Calor: el cuartico está igualito en Sancti Spíritus

Aunque los especialistas insisten en que en la provincia las temperaturas han mantenido un comportamiento normal para el período, el calor se torna insoportable en estos meses de verano por una sensación térmica que lo refuerza, debido a que en junio se han mantenido los altos valores de humedad, vientos muy débiles y escasos aguaceros que refresquen los atardeceres.

“Las personas tienen muy pobre la memoria histórica meteorológica y se les olvida el calor que vivieron de un año para otro. Durante junio no se rompió ningún récord de temperatura. La provincia se divide en cuatro regiones climáticas —norte, interior, sur y montaña—, y la zona más cálida se ubica generalmente en el centro o interior del territorio. El valor más alto de junio se registró en la estación meteorológica de Sancti Spíritus, donde se reportaron 34.6 grados el día 22, todavía distante del récord impuesto el año pasado de 36.6 grados”, precisa Freddy Ruiz, especialista del Grupo de Pronósticos del Centro Provincial de Meteorología.

En julio los más altos valores se registraron entre el día 15 y el 18, en las estaciones de Sancti Spíritus y El Jíbaro, donde los termómetros alcanzaron entre 35 y 35.5 grados.

Sin embargo, los espirituanos no dejan de quejarse por la canícula, acentuada con las escasas precipitaciones ocurridas en junio, donde apenas se reportó el 55 por ciento del promedio de precipitaciones para ese mes; en tanto en julio llovió alrededor del 65 por ciento del promedio mensual. Además, se han registrado valores de temperaturas mínimas más altos, prácticamente no refresca en las madrugadas y suman más horas de calor continuo.

En cuanto a los rumores sobre la posibilidad de que ocurra aquí una ola de calor, Freddy Ruiz descartó esa posibilidad: “En las condiciones actuales no va a ocurrir, quizás en el futuro, de aquí a unas décadas pudiera suceder debido al cambio climático. Cuba es una isla larga y estrecha donde el régimen de vientos establece las brisas costeras en las tardes por el norte y el sur y la masa de aire cálido se queda en el centro. Pero por la noche ocurre el terral; es decir, que el viento empieza a soplar del interior hacia las costas haciendo que a diario se mueva esa masa de aire caliente, lo cual evita la ola de calor”.

Para agosto, el Centro Nacional del Clima pronostica un comportamiento meteorológico similar al de los primeros meses del verano: altas temperaturas y lluvias por debajo de la norma.