Al cumplirse este cuatro de diciembre dos años de su despedida física, el pueblo de Cuba honró a Fidel Castro con una ofrenda floral depositada ante el monolito con sus cenizas en el cementerio patrimonial de Santa Ifigenia.
Lázaro Expósito, primer secretario del Partido Comunista; y Beatriz Johnson, presidenta de la Asamblea provincial del Poder Popular, tuvieron a su cargo el simbólico gesto.
Esta marcha reedita la desarrollada el primer domingo del 2016 cuando finalizaron los nueve días de duelo vividos en Cuba desde el deceso del Comandante en Jefe el 25 de noviembre y el recorrido funerario a lo largo y ancho de la Isla con la urna contentiva de sus cenizas.
Durante poco más de una hora, los santiagueros peregrinaron por la avenida Patria y desde la plaza de la Revolución Antonio Maceo hasta la necrópolis, donde las flores en sus más diversas formas y colores en manos de cientos de personas connotaron el tributo al líder histórico de la Revolución cubana.
Con toda la solemnidad que guarda el camposanto, Monumento Nacional, fue apreciado el cambio de la guardia permanente de honor y se escucharon las palabras de Fidel Castro con el concepto de Revolución, devenidas guía de acción para fortalecer la construcción del Socialismo en el país.
El homenaje de esta mañana de martes fue extensivo a José Martí, el Héroe Nacional; y a Carlos Manuel de Céspedes, iniciador de las gestas por la independencia; y a Mariana Grajales, madre de la Patria.
Esta marcha popular cada 4 de diciembre comienza a insertarse en las más entrañables tradiciones de una ciudad que atesora tanta historia y donde las tumbas de héroes y mártires se integran a un patrimonio sentimental de hondas raíces en la espiritualidad de sus gentes.
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