Confirman estabilidad en oferta de productos de aseo en Sancti Spíritus

Que si el jabón de tocador se termina en un abrir y cerrar de ojos, o la pasta dental no cubre las necesidades de la población, que si las frazadas de piso se esfumaron del Mercado Industrial, pero los revendedores las tienen a 40 pesos, o si desaparecerán estos surtidos por falta de materias primas… forman parte de los comentarios que por estos días corren de boca en boca entre la población.

En declaraciones a Escambray Adalis López Valero, directora de la Empresa Universal de Cabaiguán, entidad responsabilizada con la contratación y distribución de los productos que llegan a la red minorista de Comercio, dijo que hasta el momento solo se trata de especulaciones por parte de los consumidores y no de una crisis, pues las cifras convenidas con los proveedores nacionales para el 2019 son las mismas de etapas anteriores y se corresponden con el número de habitantes de la provincia.

“Es cierto que la demanda siempre está por encima de la oferta —aclaró Adalis—, pero el territorio cerró el año con inventarios de productos de aseo en todos los municipios; aunque no en todos los puntos de venta, porque Sancti Spíritus cuenta con el mayor número de unidades (188) vinculadas a esta distribución en el país, lo que incide en que en los mercados más céntricos y frecuentados se agote rápidamente la mercancía, contrario a los de zonas apartadas”.

La directora explicó, además, que la distribución de productos de aseo y limpieza se hace una vez al mes, y en enero se realizó y se recibieron en La Universal los surtidos de febrero; pero que en el caso del jabón de tocador y el detergente líquido las cantidades pactadas nunca resultan suficientes, lo que hace que las personas lo adquieran en demasía.

“El año anterior —aseveró— se recibieron en la provincia 8 millones de pastillas de jabón de tocador, el equivalente a 2 por habitante para cada mes, así como 1 388 000 unidades de crema dental, es decir, un tubo por núcleo de tres personas. Lo que sí estuvo afectado y seguirá con problemas es la producción de frazadas de piso y lejía de cloro, en ambos casos por falta de materias primas importadas, por ejemplo, en el caso de las colchas, de un plan de 350 000 para el 2019, solo se convinieron 100 000 importadas, las restantes 250 000 que debe aportar la industria cubana no cuentan con respaldo”.

En medio de la situación económica por la que atraviesa el país y del acaparamiento de algunas personas, la Empresa Universal y el sector del Comercio deben buscar estrategias que permitan mover inventarios de una unidad a otra para paliar el desabastecimiento en los mercados élites y si la mercancía existe en almacenes reaprovisionar en más de una ocasión los establecimientos con mayor demanda e, incluso, regular la venta de los surtidos más solicitados para lograr mayor equidad, porque, a pesar de ser liberados, requieren de un control.