Trump vaticinó que retomarán el tema de una ley sanitaria cuando la normativa actual explote y los demócratas se acerquen a los republicanos
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, vaticinó que retomarán el tema de una ley sanitaria cuando la normativa actual explote y los legisladores demócratas se acerquen a los republicanos para proponerles un trato.
Después de que los miembros del partido rojo retiraran este viernes un proyecto de salud ante la ausencia de los votos necesarios para aprobarlo en la Cámara de Representantes, el mandatario achacó el fracaso a la falta de apoyo bipartidista.
El jefe de Estado expresó su reiterado pronóstico de que la Ley de Cuidado de Salud Asequible de la administración de Barack Obama (2009-2017) se desmoronará y dijo que después de un año muy malo los miembros de la formación azul volverán a la mesa de negociaciones.
Creo que vendrán a nosotros y pedirán reunirse y obtener un plan que sea realmente grande para la gente de nuestro país, expresó a los medios desde la Casa Blanca, escoltado por el secretario de Salud, Tom Price, y el vicepresidente, Mike Pence.
Según Trump, los perdedores con lo sucedido este viernes son los líderes de la minoría demócrata en la Cámara y el Senado, Nancy Pelosi y Chuck Schumer, respectivamente, porque ahora ellos poseen la normativa vigente, conocida como Obamacare.
No es algo republicano, es una ley demócrata, y la tendrán durante un poco más de tiempo, manifestó.
Los miembros del partido azul, por su parte, aplaudieron el fracaso de la iniciativa y Pelosi señaló que la unidad de esa fuerza fue un mensaje muy importante para el país.
Hoy es un gran día, lo que sucedió en la Cámara es una victoria para el pueblo estadounidense, consideró la líder demócrata después de que todos los congresistas de su formación se pronunciaron en bloque contra la medida.
Schumer, a su vez, rechazó la acusación de Trump y sostuvo que el presidente debe culpar del fracaso a su incompetencia y a su predisposición a romper sus promesas de campaña.
Pese a las declaraciones del mandatario de que se trata de un problema para sus contrincantes políticos, la retirada del proyecto es vista como la primera gran derrota legislativa de su administración, ya que desde su etapa como candidato hizo de la ley sanitaria una prioridad.
Si bien el presidente mencionó la falta de apoyo demócrata como la causa de lo sucedido, la mayoría republicana en la Cámara baja hubiera bastado para pasar la legislación.
De hecho, su partido podía permitirse que 21 de sus propios miembros le dieran la espalda a la propuesta, pero medios locales indicaron que eran más de 30 los opositores en las filas republicanas.
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