Acelera la provincia los preparativos de la cosecha a iniciarse en enero en los centrales Uruguay y Melanio Hernández
Los trabajos para organizar y preparar la zafra azucarera llegan a un período definitorio ante la cercanía de la arrancada prevista para enero en ambos centrales, a la vez que restan importantes labores por ejecutar como parte del calendario de reparaciones e inversiones trazado en cada fábrica.
Si bien en la cosecha se prevé un decrecimiento productivo por la menor disponibilidad de materia prima debido al impacto climático, la recuperación del cultivo tras el azote del huracán Irma vislumbra una recuperación que obligará a convertir la eficiencia en la herramienta fundamental para contrarrestar la incidencia que pueda ocurrir en el rendimiento, declaró Elvis González Vasallo, director general de la Empresa Azucarera Sancti Spíritus (EASS).
“Hoy el estado vegetativo de la caña es bueno, en esta etapa se ejecutan acciones encaminadas a solucionar problemas de la pasada campaña relacionados con el alto tiempo perdido y las dificultades en la generación de vapor, se requiere también revertir el mal estado de los caminos y nos preparamos para hacer una zafra rápida —menos de 100 jornadas— y eficiente, sacarle el azúcar a cada tallo que llegue al basculador”, añadió la fuente.
Las fuerzas industriales han reducido la mayor parte del atraso que provocó el huracán en el programa de reparaciones, de ahí que el cronograma reporta alrededor de un 90 por ciento de ejecución en el central Uruguay y más del 80, en el Melanio Hernández.
Jorge Hernández Fernández, director de Plantas Industriales en la EASS, explicó que el coloso de Jatibonico se realizan acciones de envergadura en el área de calderas, dos de ellas sometidas a reparación capital, en tanto en el ingenio de Tuinucú es prioridad el tándem, uno de los causantes del alto tiempo perdido en la última contienda.
Agregó Jorge Hernández que en todas las áreas fabriles se realizan trabajos dirigidos a mejorar la operación y, además, se actúa en las dos fábricas en la materialización de cinco programas de medidas orientadas por el grupo Azcuba que guardan relación con la eficiencia en el tándem, con la miel final y el uso del bagazo como combustible.
“Otro paquete de medidas incorporado tiene que ver con crear las condiciones que nos permitan moler de forma ininterrumpida con altos niveles de tierra, como quiera que la política este año con las nuevas combinadas indica cortar por debajo de la tierra para no dejar el trozo de caña que tiene mayor concentración de sacarosa, un método nuevo, pero ya usado en otros países que explotan la nueva tecnología para eliminar la pérdida en cosecha”.
Las proyecciones de la cercana zafra incluyen capacitar a todas las fuerzas involucradas en el proceso, producir azúcar de alta calidad, completar el alistamiento de los dispositivos de corte y tiro de la materia prima, así como probar la maquinaria de ambos centrales previo a la arrancada prevista en Uruguay y Melanio Hernández para los días 11 y 22 de enero, respectivamente.
Los espirituanos trabajando a toda máquina para su incorporación a la zafra.
En todos los territorios se alistan para el comienzo de la zafra, en trabajos de reparación y preparación. Los espirituanos siempre entregados a su labor con compromiso y disciplina.