En la provincia de Sancti Spíritus los jóvenes denuncian los proyectos subversivos de Estados Unidos que buscan modificar el orden social en Cuba
“Son rebeldes ante todo”; así dirían muchos frente a la irreverencia juvenil. Sin embargo, el ímpetu de los jóvenes espirituanos muestra la historia tal y como es: desde el pasado 26 de septiembre y hasta este sábado desmienten a los que buscan utilizarlos.
Es que llevan en sus labios, aunque de diferentes maneras, la denuncia de los planes que cambian de métodos pero que siguen los mismos intereses: destruir el proyecto social cubano. Sí, World Learning, la organización amparada por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid, por sus siglas en inglés), pretende a través de sus cursos de verano en Estados Unidos para jóvenes entre 16 y 18 años implementar después acciones en la isla.
Como cuenta pendiente, aunque el 17 de diciembre del 2014 se restablecieron las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, el gobierno norteamericano no emplea las vías institucionales para realizar este intercambio académico a través de los ministerios de Educación y de Educación Superior y utiliza las redes sociales para proponer las convocatorias a los “líderes de opinión” que formarán en tierras foráneas; o en lo que se traduce: esconder la manzana envenenada detrás de Organizaciones No Gubernamentales.
Los primeros en levantarse de sus asientos de clases para decir: ¡es suficiente!, fueron los 1 450 estudiantes del IPU Honorato del Castillo de la cabecera provincial. Hijos de su tiempo, cantaron y hasta expresaron el llamado a la conciencia de la nación en la defensa de su soberanía, en el compromiso de construir desde los esfuerzos propios.
A sus pasos le siguieron los hermanos mayores, los de la Universidad de Sancti Spíritus José Martí Pérez, y como ellos, dejaron bien en claro sus ideas. “Que seamos rebeldes, que seamos ambiciosos a la hora de crear nuestro futuro es normal, pero no queremos perder lo que construyeron nuestros abuelos y padres. ¿De verdad quieren ayudarnos? Sencillo: quítennos el bloqueo”, explicaba Luis Ernesto Camellón Curbelo, presidente de la Federación Estudiantil Universitaria en la casa de altos estudios.
La semana se mantuvo activa; otras tantas algarabías se repartieron en el territorio espirituano al compás de la música de Silvio Rodríguez, Alexander Abreu, Buena Fe —aunque esta no fuera en vivo—. Se sumaron la Universidad de Ciencias Médicas y su ejército de futuros obreros, técnicos y profesionales de batas blancas; y más de una decena de otras instituciones entre centros mixtos, institutos preuniversitarios y escuelas pedagógicas.
Para quienes aún no comprenden por qué los jóvenes se quejan por todo, la razón es simple: les urge cambiar todo lo que deba ser cambiado. Los “rebeldes” quieren el progreso de la nación y desde la irreverencia mantienen sus ideales de no dejar atrás la historia de luchas y victorias que les antecede.
Eso me recuerda mi juventud, ya que de los 30 de mi grupo del pre ibamos a toda actividad organizada…. y ahora 20 años màs tarde solo quedan 10 en Cuba.