Agobiado por tantas dilaciones en la reparación de la farmacia cercana, allá en Cabaiguán, escribe a esta sección Edel Zúñiga Barroso, residente en la Calle B No. 46, entre Masó y Agramonte, en el citado municipio.
La preocupación de Edel no es tan solo por una remodelación que, según se anunciaba en abril en la rendición de cuenta de su circunscripción, abarcaría la sustitución de la cubierta, sino también por los malestares que ha provocado el traslado del local hasta la Farmacia Piloto, lugar aún más distante.
“Se nos informó que el tiempo de terminación sería de dos meses para reabrir su servicio el 26 de julio —escribe el remitente— y ya estamos en septiembre y hasta el momento lo que han hecho es rebajar las paredes a la altura de arquitrabe y levantar las paredes de varios departamentos dentro del local. La obra ha quedado paralizada desde hace ya un buen tiempo por falta de materiales.
“Y yo pregunto: ¿hasta cuándo hay que seguir esperando para que terminen la remodelación de la farmacia Masó, tan necesitada para los ancianos e impedidos físicos?”, concluye el lector.
Parece que aún más. Al menos así lo esclareció a esta sección Carlos Robaina, director de Aseguramiento y Transporte de la Empresa Provincial de Farmacias y Ópticas.
“La farmacia Masó estaba en un plan de reparación y mantenimiento con un presupuesto de 1 000 pesos, pero a solicitud de la directora municipal al Consejo de la Administración Municipal se le asignó una cifra del 1 por ciento de lo aportado por el desarrollo local con el objetivo de cambiarle la cubierta.
“Ese centro se está haciendo nuevo, ya se fundió la cimentación y se va a echar una placa aligerada. Los recursos están todos garantizados y aunque, debido al ciclón, tenemos afectación en 24 farmacias de la provincia, la Masó se va a terminar”, asegura el directivo.
No será de momento. Habrá que esperar por una reparación capital —si se viene a ver—, por una inversión extra planes, por una reconstrucción desde los cimientos…
“Nunca se dijo que se entregaría el 26 de julio —aclara Blanco Robaina—. Se dijo que podría ser para el 22 de noviembre, día del farmacéutico, pero el compromiso es terminarla en este año”.
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