En la noche inaugural de la sala se presentaron piezas, en su mayoría inéditas, de Ernesto Lecuona
El Centro Cultural Alternativo Escribanía Dollz retoma su protagonismo en el panorama artístico de la añeja villa del Yayabo, al convertir su sede en una sala de concierto.
Según informó su principal gestora, Liudmila Quincoses, en ese nuevo espacio cada tres meses se podrán disfrutar de presentaciones de jóvenes exponentes de ese tipo de música.
En la noche inaugural se disfrutaron varias propuestas llegadas gracias al Frente de Afirmación Hispanista de México. Mas, el mayor número de aplausos los recibió el protagonista por excelencia del suceso: Franco Rivero Bueno, reconocido pianista cubano.
Desde hace varios años Rivero se dedica a recopilar temas, en su mayoría, inéditos de Ernesto Lecuona, por lo que cuenta con una compilación superior a las 100 composiciones en cinco producciones musicales.
Actualmente, según informó a Escambray, se encuentra en un nuevo proyecto en busca de reunir más melodías de ese compositor del siglo XX, pero donde se combinen el piano con la interpretación vocal.
Algunos de ellos como Vals de la rosa, España y Marcha triunfal brotaron de sus manos al interpretar el piano, donado por el Frente de Afirmación Hispanista de México a la nueva sala de concierto espirituana.
A su juicio, el recién inaugurado espacio es de gran importancia porque permite acercar al público del territorio a la música de concierto y a autores que, aunque conocidos, tienen un repertorio tan amplio que resulta casi imposible de descubrir.
La noche inaugural de la sala de concierto contó con la presencia de artistas e intelectuales de diferentes países como España, Perú y Cuba, así como premios José Vasconcelos, integrantes todos del Frente de Afirmación…, una institución que apoya la cultura de diferentes naciones.
Para la próxima velada, prevista a realizar dentro de tres meses, Rivero Bueno regalará otros temas de Lecuona, tal y como ha hecho en diferentes espacios culturales internacionales y nacionales como la casa de Carilda Oliver Labra, en Matanzas.
Muy buena noticia.