Aguas que durante más de dos décadas se le escapaban a la Lebrije por los salideros de la calle José Miguel Gómez de Jatibonico van encontrado cauce con las nuevas tuberías de alta densidad
María González, quien ha vivido toda su vida a la vera del Parque Serafín Sánchez Valdivia, de Jatibonico, justo en uno de los laterales por donde le ha sido común ver correr el agua de la presa Lebrije, hoy comparte su alegría con Escambray.
Termo de café en mano, ahora brinda a las fuerzas constructoras de Recursos Hidráulicos, el Micons y Azcuba, convencida de que el barrio que le vio nacer recobrará el esplendor de antaño.
“Queremos recuperar la imagen que siempre caracterizó al Paseo José Miguel Gómez, pues constituye el rostro de este territorio al estar justo al lado del Ferrocarril Central”, asegura Serguey Jiménez Rodríguez, vicepresidente del Consejo de la Administración Municipal.
La fuente informó que la fase de enterramiento de las redes hidráulicas para la sustitución de 1 250 metros de la conductora que conecta la ciudad con el embalse Lebrije marcha a buen ritmo y aseguró, además, que una vez concluida los pobladores de la zona podrán conectarse al sistema del nuevo acueducto.
Aunque falta mucho por hacer en cuanto a preservación del patrimonio, según enfatizó Jiménez Rodríguez, es voluntad de las autoridades del municipio trasformar el entorno del centro histórico del poblado, por lo que en la medida de que las posibilidades económicas lo permitan también llegarán el asfalto, la jardinería, la iluminación y otros detalles a la central arteria contigua al coloso Uruguay.
Respecto a la conclusión definitiva del acueducto que se construye aquí hace más de cinco años, para el 2018 se prevé soterrar otros 5 kilómetros de redes dentro de la propia demarcación. A su vez, ya se ejecuta la instalación de un nuevo equipamiento en la Planta Potabilizadora, en aras de modernizar los decantadores y los sistemas de bombeo y de filtros.
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