Durante el año en curso, la provincia acometerá un amplio plan de viviendas que beneficiará, fundamentalmente, a los damnificados del huracán Irma
Más de 730 viviendas por la vía estatal se pretenden levantar durante el año en curso en la provincia, cifra que, si bien no cubre las necesidades de la población espirituana, es la mayor de la última década.
De acuerdo con Néstor Borroto González, director de ese organismo en Sancti Spíritus, del total comprometido para la etapa 554 beneficiarán a familias cuyos inmuebles sufrieron derrumbes totales durante el paso del huracán Irma, el resto tendrá entre otros destinos, los casos sociales con una situación crítica.
Borroto González explicó, asimismo, que el programa para damnificados se concentra en Yaguajay, municipio más afectado por el meteoro y donde se habilitaron parcelas en lugares como el reparto Revolución y el Taller Central donde se levantarán 116 apartamentos en edificios de dos y tres niveles, a lo cual se suman la construcción de casas aisladas y 50 petrocasas.
De igual manera, se continuará con la edificación de un centenar de viviendas rústicas en zonas rurales y, no obstante la prioridad que tiene el norteño territorio, también se ejecutarán inversiones similares en Trinidad, Cabaiguán y Sancti Spíritus.
“A pesar de que enero ha sido un mes de ajustes y con limitaciones en la llegada de algunos recursos se pudieron entregar unas 50 viviendas, en su mayoría para cubrir las afectaciones de Irma” acotó el directivo.
De las más de 19 159 moradas que Irma afectó en esta provincia, a mediados de enero se habían solucionado 6 409, lo que representa el 33.5 por ciento, debido, sobre todo, a la respuesta en recursos para reparar los daños parciales de techo.
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