En salud, Correa recordó que cuando comenzó la gestión en 2007, encontró al país con una cama hospitalaria por cada mil habitantes y ahora culminan con 1,8, casi la cifra de dos recomendada por la Organización Mundial de Salud (OMS).
‘Encontré un país destrozado, desmoralizado, fracturado por la tragedia de la migración familiar y con una sociedad fracturada. ÂíHoy, cómo ha cambiado, en todos lados se habla del proceso ecuatoriano’!, aseguró.
Correa precisó que al inicio la economía estaba en 46 mil millones de dólares y ahora al término de su mandato, en mayo próximo, cerrará en cien mil millones, mientras la pobreza extrema rondaba entre el 17 y 18 por ciento y actualmente está sobre el siete por ciento.
Ecuador estaba entre los tres países más inequitativos de América Latina y pasamos a ser uno de los más equitativos, especificó.
Advirtió además que hace una década la vialidad nacional era de las peores, sin embargo ahora es la mejor de Suramérica.
Mencionó miles de kilómetros de carreteras, más de un centenar de escuelas del milenio, con todas las condiciones para un proceso educativo de calidad, centros de atención de salud, una reducción considerable en el déficit habitacional y la rápida respuesta ante el sismo de 7,8 ocurrido hace nueve meses en la costa, entre los avances.
‘No solo hemos mejorado, hemos revolucionado en términos positivos y somos ejemplo, hemos pasado de los últimos a los primeros puestos’, añadió.
Como en otras ocasiones, insistió en que el mayor logro es intangible y lo constituye la nueva actitud del pueblo ecuatoriano y haber demostrado juntos, como pueblo, la realidad de convertir sueños en hechos.
‘El mejor ejemplo es lo vivido’, alertó y enfatizó que por la tercera parte de los problemas financieros y naturales enfrentados por los ecuatorianos recientemente, la economía hubiera colapsado como pasó en 1999.
‘Por primera vez en la historia desde que somos exportadores de petróleo, no recibimos un centavo de ingreso petrolero como gobierno central, sino que tuvimos que dar mil 600 millones de dólares a Petroecuador y Petroamazonas para que no quiebren’, aseveró.
Asimismo insistió en que en los últimos años se desplomaron las exportaciones en un 40 por ciento, lo cual representa pérdidas de 10 mil millones de dólares y aun así no hubo paquetazos, como se conoce a las medidas aplicadas por otras administraciones en detrimento de la población.
‘No es solo que no hemos colapsado, sino que la economía muestra claros signos de recuperación’, ratificó.
Según estimó, Ecuador descubrió capacidades que no conocía y aunque ha faltado mucho, jamás se ha hecho tanto como ahora.
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