIO DIOS SABRA SU APELLIDO. QUE SI ALLI ESTAN , ESTAMOS POR ABRIR EL CONTAINER, AVISO POR LA PRENSA ultimas noticias Y AHORA NI EL TELEFONO LO AGARRA desde septiembre del 2013 y parece que le van a sacar la lengua. que descarado. y segun el gerente de pto Ordaz es un compatriota el que tiene la estafa que tal. COMO SE BURLAN DE SUS COMPATRIOTAS, QUE ARRIESGAN SU VIDA EN LOS BARRIOS MAS PELIGROSOS.
Estoy en Venezuela y quisiera saber a donde puedo ir a solicitar los paquetes q envio mi novio en 2013 y q nunca llegaron a cuba
El esta en cuba pero yo estoy aqui y tengo la documentacion y la autorizacion para hacer los tramites pero no encuentro ni una oficina de esa empresa si alguien me puede orientar en cuanto a eso se lo agradeceria
Vuelvo sobre el asunto; resulta difícil ver que prácticamente se nos quiera satanizar o sentaren el banquillo de los acusados a los que acogidos a lo que autoriza la ley cubana para todo aquel cubano que presta servicio en el exterior por al menos 24 meses, y es enviar a Cuba el menaje de casa cuando concluye su misión. En abril 2014 la Aduana publicó el listado de las entidades autorizadas -Espiral Infinito entre ellas- para realizar envíos a Cuba, ésta con contrato con Transcargo como operador cubano. Quiere decir que anduvimos por camino correcto según lo recomendado. Sin embargo otros colaboradores acudieron a los conocidos RIF (dependiendo de datos de identificación de nacionales venezolanos para hacer la tramitación) bajo ciertos riesgos; sus envíos llegaron a nuestro país por vía aérea, y si se revisa lo publicado por la Aduana encontraremos que AEROVARADERO no tiene contrato con ninguna entidad venezolana, sólo Cubanacán Express tiene relación con Excoven CA. Estuve 3 años como colaborador del Deporte, y desde mi responsabilidad en la Misión siempre abogué por que se pudiera fletar un carguero que viajara periódicamente para estos menesteres de Menaje de Casa específicamente que todo colaborador estaría dispuesto a pagar la tarifa que se fijase con la tranquilidad de saber que sus pertenencias llegarían seguras. Prácticamente los colaboradores estaríamos costeando el flete, pero al parecer no hubo oídos receptivos. Solo quiero concluir con que considero que los que ahora nos encontramos afectados no incurrimos en indiscplina o desacato alguno; obramos con apego a lo establecido como derecho y a través de entes reconocidos, solo que una coyuntura desfavorable motivó que aún no tengamos el más satisfactorio de los resultados: nuestras pertenecias con nosotros.
Buenos días. Apoyo plenamente expresado por Diego González R y Juan M los días 7 y 9 de mayo respectivamente. Mi esposa y yo somos de los colaboradores deportivos comprendidos en los 3975 afectados que regresamos en agosto y octubre 2014. Somos de La Habana; en agosto de 2015 después de habernos dirigido a diferentes instancias como Atención a la Población CCPCC, Atención a la Población INDER, Transcargo y Espiral Infinito, esta última nos respondió con los pormenores de los inconvenientes que en este artículo se refieren. Incluso mi esposa estuvo en la Embajada de Venezuela. Más recientemente me dirigí al viceministerio del MINCEX que atiende las relaciones con Venezuela sin que aún haya tenido respuesta concreta. Agradezco a la periodista por la claridad y precisión de lo redactado pues na había leido nada similar con anterioridad. Seguimos confiando en que las partes cubana y venezolana lleguen a un acuerdo para la mejor salida a esta situación que enfrentamos los que en un momento dimos el paso para desde diferentes esferas ayudar a la Patria Bolivariana al tiempo que en algún que otro momento tuvimos nuestras vidas en riesgo e hicimos sacrificios y ahofrros para darle a nuestras familias ciertas comodidades sin ningún afán de lucro. En el caso que me ocupa nuestra vivienda espera por esos envíos para ser avituallada.
Muy buen trabajo periodístico. Felicidades!
Gracias a Escambray por ser nuestro vocero. Creo que no debemos descansar hasta recuperar lo que nos costó más que dinero (que fue bastante) muchos otros riesgos y ausencias, no sólo a nosotros sino a nuestras familias. Que este artículo sirva para que todos los afectados nos unamos y mantengamos el reclamo hasta que se resuelva.
Soy otro de los 3975 colaboradores afectados. Aprovecho para comentar que esta cifra se refiere a los colaboradores que despacharon envíos en alguna de las agencias de Espiral Infinito, pero la cantidad de colaboradores afectados es mayor a esa si se tiene en cuenta que muchos envíos pertenecen a más de un colaborador porque algunos lo hicimos así por diferentes razones, una de ellas, por ejemplo, es que Espiral Infinito entrega los paquetes en La Habana o en Santiago de Cuba y algunos colaboradores, de provincias centrales fundamentalmente, unían sus pertenencias con las de algún compañero con residencia cercana a alguno de los puertos y facilitar así la recogida de las pertenencias. Es decir, la cifra de compañeros con pertenencias en Venezuela enviadas a través de Espiral Infinito supera los 4000 colaboradores.
Propongo que los compañeros del periódico Escambray, a quienes aprovecho para saludar y agradecer, trasladen la información a los compañeros de CUBADICE, espacio del Noticiero de la Televisión, pues eso puede traer resultados positivos en la búsqueda de posibles soluciones a esta situación.
Jcvv, total coincidência com ud. Soy médico internacionalista tambien y estoy en la misma situación. Considero realmente una falta de respeto la forma em que ese funcionário se refiere a nosotros. Su intervención nada explica, no tiene que ver com lo que muy justamente esta periodista está tratando de denunciar y hacer conciencia. Esa no debe ser la posición de nuestro ministério de Salud Pública y nuestro Gobierno.
Ofende la insensibilidad ante el problema de tantos internacionalistas de diferentes misiones, pero más que eso insulta la forma en que hemos sido tratados por ese compañero.
Sería bueno hubiera profundizado como es que se hace un envio por Espiral Infinito, sobre el peso, los precios, que no son baratos y las regulaciones, para luego hacer declaraciones públicas en nombre de Colaboración.
Cada funcionário que es convocado por la prensa tiene que estar actualizado sobre el problema al que va a dar respuesta, ser respetuoso con la prensa y con las personas involucradas en el problema. Lo menos que puede hacer es oferecer disculpas
Alguien empapado en el tema, conciente de las causas por las que los paquetes no han llegado, que todo el mundo sabe que fué porque la Empresa Espiral infinito quebró y ahora no asume su responsabilidad, podrá entender la frase del Dr. Aris «Hay límites de peso, se ha dado el caso de que una caja del tamaño de un televisor cinco personas no pueden cargarla. Nosotros los cubanos… somos cubanos”. Que tendrá eso que ver. Cada cual pagó bien caro a esa empresa según el peso enviado, ajustado a los límites que la propia empresa dispuso y con lo reglamentado por nuestra aduana. El funcionario parece que habla de las cajas que se enviaban por cuenta de nuestra misión, eso es ya historia pasada. Este no es el caso, el articulo de este periódico está hablando de otra cosa, demuestra desconocimiento del tema sobre el cual ha hecho declaraciones públicas y en la que practicamente culpa a los afectados en esta estafa por ser como somos los cubanos.
No son todos, pero hay una queja generalizada entre los cooperantes de Salud, sobre la forma en que, repito algunos funcionarios de colaboración se expresan sobre nosotros.
Los cubanos somos dignos y esforzados, cumplimos riesgosas e importantes tareas en el exterior para honrar a la patria, corremos riesgos y estamos por largos períodos lejos de los seres queridos, ponemos bien en alto el nombre de Cuba, reconocido por los organismos de las naciones unidas, por el propio Obama y por toda esa gente que se ha beneficiado de la colaboración cubana. Ese Dr está en ese puesto porque hay personal de salud internacionalista, él no está por encima de nosotros. Muy triste y muy desasertada su intervención, Por lo menos a mi me ofendió bastante y no se si a alguien le aclaró alguna duda.