Escambray Periódico de Sancti Spíritus
Estados Unidos ha entrado en una “nueva era de rivalidad”, en la cual su liderazgo es amenazado por Rusia y China, afirmó Donald Trump
“Hemos entrado en una nueva era de rivalidad, en la que potencias rivales como Rusia y China tratan de desafiar la influencia y los valores de EE.UU.” en el mundo, dijo Trump en su discurso al presentar la nueva Estrategia de Seguridad Nacional estadounidense.
El jefe de la Casa Blanca aseguró que Washington, sin embargo, “tratará de construir buenas relaciones de cooperación con todos los países”, pero siempre protegiendo sus propios intereses. Un ejemplo de esa “cooperación exitosa”, destacó, fue la prevención de un atentado terrorista en San Petersburgo gracias a la información facilitada por la CIA a las fuerzas de seguridad rusas.
El arma más poderosa de EE.UU.
En cuanto a Corea del Norte, el mandatario subrayó que EE.UU. y sus aliados tomarán todas las medidas necesarias para lograr la desnuclearización de la península coreana, y para que Pionyang “nunca más sea capaz de amenazar la paz mundial”.
Según Trump, el “problema norcoreano debió ser resuelto hace mucho tiempo“, incluso antes de que él llegara al poder. “Entonces este problema se podría haber solucionado de manera más fácil”, lamentó, aunque adelantó que Washington resolverá esta crisis porque “no tenemos otra opción“.
Por otro lado, el mandatario afirmó que “una de las armas más formidables” con las que cuenta Estados Unidos es el “crecimiento del PIB”, que bajo su administración “está por encima de todas las previsiones”.
Los Gobiernos de China y Rusia respondieron hoy con críticas al presidente estadounidense, Donald Trump, después de que este se refiriera a los dos países como poderes “rivales” que tratan de modificar el orden mundial y que suponen un peligro para los intereses estadounidenses.
Rusia criticó en duros términos la nueva estrategia de seguridad de Estados Unidos y la calificó de “imperialista”.
“Ya en la lectura rápida, sobre todo de los pasajes que afectan a nuestro país, queda claro el carácter imperialista del documento“, aseguró el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, citado por la agencia de noticias Tass.
Washington sigue viéndose a sí misma como la única potencia mundial. Pero Rusia se niega a ser descalificada como enemiga de Estados Unidos.
En el texto, Trump señala a China y Rusia como desafíos al poder, a la influencia y a los intereses de Estados Unidos, pese a que el presidente ha recurrido a ellos en los conflictos con Corea del Norte e Irán.
Según Peskov, en el documento hay muy pocos elementos positivos como la disposición manifestada por Estados Unidos a cooperar con Rusia en los asuntos de su interés. Por ejemplo como ocurrió recientemente, cuando el servicio secreto CIA áalertó a las fuerzas de seguridad rusas para que impidieran unos atentados en San Petersburgo.
Estados Unidos lleva adelante una “guerra híbrida” contra los Estados sucesores de la Unión Soviética y quiere desestabilizar la situación allí, dijo el jefe del servicio secreto exterior SVR, Serguei Naryshkin, quien acusó a Reino Unido, Suecia, Polonia y a los países bálticos de apoyar estos ataques.
El Ministerio de Exteriores ruso exigió además a Estados Unidos que retire sus armas nucleares de los países miembros de la OTAN áde Europa Occidental.
Rusia replegó ya en 1989/90 todas sus armas nucleares a su territorio, dijo el director de la sección de control de armamento, Mijail Ulianov.
El Ministerio de Relaciones Exteriores en Pekín, por su parte, aseguró hoy que Estados Unidos debería abandonar su “mentalidad de la Guerra Fría”.
“Urgimos a Estados Unidos a abandonar la intención estratégica de tergiversar deliberadamente la imagen de China y abandonar los conceptos obsoletos de la Guerra Fría que se basan en el pensamiento de suma cero. De lo contrario, dañará a otros además de a sí mismo”, dijo la portavoz del ministerio Hua Chunying, quien llamó a Wahington a encontrarse con China “a medio camino”.
Es natural que entre dos potencias surjan diferencias, pero hay que trabajar de manera constructiva en ellas, agregó. Como mayor potencia industrializada y mayor potencia emergente, China y Estados Unidos tienen una gran responsabilidad, subrayó. “La cooperación es la única elección correcta”, señaló.
En una declaración paralela de la embajada china en Washington se añade que quien pone sus propios intereses por delante de los de otros países y de la comunidad internacional “necesariamente se autoaísla”. Designar a China como adversario y a la vez pedir su cooperación es una contradicción en sí misma.
Estados Unidos tiene que aceptar el desarrollo de China y prepararse para ello, señaló la legación diplomática china.
En las 68 páginas del documento estadounidense se afirma que China y Rusia “utilizan tecnología, propaganda y coerción para diseñar un mundo antitético a nuestros intereses y valores”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores chino rechazó esa caracterización y aseguró que las ambiciones globales de China son en general bienvenidas y bienintencionadas.
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Escambray / ISSN 9664-1277
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