Escambray Periódico de Sancti Spíritus
Dejar a un lado las tristezas y depresiones, avivar la llama que permanece oculta en el corazón, encontrar un sentido a la vida…son algunas de las misiones de la Casa del Abuelo de Fomento
Sancti Spíritus: Más de cien personas superan el siglo de vida
Fortalecen en Sancti Spíritus Programa de atención al adulto mayor
Pensaba que la vida no tenía sentido, estaba triste, deprimido, sin ninguna motivación para seguir adelante… Poco después llegó el consejo de una vecina, el testimonio de otro anciano, el interés por insertarse a la sociedad, fue como una luz en medio de la oscuridad. Mediante el policlínico solicitó ingreso al programa de atención del adulto mayor, que le abrió las puertas de la Casa del Abuelo en Fomento.
Una casona de portal amplio, techos muy altos y el patio premiado por la sombra que le confiere el árbol del mango, recibe cada mañana a 40 ancianos con más de 60 años y hasta algunos que superan los 80, pero cuentan con la vitalidad suficiente como para estar en ese colectivo.
VIVENCIAS
Hace una década Nibia Ugando Suárez, jubilada de 74 años, estaba muy sola, había perdido a su familia y pasaba el día pensando que su desgracia no tendría fin. “Llegué a la Casa del Abuelo muy desmotivada, nada era como antes, pero aquí encontré el deseo de vivir nuevamente”.
Tampoco Magdalena García Camacho, de 84 años, se derrumbó ante la muerte de su esposo, quien compartía con ella su estancia en esta institución de Salud, porque quedaron otros abuelos que la apoyaron emocionalmente para que siguiera asistiendo.
Ejemplos como estos hay muchos en el centro, según explica Yanisbel Alonso Bravo, la asesora del Programa Adulto Mayor y Trabajo Social en el municipio. Unos llegaron aquí por estar abandonados, otros por no tener familia o porque sus hijos trabajan y no quieren dejarlos solos durante el día, en fin, las caracterizaciones varían, pero el objetivo es solo uno, rehabilitar a los ancianos para incorporarlos nuevamente a la sociedad, al seno familiar y a la vida cotidiana”.
Fomento está considerado como el territorio con mayor envejecimiento poblacional de la provincia, 7 919 personas de la tercera edad, el 23,9 por ciento del total de la población, es por ello que resulta imprescindible el vínculo con la Casa del Abuelo y con el Hogar de Ancianos donde existe una sala con otros 30 que reciben la asistencia ambulatoria, desde las 7:30 a.m. hasta las 5:00 p.m.
RECUENTO
Unos 472 ancianos han transitado por la Casa del Abuelo fomentense desde que se fundó el 23 de febrero del 2001, perçiodo en el que el centro atesora disímiles experiencias. Narciso López González, el administrador, habla de los beneficios: “La nutrición sistemática y balanceada resulta indispensable en este tipo de institución, aquí los ancianos desayunan, almuerzan, meriendan y comen antes de regresar por la tarde a sus hogares.
“Una persona vinculada al centro paga una contribución mensual de 25 pesos, pero el gasto real supera los 400 pesos porque, además de la alimentación, ellos cuentan con los servicios de podología, estomatología, terapia ocupacional y recreación. Se trata de un programa subsidiado y priorizado, pues aquí los recursos no faltan, al igual que el presupuesto que se asigna por parte de Salud”.
Mientras recorremos las áreas de estar en la casona colonial observamos el desempeño de los ancianos; unos juegan al dominó, otros hacen muñecas, pelotas o cualquier juguete con recortes de tela y cartón para donarlos a los Círculos Infantiles y a las escuelas; hay quienes escogen el arroz, pelan viandas, especias y friegan la vajilla como parte de su rehabilitación integral; pero están también los que siembran plantas, los que ven la televisión o leen la prensa.
“Ellos se desempeñan según sus gustos — dice Acralys Triana González, trabajadora social y terapeuta—, aquí se crean su propio espacio, incluso, cada cual tiene su puesto en la mesa del comedor; pero igual está presente la recreación, de conjunto con la biblioteca, Cultura y el Inder, que acude hasta tres veces por semana para realizar los ejercicios. Además los llevamos a la playa, los museos, campismos y hacemos cumpleaños colectivos”.
“El programa estipula que la estancia en estas instituciones sea por períodos de entre seis meses y un año, para luego devolverlos rehabilitados al medio familiar; sin embargo, cuando les damos el alta, la mayoría se niega a irse, porque aquí encontraron bienestar, esa es la parte más difícil de la tarea y la otra, la falta de comprensión por parte de los hijos de algunos viejitos, por eso los aceptamos nuevamente, porque los invade la depresión”, aclara finalmente Yenisbel.
Entre cantos y risas, transcurre el encuentro con los abuelos de Fomento, unos posan para que los fotografíen, otros hablan de sus años mozos y algunos hasta se enamoran como Crescencia y Rafael que se conocieron allí y hoy comparten sus vidas, pero lo más reconfortante es que asistimos a un encuentro con la felicidad.
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Escambray / ISSN 9664-1277
Mi queja, más que queja es una falta de respeto para nosotros las personas de la 3ra edad que pertenecemos a la casa de abuelos diurna Alegre Vejez del municipio que resido, la misma situada en la calle Isidro González, y la situación es la siguiente llevamos 2 semanas que no se nos está haciendo comida, solo almuerzo y sin potaje, pues las razones es que no hay gas licuado y los cocineros a tal escases no desean cocinar con leña, como es normal cuando uno se adapta a la bueno, pero esto nos afecta a todos los ancianos, unos tienen hijos que sabes que el bocado para llevarse a la boca lo tienen seguro por las noches en sus casa pero nosotros los que no tenemos a nadie que comemos, acaso no necesitamos estos alimento me pregunto, ya una compañera fui al partido municipal y dio la queja, pero no hay accionado con ninguna solución y ya vamos por 2 semanas en las mismas condiciones acaso tengo que seguir escalando y llegar hasta las máximas autoridades a nivel nacional para que le den una solución inmediata a esta problemática ya que la base no resuelven el problema, pues me están obligando ya no estamos en los tiempos de antes que todos nos callábamos la boca y tragamos los problemas, ahora nuestro presidente nos ha dado esa confianza de hablar los problemas y darles las soluciones que eso lleva, yo no soy ninguna anciana analfabeta, gracias a esta revolución soy estudiada con altos reconocimientos académicos, fui miembro del PCC, FMC y otras organizaciones de masa ya no temo con quedarme callada, busco la solución inmediata a esa situación, porque el cocinar con leña no nos va a hacer menos cubanos, lo que quiere nuestra revolución son personas que con menos recursos hagamos más y no poner siempre lamentos y peros para resolver las cosas, ya estoy ajena a la vida laboral pero creo que aun existen escuelas internas, centros laborables que aún cosan sus alimentos con leña y no dejan de llevarse el bocado de comida a la boca esos estudiantes o esos trabajadores, porque acá que somos pocos ancianos no pueden hacer lo mismo y se puede solucionar el problema unos días hasta que entre el gas liquido al municipio y lo distribuyan, eso es la solución no es dejarnos sin comida en las tardes, analicen esto porque si esta semana no se le da solución seguiré escalando la montaña hasta llegar al peldaño más alto, y entonces ahí si que vendrá la solución, a ver qué respuesta convincente tiene el PCC y el Gobierno provincial de Sancti Spíritus.