La adolescente Geyla Neira Ramírez obtuvo el segundo lugar en el popular concurso de participación infantil
Una Colmena con sello propio (+fotos)
Tuvo un don especial: atrapar, como pocos espacios televisivos del verano, la atención de las diferentes generaciones de cubanos. Todos los viernes en la noche, la combinación entre la espontaneidad, buen gusto, talento, inteligencia y alegría infantil, sedujo a quienes a pesar del calor apostaron por gozar de La Colmena TV.
Y más en tierra espirituana, donde, para sorpresa de muchos, tres de sus 32 participantes eran de Jatibonico: Geyla Neira Ramírez, Amelia Marrero Alonso y Karla Soriano Osorio. Todas herederas de los conocimientos del proyecto comunitario de ese municipio: La Carpa de Tin Marín.
Hace una semana, la noticia de que Geyla arrasó con los cómputos de la competencia en actuación, interpretación y danza endulzó aún más a quienes siguieron un certamen que, además de ser una estricta competencia, se introdujo en las esencias del ser humano porque “tener talento, es tener buen corazón”. El segundo lugar de Geyla demostró que en Jatibonico existe buena miel para La Colmenita.
“Nosotras vimos la convocatoria por televisión y decidimos presentarnos. Allá nos pidieron que hiciéramos lo que tuviésemos preparado y yo canté. Mientras pasábamos las diferentes pruebas, nos convocaban a talleres, hasta que me llamaron para darme la noticia de que formaba parte del grupo. Di muchos brincos de alegría”, expresa quien desde su llegada a predio jatiboniquense no ha parado de recibir felicitaciones por su lauro y el reconocimiento de las autoridades de su municipio.
Con 14 años recién cumplidos, esta estudiante de la Escuela Secundaria Básica Urbana Juan Manuel Feijóo recuerda con precisión su primera vez en un escenario. Su debut fue con una obra del Apóstol, ahora un cercano amigo gracias a La Colmena TV.
“Estaba en preescolar, la maestra preguntó quién podía interpretar la bailarina española y yo me presté. Me dio un poco de pena, al igual que me sucede con otras muchas cosas, como hablar en público. Pero, cuando actúo la cosa cambia”, añade.
¿Cómo descubres ese placer?
“Bailaba en las carrozas que se hacen en el municipio y por ahí me hablaron del grupo de teatro La Carpa de Tin Marín. De eso hace dos años. Fui a probar y me gustó. Gracias a Olisvael, su director, e Ismaray, una de sus instructoras, gané muchos conocimientos. Pertenecer allí ha sido muy divertido porque una expresa lo que siente”.
¿Cómo fue la acogida en el colectivo del programa televisivo donde casi todos los participantes eran de la capital?
“Muy bien porque hicimos amistades rápido. Ellos te abren las puertas con facilidad”.
Y con la misma naturalidad con que responde cada pregunta, Geyla Neira Ramírez se acomodó al grupo Los pillos manigüeros, donde Muma, su tutora, aplicó la mejor receta martiana: “Ayudar al que lo necesita no solo es parte del deber, sino de la felicidad”.
¿Qué pasó por tu mente la primera vez en televisión?
“Fue con una canción, algo que nunca había hecho en público, pero logré que saliera. Cada vez que estábamos frente a las cámaras sentíamos miedo, aunque cuando actuaba todo era más seguro”.
Precisamente, en esa manifestación compartiste con uno de los grandes de la escena cubana: Osvaldo Doimeadiós…
“Fue una experiencia súper linda. Lo había visto en el Festival Olga Alonso, donde fue jurado. Luego, él me comentó que mi carita le parecía conocida de ahí. Esa última noche me puse nerviosa. Cuando le soné el cocotazo, él me dijo: ‘Dame duro’, y lo hice así. Después me comentó que actuaba bien y que fue un gusto trabajar conmigo. Es muy amistoso”.
Otro de los premios, sin duda, fue compartir escenario con Alexander Abreu, quien la espera el próximo 7 de octubre para interpretar la misma melodía en su concierto planificado en el Teatro Karl Marx, en La Habana.
“El concurso me permitió conocer mucho más a José Martí. Tin Cremata siempre nos decía que no se puede flotar cuando se habla del Maestro. Hay que bucear en su vida y obra. Uno de los regalos que nos dieron fue una tableta con casi todos sus textos y mucha información”, añadió.
La Colmena TV también le enseñó cómo el arte resulta el mejor de los lenguajes para aliviar los espíritus al presentarse en Centro Habana, un municipio capitalino afectado por el huracán Irma. Actuar en el otrora Cuartel Moncada y, en los próximos días, enrolarse en una expedición por municipios villaclareños y avileños damnificados por el ciclón se suman a las tantas congratulaciones dejadas por ese peculiar certamen.
“Estuve muchos meses fuera. Incluso, para cerrar el curso debieron ser flexibles. La suerte era que, desde aquí, me enviaban cartas y llamadas telefónicas para darme ánimo”, dice con la misma sonrisa que le arrancó a la audiencia, mientras demostró dominio del humor en escena, dotes histriónicas que estudia de Pánfilo, su personaje preferido.
¿Con qué te quedas de La Colmena TV?
Con las amistades. Fíjate, que dicen que el año próximo vienen todos a celebrarme mis 15 años. Ya soy parte de esa gran familia que me enseñó no solo a decidir que quiero hacer las pruebas para ingresar en la Escuela Nacional de Arte, sino que con nuestras actuaciones les alegramos el corazón a muchas personas.
Muchas Felicidades mi niña tú y los otros concursantes tuvieron el privilegio de endulzar nuestros domingos, ahora nos queda la nostalgia de cómo serán nuestras noches de domingo sin ustedes. A tus padres mis saludos también por educarte con tan buen corazón.
Te deseo muchos éxitos en la vida y que logres todas tus metas.
Me encanto su actuación en todas las presentaciones, me sentía emocionada en saber que era de mi lugar de nacimiento y tiene un gran talento, felicidades y que continúe recibiendo más reconocimientos.
Todos los nacidos en ese terruño, independientemente de la edad, disfrutamos su éxito. Con orgullo siempre hablamos de nuestros maestros de Camilo Cienfuegos, Heriberto Felipe o de cualquier otra escuela de nuestro pueblo; también de los promotores culturales y profesores de deportes, son ellos los que han aportado de manera decisiva en la formación de niños y niñas como Geyla. Para los formadores de Jatibonico, que ya no están entre nosotros, es también el reconocimiento.
Me encantó Geyla, tiene un talento fenomenal, sabe bailar, cantar, actuar y tiene gracia . Con ese talento debe tener tremendo corazón. Felicidades preciosa.
Muchas felicidades para Geyla, los espirituanos nos sentimos muy orgullosos de sus logros en el programa, al igual que las demás participantes de Jatibonico…felicidades a todas…