Medicina y diaconado religioso definen el proyecto de vida de Miguel Ornia, para quien no existen milagros más grandes que el amor y el perdón
Medicina y diaconado religioso definen el proyecto de vida de Miguel Mariano Ornia Margolles, espirituano raigal para quien no existen milagros más grandes que la vida, el amor y el perdón.
“Quiero que me recuerden con mis dos mundos. Aunque la gente vea extraño mis dos naturalezas, por resumirlo de cierta forma, usted no está delante de ningún milagro, hijo mío. Prefiero ser recordado como un hombre de bien. Si es así, bendito Dios”, sentenció balanceándose en el sillón de casa mientras las brisas invernales y el trasiego de personas afuera amenazaban con estropear la última confidencia.
Una hora antes, Escambray interrumpía la tranquilidad de Miguel Mariano Ornia Margolles en su vivienda de la calle Independencia para desentrañarle los misterios al espirituano de 66 años, especialista en segundo grado de Medicina Interna, en quien la ciencia y la fe comulgan sin resentimientos.
CONFESIONARIO PÚBLICO
En las paredes de la vivienda donde el tío Félix García erigió su consulta tiempo atrás, hoy reposan títulos, reconocimientos, rosarios, trofeos, la Bendición Apostólica del Papa Francisco, imágenes en blanco y negro, y fotografías de las nuevas generaciones; variopinto mural como la existencia misma de Ornia. Las visitas a centros hospitalarios en el preuniversitario perfilaron habilidades que guardaba en su código genético como miembro de una familia donde no pocos habían decidido por la Medicina.
“Siempre agradeceré la motivación y asistencia de los docentes, tanto en La Habana, donde empecé mis estudios, como en Santa Clara, donde me gradué. Cuando estoy frente al aula trato de parecerme a ellos, de transmitir el ímpetu con que me educaron para no recoger en el futuro médicos interesados únicamente en las misiones internacionalistas desde el punto de vista material”.
Paralelo al estudio, la fe. “El Señor me miró, me presentó el plan y ahí estoy. Cuando era niño estudié en el colegio de los Hermanos de La Salle. Luego de la nacionalización de la enseñanza fui a la Secundaria Básica. Mis padres eran católicos, papi más apegado a fechas señaladas como Navidad, Semana Santa y Fieles Difuntos. Mi mamá sí era de eucaristía diaria”.
¿Cómo encontrar la dualidad entre medicina y religión?
Siempre he dicho que conjugar la fe es como iluminar el quehacer médico, la ciencia en general. Nunca hubo contradicción, por el contrario: cada vez me ayudaba a pensar más en el hombre sufriente del Evangelio.
Sin embargo, ciertas asignaturas reniegan del enfoque religioso y se imparten desde otras perspectivas. Si alguien le preguntara de dónde viene el hombre, ¿qué respondería?
Lo vería desde el punto de vista de la creación, pero no pensada literalmente como describe la Biblia, con metáforas y simbolismos. Venimos creados por Dios en diferentes momentos de la evolución, sin que esta palabra se preste a interpretaciones erróneas.
Hubo una época en que la Iglesia atravesó momentos complicados. ¿Tuvo problemas por sus preceptos religiosos?
La fe te ayuda a navegar sobre las aguas, por muy convulsas que sean. Nunca me vi limitado a ejercer la Medicina. A la hora de otorgar cargos en la categoría docente se daba prioridad a otras personas. Al final tú sabías por lo que era, pero yo no me hice médico para ascender en otra escala que no fuera la de mi superación profesional y convertirme en una mejor persona. Como es natural, lo que estaba proscrito en aquel momento, pues no se hablaba y punto. Fue un tiempo en que la Iglesia, como madre y maestra, nos enseñó a evangelizar con el testimonio de vida y el compromiso, no con la palabra.
NO ESTOY MÁS CERCA DE DIOS
A los 48 años, con una agenda bastante apretada, esposa e hija, llegó la solicitud para convertirse en diácono, es decir, un clérigo o ministro eclesial al que le asisten determinadas funciones. “Ya me habían anunciado que el obispo de Santa Clara, Monseñor Fernando Prego, que Dios lo tenga en su descanso, quería verme —recuerda—. Me habló de mi disposición para el proceso de formación del diaconado en 1997. Fueron cuatro años, sin descuidar mis responsabilidades como profesional de la Salud ni como esposo o padre”.
Y se suma a la conversación la compañera de la vida, quien añade ciertos “condimentos” al diálogo: la pasión de Ornia por el café, su poca destreza para faenas hogareñas y cómo la hija de ambos también optó por la bata blanca para convertirse en especialista en Imagenología.
¿Qué prima a la hora de examinar a un paciente: lo médico o lo religioso?
Te repito que no puedo disociar ambas cuestiones. Cuando estoy tratando a un enfermo o un caso complicado siempre digo: ‘Señor, utiliza mis manos y pon a pensar mi cabeza’.
Hay quien dice que las enfermedades vienen de Dios…
Respeto la filosofía de cada quien. El propio crecimiento del ser humano implica un desgaste, contraer determinadas dolencias. Ahí entra a jugar el código genético, entre otros factores. Son asuntos intrínsecos al hombre.
Usted mismo ha sido diagnosticado con Parkinson y también presenta afecciones cardiacas…, insiste Escambray.
Que son resultado de cuestiones puntuales, pero nada relacionadas con la fe.
GÉNESIS Y APOCALIPSIS
Unos lo definen como el profe; otros, como el maestro y guía espiritual. Él prefiere seguir siendo el hijo del comerciante Joaquín y la maestra Severa Josefina; el muchacho a quien la vida le arrebató a su hermano, el esposo indisciplinado para los tratamientos, el médico que una vez dejaron cerrado en la consulta porque ya pasaban más de las ocho de la noche y nadie pensó que a esa hora aún estaba auscultando pacientes, el devoto a San Juan Bosco, el amante del verano y el mar, cuyos pasos se enrumban en agosto hasta el poblado pesquero de Casilda, en Trinidad, hacia la casa de descanso de la familia.
“Pensé en ir a vivir allá cuando me jubilara, pero el problema es que no pienso jubilarme. La vida me limita, pero si la forzamos un poco se puede seguir haciendo camino. Miles de veces me han dicho que limite la consulta, pero si a mis 66 años no lo he hecho, no voy a hacerlo ahora. Seré médico hasta que pueda, y mi consulta seguirá abierta en el Hospital General Universitario Camilo Cienfuegos”.
¿Cómo diagnostica la salud de las relaciones entre la Iglesia católica y el Estado?
Hay que seguir trabajando en aras de encontrar lo que nos une y no lo que nos separa. La lección fundamental es perdonarnos mutuamente.
¿Usted cree en los milagros?
Los mayores milagros son el de la vida, el amor y el perdón.
El Dr. Ornia es una persona tan grande y maravillosa que no creo pueda pasar para alguien desapercibido a pesar de su sencillez y modestia, ojalá sus alumnos, colegas, amigos, pacientes y conocidos puedan imitarle aunque sea un tantico, pues es un ejemplo de responsabilidad, preparación científica, ética y amor infinito hacia todos, sin distinción. Con la misma fuerza y equilibrio que ha enfrentado la vida sabemos que vencerá a la enfermedad para seguir haciendo confesiones y llevar luz y paz a todos los que le rodean. Me siento super agradecida y orgullosa de haber compartido con el profe alumnos y pacientes y yo misma haberlo necesitado alguna vez.. Al periodista que no olvide volverlo a entrevistar cuando se recupere de su intervención quirúrgica.
Gracias periodista por ese artículo, has escrito sobre una gran persona, el representa para un pueblo entero: el padre, el esposo, el abuelo, el tio, el padrino, el Dr, el profe, el catequista, Migue, Ornia, Miguel Mariano, el amigo, siempre dispuesto a servir a quien lo necesita, la puerta de su casa abierta para quien la toque, al que puedes parar en medio de la calle, al que le puedes pedir ayuda en la sala 4G del hospital o cuando va para misa, el hombre sencillo que se da y sigue.
Cuantas cosas buenas reunes en ti!!!, sigue batallando, y si Dios quiere (como siempre dices), estaras pronto de vuelta. Oramos por ti.
Grande entre los grandes, mi ponderable maestro, insigne y paradigma de la medicina , un hombre de nobleza, con su forma de hablar, mirar, saludar con reverencia cura, mitiga, su Enorme Fe y espiritualidad lo exalta al pináculo y Dios le concede ese DON, maetro al Redentor le pido que le de larga vida y salud.Somos y seremos su discipulo siempre.Ricardito
Es cierto que es imposible resumir en una entrevista la gran grandeza de nuestro querido Profe Ornia, pero doy gracias al digno gesto periodístico de dedicarle un espacio en el periódico de su pueblo donde tanta gente lo admira y respeta, y gracias a las actuales posibilidades de la prensa online también más allá de las fronteras y a cada rincón del mundo donde habemos discípulos suyos que queremos desearles nuestro mayor respeto y dedicar nuestras oraciones a su pronta y exitosa recuperación . Me encuentro entre los privilegiados que tuve el honor de ser su alumna y aprender no sólo de sus vastos conocimientos de Medicina, sino también de cuánto poder de sanacion tiene la bondad y el amor con que tratemos a esas personas que al estar enfermas se sienten tan necesitadas de ese afecto y buen trato que nuestro Profe siempre tiene con esa bondad que lo caracteriza. Infinitas gracias y que tenga una exitosa recuperación con el gran favor de Dios que está a su lado.
Muchas gracias, querido Dr. más que un profesional es una gran persona con una calidad humana increíble. Su forma tan humilde de ser, la forma como trataba a sus pacientes y su profundo conocimiento de la medicina interna son un referente para mí. Gracias Dr por sus enseñanzas que siguen intactas. Dios lo continúe bendiciendo.
Un bello homenaje al profe ornia…muy humilde y lindo…claro que si será recordado siempre por sus pacientes …alumnos…amigos…por todos…orgullosos todos los que fuimos premiados con la dicha de haber sido estudiantes de profesionales de gran talla como el profe ornia…el profe celin y todos los demás…mi más respetuoso saludo a usted profe…dios le de larga vida para que siga salvando vidas..enseñando y sirviendo a dios.
Muy bonita la entrevista del Profesor Dr Ornia, tuve el priveligo de conocerlo desde el comienzo de la carrera en la Habana, donde entramos un numeroso grupo de jóvenes a estudiar Medicina en ¨Victoria de Giron¨, allí fuimos conociendo a muchos otros jóvenes del interior de distintas regiones. Terminamos alla los dos primeros anos, y regresamos a Sta Clara, para continuar la carrera, ahí ya estrechamos mas los lazos, pues eramos un grupo mas pequeño.. Ya tenia referencias de esta gran persona, pues tenia familias alla en Sancti Spiritus, que le conocían, y visitábamos a la flia con regularidad, asi estrechamos mas los lazos. Puedo decir que durante todo el tiempo compartido con el gran amigo Dr Ornia, siempre he visto en el una gran persona como ser humano, como amigo, como familiar, con unas cualidades extraordinarias para la medicina, es como algo destinado, ya que nunca pude ver en el disgusto ni agravio por tareas encomendadas, dentro de su carrera y su ejercicio de la profesión. Siempre cumplidor, animoso ,con una Fe extraordinaria. Pasaron los anos y nos separamos, a ejercer en distintas zonas, luego en el 85 empece a hacer mi Especialidad de Medicina en el Hospital de s.Spiritus, y nos encontramos de nuevo, siendo el profesor mio, ensenandome mas ese Arte, suyo de ser un medico humano, y asi aprendi mucho mas y me gradue allí de Especialista con su ejemplo y sus enseñanzas, para la vida profesional. Querdo por todos los colegas, admirado por muchos pacientes, Siempre sere admirador de este Profesor, y que Dios ayude a su pronta recuperación de su estado de salud, y estemos al tanto de de su evolución y Que todo sea bien
Felicidades al Periodico Esacambray y a este periodista , que tubo la delicadesa de onrrar a este icone de la medicina espeirtuana, ser humano maravilloso, exelente profesor, cristiano deboto, medico de corazon y fe, hombre integral, ogala el mundo tubiera muchos Ornias, Creo que todos los que hemos tenido la suerte de conocerlo y de ser sus alumnos tenemos la misma opinio, mis votos de salud y pronta recuperacion , que dios le acompañe en estos momentos dificiles , tube la suerte de ser unos de sus primeros alumnos en el policlinico sur y siempre he cargado sus enseñasas.
Después de ver tan lindo homenaje no tengo muchas palabras porque está todo dicho, pero para agregar algo mas solo desearle mucha salud a este gran hombre de la Medicina y la Sociedad. Lo conoci como persona y también a su familia, soy médico y no tuve la dicha de tenerlo como profesor porque me fui de mi Provincia antes, pero si se la gran persona que es y se de su calidad humana. Un abrazo gande y todo mi cariño para él y su familia. Es un orgullo. Aleida Vega
Honor a quien honor merece y que mejor ejemplo a nuestro maestro Dr Ornia. Profe siempre fuiste mi inspiración en Medicina Interna, orgulloso de sentirme un devoto a esta y a la semiolodía, pues me sembró el método clínico como la línea central dentro del ejercicio de la medicina y fuera de este nada. Eso es lo que nos distingue como médicos cubanos que con una modesta bata blanca, un esteto y un esfigmo sin muchos lucros somos capaces de enfrentar situaciones clínicas de cualquier indole y resolverlas sin tener que recurrir a las mas modernas y costosas tecnologías que no están al alcance de los ciudadanos común y corriente de este planeta. Viva nuestra escuela de medicina cubana y todo su claustro. Jorgito de Cienfuegos desde Las Vegas EU.