China y Cuba resaltaron este jueves en Beijing la fortaleza de su amistad tradicional, el apoyo recíproco y la voluntad de ampliar la cooperación mutuamente beneficiosa, al conmemorar el aniversario 59 del establecimiento de las relaciones bilaterales.
Ambos países celebraron la fecha en una velada que contó con la presencia del viceministro de Relaciones Exteriores, Zheng Zeguang, altos funcionarios del Gobierno y organizaciones locales, más embajadores acreditados en la capital china.
Durante la actividad se pasó revista al progreso ininterrumpido de los nexos desde su instauración el 28 de septiembre de 1960, mientras un video mostró los distintos intercambios entre máximas autoridades de los dos estados y el resultado de la cooperación en áreas como la formación de recursos humanos, las energías renovables y la biotecnología.
El embajador cubano, Miguel Ángel Ramírez, aseguró que los nexos entre los partidos comunistas, gobiernos y pueblos se fortalecieron incesantemente y ahora gozan de una etapa de madurez e integralidad.
‘El diálogo político al más alto nivel y el frecuente intercambio de experiencias en la construcción del socialismo, de acuerdo con las características de cada país, reflejan la sólida confianza mutua existente’, acotó.
Consideró un honor para la isla que a propósito de sus 70 años como república China otorgue la Medalla de la Amistad al primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Raúl Castro, pues el gesto confirma que son naciones amigas, buenos camaradas y buenos hermanos.
Entre otras cuestiones, reiteró el agradecimiento por el firme apoyo del gigante asiático en la lucha contra el bloqueo financiero, económico y comercial impuesto por Estados Unidos, el principal obstáculo al desarrollo del territorio antillano.
Mientras, el vicecanciller Zheng Zeguang calificó a ambos gobiernos de buenos amigos, compañeros y hermanos que desarrollaron lazos a largo alcance y lo cimentaron en una fraternidad estrecha gracias a las frecuentes visitas de alto nivel.
‘China y Cuba son un paradigma para cooperación de países en desarrollo. Nuestra amistad y relaciones pasan de generación en generación con una renovada vitalidad. Además en 59 años no solo ha beneficiado a ambos pueblos sino también ha jugado papel en el fomento de paz, desarrollo y estabilidad de la región’, aseguró.
Zeguang recordó el respaldo mutuo en temas sensibles, la defensa conjunta de los respectivos intereses y la justicia internacional, así como el rechazo a la hegemonía.
También se refirió a la visita en noviembre pasado del presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, su encuentro con su par chino, Xi Jinping; y a la voluntad de Beijing de implementar sin demora los consensos de ambos mandatarios para promover más la confianza política, ensanchar la cooperación y los intercambios en diversos terrenos.
China es el segundo socio comercial de la nación caribeña y en 2017 el volumen mercantil superó los dos mil millones de dólares.
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