Restablecido el servicio de agua en toda la provincia espirituana

Ya Jatibonico recibe agua potable luego de intensas jornadas de labor para restablecer allí este servicio y poner así punto final a las afectaciones provocadas por la tormenta subtropical Alberto en los sistemas de abasto de varias ciudades y localidades espirituanas.

“Teníamos 41 estaciones de abasto dañadas, se fueron restableciendo gradual y ágilmente. Para el final solo quedaba la rotura en la conductora de la presa Lebrije hasta Jatibonico, donde ocurrió una gran afectación, nos pasamos más de una semana para poder llegar al lugar donde estaba el problema porque con la crecida de los aliviaderos se imposibilitaba la entrada. Ya el pueblo comenzó a recibir el servicio, pero esos 12 kilómetros de tuberías son viejos, con poco mantenimiento y tienen mucha pérdida de agua, a partir de ahora debemos mejorarlos gradualmente con labores de mantenimiento”, detalló Ángel Suárez, director de la Empresa Provincial de Acueducto y Alcantarillado.

Fuerzas de la Unidad Empresarial de Base (UEB) Acueducto Jatibonico y brigadas de la propia empresa provincial, con el apoyo de equipamiento de la Empresa de Rehabilitación de Obras Hidráulicas del centro y de Azcuba resultaron las protagonistas de estos complicados trabajos.

Por otra parte, las acciones de restablecimiento del servicio también incluyeron importantes quehaceres en la trinitaria conductora de San Juan de Letrán, donde las crecidas fracturaron las tuberías y la propia UEB municipal logró restituir el servicio con un bombeo que ya hoy alcanza los 120 litros por segundo. 

En el resto de las comunidades de ese sureño territorio, donde se encontraban afectadas 12 estaciones de bombeo, todo regresó rápidamente a la normalidad cuando se repuso el sistema eléctrico allí; mientras que en El Pedrero, Las Damas, Tres Atejes, Saltadero y Potrerillo, entre otros poblados donde se interrumpió el servicio ya también reciben agua potable. 

En tanto, la calidad del agua ha comenzado a mejorar: “La del río Yayabo hoy está mejor que la de la planta potabilizadora Macaguabo porque las crecidas limpiaron el cauce, además en esa planta tenemos una estabilidad en la aplicación del sulfato de alúmina. En Macaguabo casi nunca tenemos que utilizarlo, pero ahora se revolvieron las aguas y ha demorado en bajar la turbiedad. Tuvimos que restablecer el sistema de inyección de ese producto para clarificar. El tratamiento químico lo hemos incrementado. El agua se mantiene turbia, pero es potable”, aseguró Ángel Suárez.