Desde un puerto de Comodoro Rivadavia, en la provincia argentina de Chubut, cuatro familiares viajarán esta semana a bordo del buque Seabed Constructor tras la búsqueda de los 44 oficiales del submarino ARA San Juan.
El navío, perteneciente a la empresa Ocean Infinity y considerado uno de los mejores equipados del mundo, tocó esta tarde puerto argentino con la misión expresa de encontrar a la mole de hierro, de la que no se sabe nada desde el 15 de noviembre de 2017.
A 10 meses de perderse su rastro, Luis Tagliapietra, padre del corbeta Alejandro Damian y abogado querellante en la causa, junto a otros tres hermanos de compañeros de su hijo, van con el corazón pendiendo de un hilo, pero llenos de esperanza de encontrarlos.
Será la misión final y la primera en muchos meses después de la terrible noticia de la desaparición del ARA San Juan, cuya primera búsqueda aunó a más de 15 países con la más alta tecnología, sin resultados positivos.
El director de Relaciones Institucionales de la Armada, capitán de navío Rodolfo Ramallo, destacó a la prensa que ‘la Armada embarcará a tres observadores militares que darán testimonio de que la empresa cumpla el convenio con el Estado Nacional’.
Asimismo aclaró que el plazo de búsqueda podría superar los cuatro meses ya que los 120 días establecidos ‘no son días calendario sino operativos’ y los familiares tendrán acceso a la misma información que los oficiales militares.
El Seabed va con la misión de localizarlo, no rescatarlo, y para ello cuenta con ocho drones subacuáticos, ocho submarinos sin tripulación y una velocidad de exploración de mil 200 kilómetros por día.
‘Acá estamos, así amanecimos. Hoy es un día importante’, escribió en su cuenta en Facebook Tagliapietra, quien acompaña su mensaje con una imagen de Comodoro Rivadavia.
Junto a este padre, quien dio dura batalla para que el Gobierno contratara una empresa que reanudara la búsqueda, estarán Silvina Krawczyk, la hermana de Eliana Krawczyk, la única tripulante femenina que viajaba en el sumergible y la primera mujer en toda América Latina en ejercer esa profesión; José Luis Castillo (hermano de Enrique Castillo) y Fernando Arjona (hermano de Alberto Arjona).
Los cuatro se prepararon durante varias semanas para esta tarea difícil, pero a la vez llena de esperanza porque, como han dicho en varias ocasiones, no van a estar en paz hasta saber que pasó con la mole de hierro, cuyo paradero sigue siendo un misterio que yace en las frías aguas del Atlántico.
En Facebook todos le mandan fuerza a Tagliapietra y los otros tres familiares, le envían sus oraciones y esperanza y los acompañan en pensamientos.
‘Es un paso necesario para tener alguna certeza de dónde están y demás. Hay muchos familiares que todavía esperan que estén con vida’, resaltó este padre en recientes declaraciones a la prensa.
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