Una discreta propuesta espirituana llegó a San Carlos de la Cabaña
Los destellos literarios espirituanos, en cuanto a cantidad, poco alumbraron los gruesos muros de la Fortaleza San Carlos de la Cabaña en La Habana, donde cada año tiene lugar la Feria Internacional del Libro.
A fuerza de mucha perseverancia de unas cuantas instituciones, Sancti Spíritus solo pudo llevar hasta la XXVII edición del mayor suceso cultural del país ocho títulos, cifra discreta cuando en otras ocasiones Luminaria cargaba con un morral repleto de opciones diversas para los diferentes grupos etarios.
Pero para nadie es un secreto que la Feria merma de año en año. ¿Las causas? Los infortunios económicos de una nación que reinventa a cada segundo cómo sortearlos.
Precisamente la ausencia de alrededor del 30 por ciento de los insumos para publicar los textos aprobados para el catálogo espirituano del 2016 y el total del 2017 provocó que Luminaria dependiera de la misericordia de otras entidades para poner en manos del público lector habanero esos títulos con un reducido número de ejemplares.
Entre los favorecidos estuvieron los nacidos y gestados en tierra cabaiguanense, donde la literatura de la provincia siempre ha tenido un gremio que ha defendido con dientes y uñas la creación.
Como agasajo a los 50 años del Taller Literario Municipal Rubén Martínez Villena, en el 2017, la Dirección de Cultura de ese territorio tuvo a bien darles forma a varios volúmenes.
En poesía para adultos se presentaron y pusieron a la venta Catástrofes y otras inquietudes, de Rosa María García, quien en un tono intimista devela interioridades del ser humano; Con la magia de la luna. Antología de poesía infantil cabaiguanense, de Mirta Z. Estupiñán González y Marlene E. García, compiladoras que integran de modo armónico diferentes generaciones de poetas, nacidos o que han creado en Cabaiguán; Todo sin límites, de Sonia Hernández García, autora de un compendio de décimas escritas, y Todo el amor en décimas, una compilación de poetas cubanos del centro de la isla, tras una investigación de Marlene E. García y Rosa María García y que regresa ahora bajo el sello espirituano, luego de una primera publicación hace 16 años en Islas Canarias.
En poesía infantil ya se puede hojear Con nubes de azúcar fina, de Ubaldo Pérez Hernández, único fundador en activo del referido taller cabaiguanense que escudriña en las bellezas de la naturaleza.
Afortunadamente, el Centro Meteorológico Provincial, más allá de sus constantes análisis sobre las temperaturas y las caprichosas precipitaciones, destinó recursos y horas de trabajo para gestar el volumen Reseña histórica sobre la meteorología en Sancti Spíritus, de Freddy Ruiz, con prólogo del popular Doctor José Rubiera.
Igualmente, se puso a disposición en la feria capitalina Beltrán en la memoria, de Daisy Pilar Martín Ciriano y Mirta Beltrán Marcos, quienes honran en sus páginas a un reconocido personaje popular del siglo XX en Cabaiguán. Este texto sí es resultado del plan de Luminaria del 2017, mas contó con un empujón de la Dirección de Cultura del municipio.
Por su parte, Sancti Spíritus en la mano. Diccionario geográfico, del colectivo de autores compuesto por Marlene E. García Pérez, Esteban Acosta Rodríguez, María A. Jiménez Margolles y Félix D. Hernández Rubio, reúne nombres de arroyos, pueblos, ríos, elevaciones, vías de comunicación, puntas, cayos… identitarios y contó con el respaldo financiero de la Asamblea Municipal del Poder Popular del territorio cabecera.
De acuerdo con informaciones ofrecidas por la casa editora provincial, ya todos los libros planificados hasta la fecha están listos para ser publicados, solo se precisa de la entrada de insumos para materializar el hecho.
También se conoció que hasta finales de marzo se reciben las propuestas del próximo catálogo, idea que debería revaluarse, ya que no sirve de mucho mantener una lista de espera sin fecha exacta para la publicación de los textos.
Urge entonces asumir los ya no tan nuevos escenarios digitales y apropiarse de esas plataformas para no cortar las ganas de crear de quienes hoy no encuentran puerto seguro donde publicar.
Igualmente, se precisa aprovechar más la posibilidad que permite el Instituto Cubano del Libro de hacer alianzas con otras instituciones y organismos para que financien los proyectos literarios. Sobre esa base, se deberán hacer estudios de intereses y mercado, temas y autores a fin de no circunscribirse solamente a los mismos nombres y géneros.
MÁS DE LA FERIA
En el aniversario 86 del natalicio de Camilo Cienfuegos, uno de los mayores homenajes realizados a nivel de país fue la presentación en la Fortaleza San Carlos de la Cabaña en La Habana del título Cien fuegos de sonrisas, de la yaguayajense Elvia Rodríguez Carballo.
La casa editorial Verde Olivo apostó en esta ocasión por develar al hombre del sombrero alón, al llegar al norte de Sancti Spíritus, donde aún convive su sonrisa, criollismo e ideas.
Asimismo las artes plásticas yayaberas tuvieron la responsabilidad de la inauguración de la XXVII Feria Internacional del Libro en el Pabellón Cuba, sede de la dirección nacional de la Asociación Hermanos Saíz, con la muestra Dragones y caimanes, de Alexander Hernández Chang, quien ha sido capaz de fusionar nuestra cultura con la de China, nación a la que se le dedica el mayor suceso cultural que vive por estos días la capital del país.
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