Escambray Periódico de Sancti Spíritus
Muchas personas son indiferentes al sufrimiento de animales que los ayudan a buscar el sustento o los acompañan en la vida diaria, dejándolos abandonados o maltratándolos
Cuando la enfermera intensivista Disney Rodríguez Polo entró en aquella farmacia de la periferia espirituana, oyó los gritos lastimeros de un cachorro y vio a una empleada dándole de patadas, se escandalizó y le preguntó por qué lo hacía; la aludida le respondió: “Le estoy dando para que se acabe de morir, pues hace como 10 días lo dejaron abandonado ahí cerca y se metió aquí”.
Entonces Disney, dolida en lo más íntimo, le replicó: “¿Y a ti te gustaría que te golpearan y te mataran de hambre y de sed? Mira, ¿por qué no le das agua y le traes comida de tu casa?”. Finalmente, como no iba a conseguir nada de esa mujer insensible, ella se encargó de buscar una solución a través de amistades que adoptaron al perrito.
Es solo una de las muchas anécdotas similares de esta fémina, quien en su amor por los animales afectivos llegó a buscar una casa que dispone de condiciones para atender a una pequeña manada de canes. Su caso es similar al de Águeda Rubio Madrigal, quien en su amplia vivienda alberga a ocho perros de diferentes edades, razas y tamaños, así como a tres gatos, a los que cuida y alimenta con especial esmero.
Águeda explica el porqué de esa dedicación singular a sus mascotas: “Existe un grupo al cual pertenezco que tratamos de cuidar los animales; yo tengo siete perros míos, uno postizo e incontables gatos, porque vienen aquí y trato de protegerlos, ya que son seres vivientes sensibles y merecen que se les atienda”.
Si muchos parecían los hechos de abandono y maltrato a perros, caballos y otros animales referidos por Águeda y Disney, María Cleofé Ogando de la Paz aporta para llenar un libro. Ella cuida cuatro canes y tres gatos en su también amplia residencia de Avenida de los Mártires.
Cleofé es miembro —quizá la única en Sancti Spíritus— de la Aniplant, especie de sociedad protectora de animales y plantas que existe nacionalmente y que está presidida desde hace 25 años por Nora García Pérez, una activista muy entusiasta criada por la espirituana de Tuinucú, María Álvarez Ríos, ya fallecida.
Pero los intentos de Ogando para crear una filial de esa institución en Sancti Spíritus, apoyados por —el también extinto— Ricardo Santillán Miranda cuando este fue presidente del Gobierno en el territorio, se ahogaron cuando él pasó a trabajar en la capital en el Instituto de Aviación Civil de Cuba.
De acuerdo con esta defensora de los cuadrúpedos, Nora la designó para representar la Aniplant en Sancti Spíritus, por cuanto esta provincia se incluye entre las de más alto índice de maltrato a los animales y agresiones de los cocheros a los equinos que utilizan.
POR DEFENDER UN CABALLO
De la presunta ausencia de una legislación que norme la conducta de las personas en relación con los animales se duele César Guerra González, técnico veterinario con 36 años de experiencia, quien se pregunta por qué no contamos con un instrumento jurídico que delimite responsabilidades y castigue los atropellos a los animales, siendo Cuba un país con una población sensible y alto nivel cultural.
A propósito del tema, César refiere un hecho que pudo terminar muy mal. Él relata: “Hace unos días cuando voy por la calle de los coches, un caballo se detiene y el hombre golpeándolo sin compasión. Yo le dije: Oiga, ¿usted no ve que ese animal no puede más, que está extenuado? Y él me preguntó: ‘¿Pero acaso tú eres el dueño del animal?’. Yo le respondí: No, pero soy veterinario, y se que ese caballo está agotado. Nada, que por poco aquello se va de control”.
Según Guerra González, él conoce ejemplos de mucha gente que, en cambio, recoge a los animales desvalidos, los desparasitan y los cuidan. “Incluso —plantea— a veces voy por un camino, veo perros y me detengo para atenderlos. Allí mismo les pongo vacunas, les curo las garrapatas y la sarna, porque están enfermos y creo que es mi deber”.
La duda sobre si existe o no una ley que ampare a esos seres irracionales la despeja Diana Companioni Blanco, subdirectora de la Dirección Provincial de Justicia: “Hasta el momento no conocemos de la existencia de algún tipo de normativa legal acerca de los derechos de los animales al buen trato, la alimentación y cuidado. Lo que sí están vigentes son normas y regulaciones legales para prevenir el comercio de animales en frontera y las dolencias que puedan transmitir.
¿SOLUCIÓN EN CIERNES?
En un lugar rústico, ubicado a un lado de la antigua carretera de El Jíbaro, existe un asilo para perros atendido por Santos Sánchez Roque, un hombre mayor que ha dedicado su vida a la atención a los canes, tarea que inició en el 2000 al fondo del Hospital Provincial.
De acuerdo con Sánchez, tiempo después y gracias a la Fundación Antonio Núñez Jiménez de la Naturaleza y el Hombre, se consiguió este terreno a donde se trasladó con sus cánidos, cuyo número suma hoy más de 60. Otras dos gratitudes expresa Santos Sánchez, y son para la Asamblea Provincial del Poder Popular, gracias a cuya gestión se les instaló agua y electricidad, y también al Matadero Municipal, que les garantiza la comida, la cual se cocina y se les sirve una vez al día.
¿Entonces ya no matan a los perros que recogen en la calle?
“No, antes los capturaban y si no los reclamaban antes de las 72 horas, los mataban. Si alguien los reclamaba antes de ese tiempo, tenía que pagar 50.00 pesos para recuperar el animal. Pero ya hoy no los matan, sino que nos los entregan. “He dedicado mi vida a cuidar estos animales. Dicen que el perro es el mejor amigo del hombre, pero yo me considero uno de los mejores amigos de los perros”.
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Escambray / ISSN 9664-1277
Muy buen trabajo el que están haciendo allí en esa provincia con el cuidado de los animales, ojalá se creen muchos más grupos sensibilizados con los animales para luchar contra la crueldad a la que estan expuestos. Yo soy de Villa Clara y le digo que el maltrato a los animales callejeros y caballos es enorme tambien por acá. Sigan así.
Que labor tan bonita estan haciendo en S Spiritu, deberian divulgarlo en programas nacionales a ver si en las demas provincias se hace algo parecido. Aqui en Ciego de Avila la situacion es tal como describe Ud. la de S Spiritu, muchos perros abandonados y que la gente maltrata, y con los caballos lo que hay es una masacre ante la vista de todos y cuando les dices algo a uno de esos abusadores o se burlan de uno o le dan mas golpes al pobre animal.
Yo soy de ciego de avila, ojala pudieramos hacer un refugio como este en mi provincia, lo mas urgente es lograr que aprueben la ley de proteccion animal, debemos hacernos oir de alguna forma, por mi parte ayudo a los que puedo tengo 2 perros y 3 gatos y ademas alimento a algunos animales de la calle, muy buen articulo.
Cuando se de estas acciones nobles me siento optimista
Buen trabajo. Duele ver tantos animales abandonados. Hace falta una legislación que atienda a los derechos de los mismos ante las salvajadas de algunos bípedos. También una accion gubernamental mas eficaz apoyando las asociaciones protectoras y creando espacios de acogida dignos para los fieles amigos que siempre están ahí. Resulta evidente que la realidad económica no permite el acceso de muchos animales a los servicios veterinarios, alimentación e higiene. Empecemos protegiéndolos, al menos, del maltrato físico.
Muchas gracias, Jorge por su opinión. Resulta estimulante que muchas personas piensen así y ello da fe de su humanismo.
Muy bueno su artículo, soy espirituano aunque no residente y me encantan los animales. Gracias
si el articulo esta muy interesante y la verdad deverian crear una ley para los animales ya que forman parte de la vida de las personas ya sea para la proteccion y compañia ya que hay otras leyes que para mi son algo diavolicas por que no crear una para el cuidado y proteccion de los animales todo pais sivilisado y culto lo tiene y nosotros que llevamos años para hacr el pais mas culto o uno de ellos no lo tenemos
Hola, soy de la habana y es primera vez que entro en su periodico y lo hice cuando vi el tema pues yo soy amante de los animales y me duele mucho ver cuando los maltratan, ojala pudiera tener la posibilidad de tener una casa que pudiera dar albergue a algunos aunque en mi pequeño apto tengo una gata y un curiel. Los amantes de los animales deberiamos hacer algo para que se acree una ley de proteccion como la hay en otros paises y que sea cumplida no que se quede en papeles. Creo que ANIPLA puede hacer mas porque hasta donde se aqui los perritos que recogen de las calles si los matan habiendo tanto terreno en los alrededores de la capital donde construir un buen refugio para aquellos que nos dan amor incondicional seas quien seas, trabajes donde trabajes.
Muchas gracias, Jorge por su opinión. Resulta estimulante que muchas personas piensen así y ello da fe de su humanismo.