Secretario General de la ONU lamenta muerte de su predecesor Kofi Annan

Con profunda tristeza supe de su muerte pues de ‘muchas maneras, Kofi Annan fue las Naciones Unidas’, expresó por medio de un comunicado.

Él condujo a la organización multilateral hacia el nuevo milenio con una dignidad y determinación inigualables, destacó Guterres.

‘Como tantos, me enorgullece llamar a Kofi Annan buen amigo y mentor. Me sentí profundamente honrado por su confianza en seleccionarme para servir como alto comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados bajo su liderazgo.’

Además, dijo, siempre podía acudir a él en busca de consejo y sabiduría, y sé que no estaba solo: Kofi Annan brindó a las personas de todo el mundo un espacio para el diálogo, un lugar para la resolución de problemas y un camino hacia un mundo mejor.

En estos tiempos turbulentos y difíciles, nunca dejó de trabajar para dar vida a los valores de la Carta de la ONU y su legado seguirá como una verdadera inspiración para todos nosotros, aseveró el diplomático portugués.

Del mismo modo, ofreció sus más sinceras condolencias a Nane Annan, su querida familia, y a todos los que lloran la pérdida de este orgulloso hijo de África, que se convirtió en un campeón mundial por la paz y la humanidad.

Kofi Annan murió está sábado en Suiza a los 80 años de edad, informó la familia y la fundación creada por el también ganador del Premio Nobel de la Paz.

De acuerdo con la información divulgada, el deceso se produjo en Berna, capital de Suiza, y Annan se encontraba acompañado por su esposa e hijos.

El comunicado circulado indicó que el diplomático ghanés fue ‘un hombre de Estado global y un internacionalista profundamente comprometido que luchó durante toda su vida por un mundo más justo y pacífico’.

También recordó los arduos esfuerzos realizados durante toda su carrera, desde su entrada en la ONU en 1962, para promover la paz, el desarrollo sostenible, los derechos humanos y el imperio de la ley.

Annan fue secretario general de Naciones Unidas de 1997 a 2006, y en 2001 recibió el Premio Nobel de la Paz como recompensa a su trabajo por un mundo más organizado y pacífico.