Enrique Villegas, un hombre extraordinario

Enrique Villegas Martínez devino verdadero campeón organizador del frente guerrillero del Directorio Revolucionario 13 de Marzo en el lomerío de Guamuhaya. Su caída el 25 de enero de 1958 lo convirtió en el primer mártir del Escambray “¿Que quién era Enrique Villegas? Era un hombre extraordinario. Él fue dirigente de

Enrique Villegas Martínez devino verdadero campeón organizador del frente guerrillero del Directorio Revolucionario 13 de Marzo en el lomerío de Guamuhaya. Su caída el 25 de enero de 1958 lo convirtió en el primer mártir del Escambray

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Villeguita se dirige a los presentes durante un acto por el aniversario de la caída de Antonio Guiteras.

“¿Que quién era Enrique Villegas? Era un hombre extraordinario. Él fue dirigente de los estudiantes en el antiguo preuniversitario en la calle Independencia, cerca de la fábrica de tabacos, donde existía una tarja dedicada a los dos estudiantes de Medicina espirituanos fusilados por los españoles en noviembre de 1871 en La Habana”.

Así se expresa de su amigo desaparecido hace 60 años el veterano dirigente juvenil yayabero Miguel Ángel Torres, fundador de la Asociación de Jóvenes Rebeldes en Sancti Spíritus, quien llegó a ser primer secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas en la antigua provincia de Las Villas.

Miguel Ángel, hoy residente en La Habana, evoca con devoción a su antiguo compañero de luchas: “Yo conocí a Villegas en los años 50 del pasado siglo cuando entré en el Instituto de Segunda Enseñanza en la calle Marcos García, hoy Avenida de los Mártires.

“Un día me preguntó un compañero: ¿Quieres conocer al tipo más revolucionario que hay en Sancti Spíritus? Le dije que sí y me llevó a un quiosquito que quedaba donde hoy está la pizzería Sicilia. Ese amigo me dijo: Mira, este muchacho es guiterista (*) igual que tú.

“Ahí empezó nuestra relación con Enrique. La Dirección del Instituto no lo dejaba entrar en el centro, pero aún así, en lo adelante él nos orientó en la realización de nuestras actividades revolucionarias, como las que dábamos los 28 de enero, cuando se reunían el alcalde municipal con la Policía para sus actos cívicos en el parque Serafín Sánchez y nosotros íbamos allí en manifestación portando carteles a donde estaba ubicado el busto a Martí.

“A pesar de la tiranía y sus esbirros el parque era de nosotros. Allí metíamos unos actos que las más de las veces terminaban en bronca con los cuerpos represivos”.

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Combatientes del Directorio rinden homenaje a Enrique en el lugar de su primer entierro en Güinía de Miranda.

¿Conoció usted por entonces de los planes de Enrique?

“No. Enrique nunca nos dijo que él estaba en el Directorio Revolucionario 13 de Marzo junto con las Suárez, especialmente María Josefa, la única que queda viva de las tres hermanas, aquí en La Habana, y un hermano, Gabriel, quien fuera oficial del Ejército Rebelde y luego Héroe del Trabajo de la República de Cuba (**), quien falleció hace tiempo en un accidente”.

Sobre este punto hace luz Garelí Méndez, otro conocido dirigente juvenil espirituano, quien afirma que Enrique Villegas, Ernesto Valdés Muñoz —“Valdecito”—, Manolito Solano y Horacio “Piro” Abreu, entre otros compañeros, fueron los que constituyeron el Directorio aquí, y gracias a ellos se logró un espíritu de colaboración y de unidad ejemplar entre las distintas formaciones.

 VILLEGAS: UN DÍNAMO HUMANO

   Díscolo y excitable por naturaleza, Villeguita nació el primero de agosto de 1924 en la villa del Yayabo y mostró desde la infancia un carácter fuerte y una disposición natural para la acción, unido a un acentuado espíritu de justicia.

Ya en la Escuela Primaria Superior de la ciudad, funda la Asociación de Alumnos, donde empieza a mostrar su valentía y dotes de dirigente. A poco de su ingreso en el Instituto de Segunda Enseñanza auspicia el primer movimiento revolucionario de ese centro para declarar a Sancti Spíritus ciudad muerta, en solidaridad con los obreros del azúcar, acción que le acarreó el acoso de los esbirros del tirano.

Con posterioridad, Enrique fue expulsado del Instituto por la dirección plegada al régimen, por lo que se traslada a la Escuela de Comercio, donde se destacó como organizador de la Asociación de Alumnos, que pasa a presidir en el curso 1948-49. Poco después dificultades económicas lo obligan a dejar los estudios y entonces empieza a trabajar en el establecimiento RCA Víctor, en la calle Independencia.

En esta etapa, Villeguita se suma a la Unión Institucional Revolucionaria y participa con otros dirigentes estudiantiles en la elaboración de un plan para ajusticiar al dictador Fulgencio Batista en ocasión de su proyectada visita al Instituto de Segunda Enseñanza.

EPÍLOGO GLORIOSO

La idea de la nueva dirección del DR-13-M, —bautizado así después del fracaso del asalto al Palacio Presidencial el 13 de marzo de 1957—, encabezada por Faure Chomón Mediavilla, de abrir un frente guerrillero en el Escambray, contó en la antigua provincia de Las Villas con dos baluartes: Ramón Pando Ferrer en Santa Clara y Enrique Villegas en Sancti Spíritus.

Villegas dejó a Horacio “Piro” Abreu al frente de la actividad clandestina en la zona y el 26 de diciembre de 1957 subió al Escambray llevando 12 000 tiros y un gran lote de medicamentos, como parte de los aprestos del teatro de operaciones guerrilleras, que incluyó contactos con colaboradores del lugar y exploración de sitios para los futuros campamentos.

Pero el 25 de enero de 1958, en la finca El Naranjo, próxima a Güinía de Miranda, es sorprendido y cae mortalmente herido en una emboscada del Ejército de la tiranía, el jefe del DR-13-M en la jurisdicción de Sancti Spíritus.

Loyda Borges, quien ingresó en el Instituto de Segunda Enseñanza a poco de la expulsión de Villeguita del plantel, recuerda que muchos condiscípulos suyos que habían coincidido con él hablaban mucho de Enrique Villegas y de Elcire Pérez, dos compañeros inolvidables, obligados a dejar el centro por sus actividades revolucionarias.

“El día que lo mataron –recuerda Loyda—, un compañero nuestro llamado Arturo Rodríguez García, “Chero”, se levantó en plena clase de Geografía, y pidió un minuto de silencio a la memoria de Enriquito. Preciso es decir que, emocionados y sorprendidos, todos lo acatamos”.

(*) Guiterista se llamaba a los seguidores del luchador izquierdista Antonio Guiteras Holmes, ex ministro de Gobernación del llamado Gobierno de los 100 Días, de Ramón Grau, asesinado por Batista en El Morrillo, Matanzas, en 1935.

(**) Introdujo en Cuba la tecnología de los tanques elevados para agua tipo hongo y la de estructuras para techos de esterocelosía. La Sala Yayabo es un ejemplo.

Pastor Guzmán

Texto de Pastor Guzmán
Fundador del periódico Escambray. Máster en Estudios Sociales. Especializado en temas históricos e internacionales.

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