Lluvias complican la zafra en Sancti Spíritus

Las condiciones meteorológicas exigieron interrumpir la actual zafra en Sancti Spíritus, cuando el territorio ya ejecutó el 88 por ciento de  su plan
Desde hace algunos días las operaciones industriales fueron paralizadas en los dos centrales del territorio que intervienen en la campaña -el Uruguay y el Melanio Hernández-, porque la lluvia ha impedido continuar el corte en los campos cañeros.
Tradicionalmente en Sancti Spíritus la producción azucarera se inicia en diciembre, pero la sequía en el primer semestre del 2017 y luego las precipitaciones en el último cuatrimestre, que persistieron en el pasado enero, retrasaron el comienzo de la campaña, el cual se llevó a cabo a finales de ese mes del 2018.
Según expresaron a la ACN autoridades de la Empresa Azucarera Sancti Spíritus, la aguda temporada de sequía conspiró contra el rendimiento agrícola de las plantaciones y luego las intensas lluvias, sobre todo las asociadas al huracán Irma, impidieron la perspectiva de siembra de caña.
Aun cuando la madurez de la caña resultó pobre en los inicios de la contienda se venía aprovechando a más del 95 por ciento el rendimiento potencial de la gramínea y ello favoreció la extracción de azúcar.
A pesar de los mencionados imponderables los trabajadores del sector cañero-azucarero en la provincia enrumbaron sus pasos hacia la eficiencia industrial, lo cual atenuó la insuficiente calidad de la materia prima al inicio.
El rendimiento industrial (azúcar obtenida de la caña molida) fue aumentando paulatinamente y logró un comportamiento acumulado que sobrepasó el 10,40 por ciento.
También el recobrado (porcentaje de sacarosa extraída del jugo de la caña en el proceso fabril) llegó a casi el 85 por ciento; ambos indicadores permitieron que los espirituanos encabezaran la lista de los más eficientes en Cuba en un momento en el que se pensaba que ese ritmo posibilitaría cumplir las 92 mil toneladas de azúcar programadas.
Ahora es la naturaleza quien tiene la última palabra, pero el tiempo perdido será muy difícil para recuperar el atraso y poder satisfacer el objetivo inicial en los 95 días en los que se había planificado la realización de esta zafra.