La justicia de Sao Paulo rechazó la denuncia presentada por la Fiscalía contra Luiz Inácio Lula da Silva y su hermano José Ferreira da Silva, por el presunto pago de sobornos de la empresa Odebrecht al expresidente.
Tal decisión la tomó el magistrado de primera instancia de ese estado Ali Mazloum, quien no vio ‘causa justa para la apertura de la acción criminal’ contra el exdirigente obrero.
Según el portal de noticias G1, la acusación también fue rechazada en relación con otros tres ejecutivos de Odebrecht, por presunta práctica de corrupción activa. Ellos son el denunciante y exdirector de Odebrecht Alexandrino Alencar, Marcelo Odebrecht, expresidente del grupo, y Emilio Odebrecht.
Para Mazloum, los hechos de la denuncia no tienen todos los elementos legales requeridos para configurar el delito, no hay una presuposición procesal ni una causa justa para la apertura de un proceso penal.
‘No se necesitaría un agudo sentido de la justicia, solo un poco de sentido común para darse cuenta de que la acusación se basa en interpretaciones y una confusión de suposiciones’, argumenta la determinación del juez federal, quien califica de inepta la imputación.
El lunes de la semana pasada, el Ministerio Público de Sao Paulo presentó una querella en la que, además de Lula y su hermano, también presentó cargos contra Emilio Odebrecht y su hijo Marcelo, condenado por otros casos de corrupción. De acuerdo con la denuncia, Ferreira da Silva, conocido como Frei Chico, recibió entre 2003 y 2015 unos 275 mil en pagos mensuales.
Esos desembolsos, siempre según la acusación, eran parte de un paquete de ventajas indebidas ofrecidas a Lula cambio de favorecer al grupo Odebrecht en la obtención de contratos públicos.
Al respecto, el abogado Cristiano Zanin, de la defensa del exgobernante, explicó recientemente que esa denuncia repite las mismas e irrazonables acusaciones ya presentadas en otros procedimientos penales contra el fundador del Partido de los Trabajadores.
Esclareció que ‘Lula nunca ha ofrecido al grupo Odebrecht ningún paquete de ventajas indebidas, tanto que la denuncia no describe, y mucho menos prueba cualquier acto ilegal del expresidente’.
Una vez más, se recurrió al subterfugio del ‘acto indeterminado’, en una especie de comodín utilizado para multiplicar acusaciones irrazonables contra el exsindicalista, quien cumple prisión política desde el 7 de abril de 2018, refirió el jurista.
Insistió en que el expresidente tampoco ha reclamado ninguna ventaja inadecuada para sí mismo ni para ninguno de los miembros de su familia.
Zanin alertó que la denuncia casualmente afloró el día siguiente de serias revelaciones por parte del periódico Folha de Sao Paulo sobre la acción ilegal de la Lava Jato contra Lula, en la que se mostró el ocultamiento de evidencia de inocencia y acciones ilegales destinadas a romper la democracia en el país.
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