Once militantes de movimientos sociales se alistan para comenzar una huelga de hambre en demanda de la libertad del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, preso político hace 89 días, se conoció este cuatro de julio en Brasilia.
El ayuno será iniciado a fines de este mes y cuenta con el respaldo de la dirección del Partido de los Trabajadores (PT), señaló el diario digital Brasil 247, según el cual la posibilidad de que el propio Lula se declare también en huelga de hambre no está descartada.
La publicación recuerda que ‘en su prisión arbitraria y violenta de los años 80’ el fundador y líder histórico del PT fue obligado a emprender una protesta de este tipo para llamar la atención de la sociedad y de la justicia, en la época alineada al golpe militar y a las violencias de Estado.
En una carta difundida la víspera, Lula exigió al Supremo Tribunal Federal (STF) que respete el Estado Democrático de Derecho y denunció las maniobras de ministros de esa corte que impiden juzgar con imparcialidad los recursos presentados por su defesa.
El comportamiento público de algunos magistrados del STF -escribió- ‘es una mera reproducción de lo que pasó en la primera y segunda instancias’ judiciales, donde fue condenado a 12 años y un mes de prisión sin que fuera presentada una sola prueba para demostrar su supuesta culpabilidad.
Todo eso me lleva a presumir que ya no hay razones para creer que tendré justicia, sostuvo antes de apuntar que las recientes maniobras judiciales llevadas adelante por el ministro Edson Fachin en definitiva alcanzaron su objetivo y el pedido de libertad presentado por los abogados que lo defienden no fue juzgado.
‘Las decisiones monocráticas han sido usadas para escoger el colegiado que momentáneamente parece ser más conveniente, como si hubiera algún compromiso con el resultado del juzgamiento. Son concebidas como estrategia procesual y no como instrumento de justicia’, deploró.
Lula remarcó que ‘no estoy pidiendo un favor, estoy exigiendo respeto’; reiteró que no cometió ningún delito y confirmó una vez más que será candidato a presidente de la República hasta que sea presentada ‘por lo menos una prueba material que macule mi inocencia’.
Además de dar a conocer el manifiesto de Lula, ayer la presidenta nacional del PT, Gleisi Hoffmann, reveló los nombres señalados por el propio ex presidente para integrar la coordinación de la campaña electoral de este ano.
Fueron indicados el ex titular de la estatal Petrobrás José Sergio Gabrielli, quien fungirá como coordinador general ejecutivo; los ex ministros Ricardo Berzoini, Luiz Dulci y Gilberto Carvalho, y el presidente del Instituto Lula, Paulo Okamotto.
Con anterioridad, el ex alcalde de la ciudad de Sao Paulo Fernando Haddad había sido designado ya como coordinador general del programa de gobierno de Lula.
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