Por varios años consecutivos, Sancti Spíritus mantiene indicadores de primer mundo en la atención neonatal
Más de dos millones y medio de recién nacidos mueren anualmente antes de poder alcanzar su primer mes de vida. Cuando certezas como estas encabezan uno de los más recientes informes del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), nos convencemos aún más de que la humanidad está urgida de escuchar los latidos del otro y buscar soluciones que conlleven a una atención médica asequible y de calidad, tal como lo reclaman varias organizaciones mundiales protectoras de la infancia.
Frente a ese espejo, pese a las restricciones que impone el bloqueo económico comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba, el Sistema Nacional de Salud en la isla establece programas que garantizan el desarrollo pleno de la niña y el niño desde el mismo nacimiento.
Sancti Spíritus, una delas provincias cubanas con un trabajo sostenido en este sentido, mantiene indicadores de primer mundo en la atención neonatal.
MILAGROS DE LA CIENCIA Y EL AMOR
Con una supervivencia de niños recién nacidos graves por encima del 98 por ciento este año, el Servicio de Neonatología del Hospital General Provincial Camilo Cienfuegos, de Sancti Spíritus, confirma la excelencia en el servicio.
De acuerdo con la doctora Migdiala Soria Díaz, jefa de dicha unidad, tales resultados se deben a la labor integral de médicos, enfermeros y técnicos, todos con una elevada especialización.
De enero a la fecha ingresaron en la sala casi 740 recién nacidos, debido, fundamentalmente, al bajo peso al nacer y a la prematuridad, señaló Soria Díaz, también especialista en Medicina General Integral y Neonatología.
En el servicio se aplica, además, la terapia de contacto directo con la piel materna, llamado también Mamá Canguro, método beneficioso para los bebés que pesan entre 1,5 y 2 kilogramos al nacer y que han tenido períodos de gestación menores de lo normal, agregó.
En el cubículo piel a piel, el pequeño se mantiene con lactancia materna exclusiva y permanente con su madre; ello permite una ganancia de peso y recuperación más rápida, añadió Soria Díaz.
Según investigadores canadienses, los beneficios del contacto físico entre el bebé prematuro y la madre pueden prolongarse en el tiempo, hasta unos 20 años.
Los neonatos con pesos inferiores a los 2 500 gramos pueden sufrir complicaciones respiratorias, infecciones, hemorragias, y de la membrana hialina; de ahí el denuedo del personal médico en la recuperación de estos bebés, a quienes, una vez egresados, se les da seguimiento por un grupo multidisciplinario.
Las atenciones de primer mundo brindada en la Sala de Neonatología del mayor centro asistencial de Sancti Spíritus apuntan al compromiso de Cuba de brindar a niños y niñas el inicio de una vida saludable, presupuesto que consagra la Convención sobre los Derechos del Niño.
NO MORIR AL NACER, CUESTIÓN DE EQUIDAD
Si se reducen las inequidades mundiales, pudieran salvarse muchas vidas. Así lo considera la UNICEF en su informe sobre mortalidad en el periodo neonatal publicado a inicios de 2018.
Una asistencia sanitaria asequible, una alimentación apropiada y el consumo de agua potable son las tres principales intervenciones por la que debían apostar muchos países, afirma esta organización internacional, que en dicho documento ubica a Cuba a la cabeza de América Latina y el Caribe con la mayor proporción de supervivencia, una muerte por cada 417 nacimientos, seguida por Antigua y Barbuda, Uruguay, Chile, Costa Rica y Argentina.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.