El intelectual y diputado cubano Abel Prieto compartió este 14 de septiembre con participantes en la Fiesta de L’Humanité una amplia información sobre la revolución de la isla, sus logros y desafíos.
En el
espacio la Aldea del Mundo, el también asesor presidencial recordó ante el
auditorio, que resultó pequeño para la cantidad de interesados, la agresividad
enfrentada por el pueblo cubano desde Estados Unidos.
Terrorismo, sanciones económicas, guerra biológica, bandidismo, una invasión
mercenaria e intentos de asesinato, sobre todo contra Fidel Castro, forman el
grueso expediente.
Pese a tan enormes presiones, la mayor de las Antillas ha
construido una revolución que respresenta una obra social extraordinaria,
subrayó.
Prieto pasó revista a las conquistas del proceso que comenzó el 1 de enero de
1959, entre ellas el acceso inclusivo a la educación, la salud y la cultura.
También significó la emancipación de la mujer, el combate a la discriminación, las
políticas públicas que no marginan a persona alguna y el avance en materia de
la ciencia, agregó.
El exministro de Cultura destacó el apoyo popular como fortaleza de la
revolución de 60 años de existencia.
‘Se trata de una obra que a escala masiva el pueblo quiere preservar por todos
los medios posibles’, sentenció.
De acuerdo con el parlamentario, la nueva Constitución de la isla es un ejemplo
de esto, porque fue el fruto de un debate y contó con el respaldo del 86 por
ciento de los cubanos que acudieron a las urnas.
En su intervención, se refirió además a la tradición internacionalista forjada
por la revolución, con África como uno de los escenarios testigo de la misma.
Respecto a los desafíos, señaló la hostilidad de Estados Unidos y su recrudecimiento
por la administración del presidente Donald Trump.
Prieto resaltó la resistencia de los habitantes de la mayor de las Antillas, y
el aporte de la cultura al empeño en mantenerla.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.