La entidad, segunda aportadora de arroz en el país, incluye a la ganadería entre las aristas que distinguen su diversificación productiva
El programa de desarrollo ganadero que se ejecuta en la Empresa Agroindustrial de Granos Sur del Jíbaro (EAIG), en Sancti Spíritus, facilita la recuperación de los pastoreos típicos y el aumento en los volúmenes de produción de leche y carne.
Aunque la EAIG ubicada en el municipio de La Sierpe es considerada la segunda productora de arroz en Cuba con cerca del 25 por ciento de lo cosechado en el país, desde hace algunos años desarrolla paralelamente otros frentes como el de los frutales y el de la ganadería, con el fin de diversificar sus aportes y aprovechar las potencialidades de esa región.
De acuerdo con José Luis García Pérez, director pecuario de la entidad, desde finales del 2013 ya se han puesto en explotación ocho pastoreos típicos y dos centros de recepción de animales, los cuales, a su juicio, desempeñan un papel determinante en la clasificación y posterior distribución de las reses.
Durante cuatro o cinco meses unas 150 cabezas de ganado permanecen bajo régimen de ceba en esas áreas con suficiente disponibilidad de forrajes y en una finca de alimento, todo lo cual posibilita que al momento de su traslado tengan un peso promedio de 400 kilogramos, acotó el directivo.
Subrayó que antes de comenzar a utilizar esos sitios es necesario reparar los comederos, las instalaciones de agua, los tanques para miel y el molino de viento, así como aplicar herbicida y realizar el acuartonamiento interno.
García Pérez dijo que ya se recuperaron también cuatro pesas para ganado, y se trabaja en la remodelación y reconstrucción de la vaquería Embarcadero a fin de obtener mejoras raciales y buscar de esta manera mayor producción lechera en el actual año.
Al decir de especialistas de la subdelegación de Ganadería en la provincia de Sancti Spíritus, todas estas acciones y el completamiento de los puntos refrigerados de leche, le permitieron a La Sierpe entregar a la industria en el 2015 cuatro millones 700 mil litros del líquido, dos mil 505 toneladas de carne vacuna y otras 300 toneladas de bufalina.
Para el presente año se prevé continuar incentivando la inseminación artificial y el mejoramiento genético, mientras se labora en otros tres pastoreos típicos y se pretende consolidar el trabajo con el ganado sardo para extenderlo a toda esa demarcación ubicada al sur de la provincia.
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