Escambray Periódico de Sancti Spíritus
¿Podrá Sancti Spíritus marcar hoy en el medallero? Desde bien temprano en los Juegos Centroamericanos de Barranquilla entrará en acción y con opciones de ganar su primera presea.
Lo hará por intermedio del gimnasta Rafael Rosendi Torrecilla, quien integra el equipo masculino de gimnasia artística que esta tarde, en el Centro de Eventos Puerto de Oro, se presenta ante el público.
¿Podrá Rosendi lograr la primera medalla para Sancti Spíritus? Opciones tiene, y grandes, sobre todo porque él completa un colectivo que comanda el ya muy ranqueado Manrique Larduet, el mejor gimnasta cubano de la actualidad, quien ya ha probado el sabor de medallas mundiales y resultó sensación en los pasados Juegos Panamericanos de Toronto en el 2015.
También comparte aparatos con el santiaguero Randy Lerú, de muy buen aval nacional e internacional y lo completan los más bisoños Ariam Vergara (18 años) y Alberto Leyva (21).
Rosendi espera que esta vez puedan superar la actuación de hace cuatro años en Veracruz, cuando fueron terceros, detrás de Puerto Rico y Colombia, aunque en esa oportunidad compitieron con apenas tres atletas.
Entonces tenía 20 años y fue su debut en estas lides. Compitió en individuales, aunque no obtuvo resultados relevantes.
Ahora con 24 es el de mayor edad del equipo y, aunque no tiene la carretera competitiva de los dos mencionados, sí ha acumulado suficiente experiencia como para ayudar desde su maestría a cambiar el color de la medalla.
Así lo confirmó en declaraciones al diario Granma: “No vamos en desventaja porque, además de tener a dos estrellas de nivel mundial en el equipo, se han sumado dos muchachos jóvenes de mucho talento y con deseos de mostrar sus habilidades. La historia puede ser muy diferente y va a serlo, porque queremos aportar temprano a la delegación”.
Rosendi es un talento de la escalera del alto rendimiento del territorio espirituano. Con cinco años comenzó la práctica de la gimnasia artística en un área que lo llevó a la EIDE Lino Salabarría hasta las manos de Santiago Hernández y de ahí al equipo nacional en el 2010.
En ese lapso la cosecha de medallas sobrepasa las 80 entre Juegos Escolares y Juveniles, torneos Moncada, interclubes a nivel centroamericano y panamericano.
Asistió a los Juegos Panamericanos de Toronto en el 2015, donde Cuba fue quinta por equipos e individualmente compitió en arzones (10.950), anillas (14.300), barras paralelas (14.250) y barra fija (14.600), con un total de 54.100 puntos y ubicación 44.
En el clasificatorio para Barranquilla con sede en Guatemala integró el colectivo que terminó de líder con 240.400 puntos
Su inclinación por el deporte tiene un sustento genético. Su mamá y su tía fueron gimnastas y entrenadoras. “Ellas me llevaban al gimnasio cuando chiquito y me metía a dar vueltas; me gustó, por eso me divierto mucho cuando compito”, declaró al periódico Escambray cuando regresó triunfante de Veracruz.
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Escambray / ISSN 9664-1277
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