El presidente norteamericano Barack Obama colocó una ofrenda floral con rosas multicolores ante el monumento al Héroe Nacional José Martí, en la Plaza de la Revolución en su primera actividad oficial durante la segunda jornada de su vista a Cuba.
El mandatario llegó a ofrendar al más universal de los cubanos acompañado por el vicepresidente del Consejo de Estado, Salvador Valdés Mesa y posó para una foto junto a la prensa acreditada para esta ocasión, integrada por más de 2 000 periodistas de diversos medios de buena parte del mundo.
El mandatario también visitó el memorial José Martí y según el programa previsto a las once de la mañana debe llegar al Palacio de la Revolución, donde ocurrirá la ceremonia oficial de recibimiento y se desarrollarán las conversaciones oficiales con el mandatario cubano Raúl Castro.
A las dos de la tarde ambos presidentes realizarán declaraciones a la prensa acreditada en esta histórica visita, la primera realizada por un mandatario norteamericano en funciones después del triunfo de la Revolución cubana.
Según lo previsto para este lunes, Barack Obama se reunirá a las cuatro de la tarde en el foro empresarial Cuba-Estados Unidos con empresarios y hombres de negocios de ambas naciones.
En el día de ayer, el avión del Presidente de los Estados Unidos, aterrizó en el Aeropuerto Internacional José Martí, a las 16:19 horas locales en una tarde nublada y lluviosa en La Habana, después de dos horas y media de vuelo desde Washington.
Minutos después descendió junto a su esposa Michelle, sus hijas y su suegra. La visita del gobernante a Cuba es la primera de un mandatario de EE.UU. después que Calvin Coolidge asistiera a la Sexta Conferencia Anual Internacional de Estados Americanos, celebrada en La Habana en enero de 1928 bajo los auspicios del dictador Gerardo Machado.
Los más optimistas han asociado la persistente lluvia de su primer día de visita con los augurios de la religión africana, en la cual Oshumare es el ayudante de Shangó y el que representa la unión entre el cielo y la tierra, el equilibrio entre los Orishas y los hombres. Entonces la señal en la religión yoruba parece clara: Obama llegó con la lluvia para limpiar el mal precedente y augurar mejores tiempos.
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