El director general de Estados Unidos del Ministerio cubano de Relaciones Exteriores, Carlos Fernández de Cossío, denunció la escalada en la retórica hostil de esa nación norteña hacia la isla.
De acuerdo con la información divulgada por la cancillería, el diplomático cubano alertó sobre reiterados pronunciamientos de altos funcionarios estadounidenses destinados a fabricar pretextos para conducir a un clima de mayor tensión bilateral.
En ese sentido, aclaró que ‘de manera muy específica, Estados Unidos pretende defender con cualquier recurso la política unilateral de bloqueo económico, que es objeto de repudio universal por su carácter criminal y violatorio del Derecho Internacional’.
También señaló que Washington conoce que se trata de una conducta que no cuenta con el respaldo de la población estadounidense ni de los cubanos residentes allí, y puntualizó que sus dirigentes atacan al sistema político y social escogido libremente por el pueblo cubano, desconociendo el derecho soberano de todo país a determinar su destino.
Fabrican acusaciones infundadas contra Cuba con los alegados incidentes de salud de sus diplomáticos en la isla -que insisten en llamar ataques pese a admitir que desconoce la naturaleza de esos hechos-, emitiendo imputaciones difamatorias sobre la seguridad de ese personal acreditado en La Habana, enfatizó Fernández de Cossío.
Según advirtió, tal postura pretende retomar la fracasada campaña contra Cuba en el área de los derechos humanos.
‘Lejos de dialogar sobre la base del respeto, como Cuba ha estado dispuesta a hacerlo con fines de cooperación, Estados Unidos acude a las acusaciones fraudulentas y a campañas difamatorias’, aseveró.
El gobierno estadounidense ‘viró la espalda a las Naciones Unidas en lo que respecta a los derechos humanos’, dijo al recordar los casos en esa nación de abusos con la pena de muerte, de violencia policial, las miles de personas sin vivienda, el abuso infantil, así como los bombardeos a terceros países.
Nada de lo anterior ocurre en Cuba o por causa de Cuba, afirmó Fernández de Cossío.
Según explicó el Director General, Washington dedica cada año recursos millonarios ‘para atentar contra el orden constitucional cubano, interferir en los asuntos internos y financiar a individuos que actúan como agentes de una potencia extranjera’.
‘Cuba es un país de paz que desarrolla sus relaciones exteriores sobre la base del respeto y la cooperación y tiene una trayectoria reconocida de solidaridad y amistad, particularmente con los países en desarrollo’, remarcó.
Finalmente, instó al gobierno de los Estados Unidos y su Departamento de Estado a prestar atención al reclamo universal el 31 de octubre, en las próximas votaciones de la Asamblea General de la ONU por un nuevo proyecto de resolución sobre la necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba.
Desde 1992, la comunidad internacional ha mostrado un categórico respaldo a la mayor de las Antillas, patentizado en los últimos tres años por 191 de los 193 Estados miembros de esa organización multilateral.
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